El mes de mayo trajo un aura fresco para el comercio exterior argentino, más allá de que las proyecciones anticipan un crecimiento de las importaciones de gas y combustibles, la situación sería compensada con el rendimiento de la soja, un verdadero “ángel de la guarda” de la economía. No obstante el fuerte incremento de las compras de combustibles constituyeron el principal factor de la caída del superávit en los primeros cinco meses, aunque no ocurrió lo mismo en mayo, mes que se revirtió la tendencia.
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El mes de mayo trajo un aura fresco para el comercio exterior argentino, más allá de que las proyecciones anticipan un crecimiento de las importaciones de gas y combustibles, la situación sería compensada con el rendimiento de la soja, un verdadero “ángel de la guarda” de la economía. No obstante el fuerte incremento de las compras de combustibles constituyeron el principal factor de la caída del superávit en los primeros cinco meses, aunque no ocurrió lo mismo en mayo, mes que se revirtió la tendencia.
Durante el mes que pasó las ventas al exterior se incrementaron casi un 49% respecto al primer mes del año, cuando alcanzaron US$ 5.665 millones, en comparación a los US$ 8.429 millones de mayo; una cifra que mostró un comportamiento similar en los primeros cinco meses, claro que en sintonía con el gobierno, las importaciones (compras del exterior) o salida de dólares, también tuvieron una sostenida suba, achicando de manera preocupante el saldo positivo de la balanza comercial.
En enero de este año estuvo en apenas US$ 280 millones, pero en mayo, se amplió a los US$ 1.338 millones, una cifra que hizo sonreír a más de uno, especialmente a Guillermo Moreno.
De acuerdo a los datos suministrados por el Indec, por segundo mes consecutivo el sector externo trajo una buena noticia, el crecimiento de las exportaciones y en particular de las cantidades vendidas al exterior (+10%). Pero a pesar del buen desempeño exportador, el saldo comercial arrojó una caída interanual (comparada con el mismo mes del año pasado) del superávit del 3% debido al aumento de las importaciones (del 17%).
En los cinco primeros meses de 2013 la balanza comercial fue superavitaria en 3.799 millones de dólares, y disminuyó un 34% con respecto a igual período del año anterior. El total exportado fue de US$ 33.370 millones contra US$ 29.571 millones desembolsados en importaciones. Estos datos muestran una suba del 4% para las exportaciones y del 13% para las importaciones, en comparación con el mismo período del año anterior.
Mayores aumentos
Los subrubros que registraron mayores aumentos (en valores absolutos) en las exportaciones fueron: Petróleo crudo, Material de transporte terrestre, Semillas y frutos oleaginosos, Cereales, Piedras, metales preciosos y sus manufacturas, monedas. Mientras que los subrubros que registraron disminuciones fueron: Residuos y desperdicios de la industria alimenticia, y Productos químicos y conexos, entre otros. El mayor ascenso interanual en valores absolutos correspondió a los Productos primarios que subieron el 29% debido a un incremento conjunto de las cantidades (14%) y de los precios (13%). Le siguió el aumento de las Manufacturas de origen industrial (13%) debido a una suba de las cantidades (17%) mientras los precios disminuyeron (-4%). Los Combustibles y energía crecieron el 45% como consecuencia del incremento de las cantidades exportadas (46%) y la baja de precios (-1%). Por último disminuyeron las ventas de Manufacturas de origen agropecuario (-2%) debido a una baja en las cantidades (-2%) ya que los precios no tuvieron variación. El nivel que mostraron los indicadores, por el momento parece darle razón a la estrategia oficial, aunque en el Comercio Exterior no se sabe hasta dónde llega la bonanza.
Autos: más dependencia extranjera
El desagregado de las transacciones comerciales, sea dentro de la frontera como hacia el resto del mundo, reflejó una creciente incidencia del intercambio con otros países, relegando a segundo término la demanda de unidades nacionales. En ese sentido las exportaciones de autos ascendieron en mayo a 49.594, con un salto de 73,1%, por debajo de las ventas de importados que sumaron 54.390 máquinas, se elevaron 49,8%, en ambos casos en comparación con igual mes de 2012. El balance fue deficitario en 4.796 unidades. Más modesto fue el crecimiento de las entregas a concesionarios de automotores salidos de las líneas de montaje de las terminales: 9,9%, a 31.256 máquinas.
Semejante brecha entre la demanda de unidades nacionales 36,5% y las de equipos foráneos 63,5%, se atribuye a la búsqueda de una diferencia de cambio entre el dólar oficial al que ingresan las partes y máquinas terminadas procedentes del resto del mundo, más el arancel que pudiera corresponder, y la cotización que mantenga el dólar libre.