Otra amenaza, la segunda en muy pocos días. La Fiscalía Federal de Guillermo Marijuán, quien imputó al empresario kirchnerista Lázaro Báez por supuesto lavado de dinero, radicó ayer una denuncia penal por amenazas telefónicas de muerte en sus oficinas, según fuentes tribunalicias.
La presentación fue hecha por un empleado de la fiscalía número 9 en lo Criminal y Correccional ante la Cámara Federal porteña, que por sorteo asignó la denuncia número 3.880/13 al juzgado federal número 7, encabezado por el juez Sebastián Casanello. Justamente Casanello -que asumió como juez el año pasado- debe investigar a Lázaro Báez y decidió anteayer clausurar la causa que el fiscal Marijuán impulsaba contra su jefa, la procuradora general Alejandra Gils Carbó, por supuesto nombramiento “a dedo” de fiscales subrogantes y ad hoc. Aunque Marijuan rehusó dar detalles del caso a los periodistas, en el edificio de Comodoro Py 2002, trascendía que en la llamada intimidatoria al fiscal una voz anónima habría amenazado: “Si apela (lo resuelto por Casanello) le vamos a matar a sus hijas”.
Esta sería la segunda amenaza de muerte recibida por el fiscal a cargo de impulsar la investigación contra Báez por lavado de dinero. “El domingo, a las 15.30, estábamos en un bar del barrio porteño de Belgrano donde nos juntamos siempre, mientras su hija menor terminaba un partido de hockey. Estábamos en una mesita afuera del bar y apareció una persona que le dijo "¿Doctor Marijuán?'. El respondió: “Sí”', y esta persona dejó un sobre en la mesa y siguió caminando. Cuando lo abrió, vio que era una amenaza concreta, decía: "Pará de joder. Te vamos a limpiar a vos y a tu familia'”, dijo el abogado Andrés Rabinovich. “Lo traté de convencer para hacer la denuncia -añadió el abogado-, pero no quería asustar todavía más a la familia. Cuando le dije que yo lo iba a contar porque esto no podía quedar así, me dijo: "Hacé lo que quieras, yo no voy a hacer nada'”.
No es la primera vez que Marijuán debe enfrentar una amenaza. Ya en 2001, cuando comandaba una unidad especial de investigaciones de la Anses había recibido un paquete con un féretro en miniatura y un esqueleto para que dejara de avanzar en una causa por jubilaciones truchas en La Rioja. Esta nueva advertencia llega cuando el fiscal impulsa dos causas: una contra la procuradora general de la Nación, Gils Carbó, por presuntas anomalías en la designación de fiscales, y otra contra Báez, por supuesto lavado de dinero.
El Procelac, en la mira
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Otra amenaza, la segunda en muy pocos días. La Fiscalía Federal de Guillermo Marijuán, quien imputó al empresario kirchnerista Lázaro Báez por supuesto lavado de dinero, radicó ayer una denuncia penal por amenazas telefónicas de muerte en sus oficinas, según fuentes tribunalicias.
La presentación fue hecha por un empleado de la fiscalía número 9 en lo Criminal y Correccional ante la Cámara Federal porteña, que por sorteo asignó la denuncia número 3.880/13 al juzgado federal número 7, encabezado por el juez Sebastián Casanello. Justamente Casanello -que asumió como juez el año pasado- debe investigar a Lázaro Báez y decidió anteayer clausurar la causa que el fiscal Marijuán impulsaba contra su jefa, la procuradora general Alejandra Gils Carbó, por supuesto nombramiento “a dedo” de fiscales subrogantes y ad hoc. Aunque Marijuan rehusó dar detalles del caso a los periodistas, en el edificio de Comodoro Py 2002, trascendía que en la llamada intimidatoria al fiscal una voz anónima habría amenazado: “Si apela (lo resuelto por Casanello) le vamos a matar a sus hijas”.
Esta sería la segunda amenaza de muerte recibida por el fiscal a cargo de impulsar la investigación contra Báez por lavado de dinero. “El domingo, a las 15.30, estábamos en un bar del barrio porteño de Belgrano donde nos juntamos siempre, mientras su hija menor terminaba un partido de hockey. Estábamos en una mesita afuera del bar y apareció una persona que le dijo "¿Doctor Marijuán?'. El respondió: “Sí”', y esta persona dejó un sobre en la mesa y siguió caminando. Cuando lo abrió, vio que era una amenaza concreta, decía: "Pará de joder. Te vamos a limpiar a vos y a tu familia'”, dijo el abogado Andrés Rabinovich. “Lo traté de convencer para hacer la denuncia -añadió el abogado-, pero no quería asustar todavía más a la familia. Cuando le dije que yo lo iba a contar porque esto no podía quedar así, me dijo: "Hacé lo que quieras, yo no voy a hacer nada'”.
No es la primera vez que Marijuán debe enfrentar una amenaza. Ya en 2001, cuando comandaba una unidad especial de investigaciones de la Anses había recibido un paquete con un féretro en miniatura y un esqueleto para que dejara de avanzar en una causa por jubilaciones truchas en La Rioja. Esta nueva advertencia llega cuando el fiscal impulsa dos causas: una contra la procuradora general de la Nación, Gils Carbó, por presuntas anomalías en la designación de fiscales, y otra contra Báez, por supuesto lavado de dinero.
El Procelac, en la mira
El fiscal federal Federico Delgado pidió investigar al titular de la Procuraduría Adjunta de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (Procelac), Carlos Gonella.
Fuentes judiciales informaron que Delgado impulsó la denuncia contra Gonella que presentó el legislador de Proyecto Sur Julio Raffo por los delitos de incumplimiento de autoridad y violación de deberes de funcionario público, y le pidió al juez Julián Ercolini medidas de prueba para avanzar sobre la actuación de la Procelac. Como titular de la Procelac, Gonella, junto al fiscal Ramiro González quien reemplazó a Guillermo Marijuán durante sus vacaciones, firmaron el primer requerimiento de investigación por lavado de dinero pero omitieron imputar a Báez, aunque se sospecha que hubo un borrador en el que se acusaba al empresario kirchnerista.