El tradicional “colorado el diez”, le dio paso al “verde el diez” que en las últimas semanas hicieron que el precio de la divisa en el mercado paralelo, se colocara a dos centavos del récord de los récord: $ 10; un valor que ni el más optimista de los analistas lo tenía registrado, al menos en el corto plazo. Muchos consideraban que el valor del paralelo, recién llegaría a ese precio a fin de año, pero la realidad y la puja por la demanda, hizo caer los pronósticos. Y hoy aventurar un número para la cotización, es más difícil que acertar si la causa contra Lázaro Báez, alguna vez encontrará un responsable, más allá de las buenas intenciones del nuevo fiscal.
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El tradicional “colorado el diez”, le dio paso al “verde el diez” que en las últimas semanas hicieron que el precio de la divisa en el mercado paralelo, se colocara a dos centavos del récord de los récord: $ 10; un valor que ni el más optimista de los analistas lo tenía registrado, al menos en el corto plazo. Muchos consideraban que el valor del paralelo, recién llegaría a ese precio a fin de año, pero la realidad y la puja por la demanda, hizo caer los pronósticos. Y hoy aventurar un número para la cotización, es más difícil que acertar si la causa contra Lázaro Báez, alguna vez encontrará un responsable, más allá de las buenas intenciones del nuevo fiscal.
En una semana acortada por el feriado del 1 de Mayo, el dólar paralelo, por tercera jornada consecutiva, batió un nuevo récord. Tras tocar un techo de $ 9,98, el blue se dio un breve respiró y cerró la rueda a $ 9,88 en su punta vendedora, 25 centavos más que en la última jornada.
En Salta se dio una novedad, porque curiosamente habían divisas, pero faltaban pesos, entonces no hubo mayores sobresaltos. No obstante, operadores remarcaban que existían muy pocas operaciones. De esta manera, la moneda estadounidense finalizó una semana con fuertes avances ya que en sólo cuatro días, subió 44 centavos. En un escenario de mucha expectativa los operadores coincidieron en señalar que no hubo grandes movimientos, en virtud de que nadie quiere desprenderse de los billetes, la brecha con el dólar oficial, que avanzó medio centavo y se intercambió a $ 5,195 para la venta, es ya del 90%.
Los principales argumentos sostienen que el mercado sigue marcadamente desbalanceado por el lado de la demanda. Uno de ellos dijo que la depreciación del peso sigue en alza y que “hay expectativa y desconcierto por el salto del dólar”, pero, en la práctica, no hay importantes negocios, lo que en sintonía con el gobierno, equivaldría a decir que el mercado, dónde se mueve el “paralelo” es muy reducido.
Por otra parte la escalada del “paralelo” se espiraliza en momentos en que las reservas profundizan su tendencia bajista: el Banco Central perdió el mes pasado US$ 911 millones y cerró el período con US$ 39.535 millones en sus arcas, el nivel más bajo en seis años. Asimismo se acrecentó el debate entre referentes del oficialismo y de la oposición sobre el rumbo económico y el impacto de esta nueva escalada del billete en la vida cotidiana de la población.
“Estábamos esperando que la liquidación sojera pusiera fin a la caída de las reservas, que fue de 3.000 millones en el primer trimestre. Pero llegamos a un punto en el que la soja ya no alcanza, porque se redujo drásticamente el ingreso de dólares financieros por créditos e inversión”, destacaba con preocupación un analista. Mientras otros opinan, en la city hay un punto de coincidencia y así lo explican: “Compradores hay, pero los que ralean cada vez más son los vendedores, porque nadie quiere desprenderse de los billetes. Ni aun los turistas” y eso que los extranjeros desconocen que el dólar paralelo subió en lo que va del 2013 casi el triple de lo que rinde un plazo fijo en todo un año.