Esteban Burgos tiene un desafío que involucra a todo el plantel de Gimnasia y Tiro, pero que también trasciende lo colectivo, por su necesidad de recuperar aquel nivel que lo catapultó a una exitosa venta de su pase en el tramo inicial del torneo, y por la imperiosa premisa del albo de borrar aquella pálida imagen mostrada el sábado pasado en el Martearena, en el clásico ante Juventud. En relación con aquel paso en falso, el polifuncional jugador millonario reconoció que la derrota “dolió, porque nos ganaron en todas las pelotas divididas. Juventud no salvó el año ganándonos, pero les dimos vida. Seguimos enojados y dolidos por cómo se perdió. Además, no nos gusta escuchar que se nos critique, pero nos da orgullo porque el periodismo y la gente saben lo que nosotros podemos dar. Pero dentro de todo lo negativo, nos tocó perder así ahora y no más adelante. Es mejor recibir un cachetazo en este momento y no después, en los play off, porque ahí te quedás afuera”, se consoló.
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Esteban Burgos tiene un desafío que involucra a todo el plantel de Gimnasia y Tiro, pero que también trasciende lo colectivo, por su necesidad de recuperar aquel nivel que lo catapultó a una exitosa venta de su pase en el tramo inicial del torneo, y por la imperiosa premisa del albo de borrar aquella pálida imagen mostrada el sábado pasado en el Martearena, en el clásico ante Juventud. En relación con aquel paso en falso, el polifuncional jugador millonario reconoció que la derrota “dolió, porque nos ganaron en todas las pelotas divididas. Juventud no salvó el año ganándonos, pero les dimos vida. Seguimos enojados y dolidos por cómo se perdió. Además, no nos gusta escuchar que se nos critique, pero nos da orgullo porque el periodismo y la gente saben lo que nosotros podemos dar. Pero dentro de todo lo negativo, nos tocó perder así ahora y no más adelante. Es mejor recibir un cachetazo en este momento y no después, en los play off, porque ahí te quedás afuera”, se consoló.
Burgos osciló en diálogo con El Tribuno entre la autocrítica y la visión de que hubo críticas en exceso.
“Creo que fue el peor partido que jugamos, pero la sensación de la gente fue que nos pasaron por arriba y nos ganaron en actitud. Yo no lo veo así y eso molestó. Pero tampoco dejamos de reprocharnos las cosas que hicimos mal: tuvimos errores tácticos que permitieron que ellos nos puedan atacar. Tenemos que salir a jugar sin fijarnos en el rival, porque cuando jugamos para nosotros y pensamos solo en ganar, es otra la historia. Pero perder con Juventud nos motiva el doble para lo que viene, nos envalentona, como cuando nos mojan la oreja”, se despachó.
En cuanto al próximo rival, Sportivo Belgrano (jugarán el lunes a las 22 en el Gigante), el juvenil advirtió sobre la peligrosidad de Juan Pablo Francia y Juan Manuel Aróstegui, a quienes “habrá que controlarlos muy bien”, pero, a su vez, “más que pensar en ellos, tenemos que jugar pensando en ganar, así funciona”.
Dirigencia y plantel limaron asperezas
No solo la derrota ante Juventud Antoniana golpeó a los jugadores y a la subcomisión de fútbol de Gimnasia y Tiro. Además de un resultado y un rendimiento que no dejaron conforme a nadie, el tenso clima generado en la semana previa, cuando el plantel millonario se plantó y amenazó con no concentrar si no se les cancelaba los premios y el porcentaje adeudado de los sueldos de marzo, sembró cierto malestar en algunos dirigentes, teniendo en cuenta que habría existido un acuerdo previo de pago, según manifiestan.
Luego de la amenaza de tormenta interna, el plantel y los miembros de la subcomisión se reunieron anoche, asado mediante, para limar asperezas al respecto de aquel conflicto. Pero también se les pidió que se focalicen en el aspecto futbolístico luego de la derrota en el clásico y para lo que resta del torneo, teniendo en cuenta que el objetivo inmediato pasa por sumar los seis puntos que restan en el endecagonal (Sportivo Belgrano de local y San Martín de Tucumán en La Ciudadela) para finalizar, al menos, en la quinta posición y así encarar con mayor margen de error la etapa de play off con vistas a la segunda plaza de ascenso.
En otro orden, el DT Víctor Riggio definirá hoy en el Gigante del Norte, a puertas cerradas, los once componentes que saldrán a medirse el lunes por la noche ante el verde de San Francisco. Con la casi segura inclusión de Franco Ascencio en el once titular en reemplazo del suspendido Matías Ceballos, el equipo del Tano se alinearía con estos apellidos: Mulieri; Burgos, Plaza y Rodrigo López; Chaves, Young, Vezzani y Villarreal; Ceballos; Agudiak y Leandro Zárate. El estratega apostará a la misma fórmula y esquema y le brindará un crédito a los vencidos, en la afanosa búsqueda del ascenso restante.
Santamarina y San Martín, los candidatos
Talleres de Córdoba ascendió y muchos equipos se sacaron un “peso” de encima con un rival con beneficios extrafutbolísticos en el medio. Con la carrera planteada por el segundo ascenso, Esteban Burgos considera que “San Martín y Santamarina” son los rivales a vencer. “Me imagino peleando con esos equipos hasta el final. Tenemos con qué pelear, jugadores que te cambian la cara en cualquier momento y una defensa muy sólida”, ponderó.
Burgos tampoco omitió opinar sobre el bajón en su rendimiento, en el que mucho tuvo que ver su seguidilla de lesiones. “Con Juventud jugué mal, pero tengo mucho para dar”, expresó el juvenil cuya mitad del pase le pertenece a Fernando Hidalgo, con quien está proyectando un futuro en otra categoría después de junio.
“Sé que todo depende de mi rendimiento, pero ojalá en poco tiempo pueda dar ese gran paso a Primera”, anheló.