En total se entregaron 120 permisos transitorios, hasta tanto se elabore una ley de alcance provincial que legalice la actividad.
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En total se entregaron 120 permisos transitorios, hasta tanto se elabore una ley de alcance provincial que legalice la actividad.
Los remises compartidos que cubren el trayecto General Güemes - Salta Capital recibieron recientemente las obleas que los habilita a continuar brindando el servicio a los usuarios de la ciudad de Güemes de forma legal.
Los trabajadores del sector habían llevado a cabo en los últimos días una serie de manifestaciones, apostados sobre la traza de las rutas nacionales 34 y 9.
Reclamaban por la falta de habilitaciones que les permitiera trabajar de forma normal y contar así con su fuente de trabajo.
En total, se otorgaron 120 permisos de forma conjunta por la comuna local y la Dirección de Transporte de la Provincia. No obstante, hay que tener presente que se trata de permisos con carácter provisorio.
En este sentido, les permitirá a los remiseros trabajar hasta tanto se elabore una ley de alcance provincial que legalice el ejercicio de este tipo de actividad.
“Hoy en la localidad son más de 200 los vehículos que realizan estos viajes interurbanos. Los que no posean obleas corren el riesgo de ser secuestrados y multados”, manifestó el director de Tránsito local, Hugo Corbo.
Aniversario de la ciudad
Por su parte, la comunidad de General Güemes festejó su 125 aniversario con un acto en la plazoleta Centenario.
Al carecer de una fecha fundacional, como ocurre con varias localidades salteñas, y luego de largas investigaciones realizadas por historiadores locales, se decidió que la fecha de creación del municipio se celebrara el 23 de julio de 1888.
Es justamente esa fecha en la que el entonces presidente Juárez Celman firmó un decreto en el que se ordena el traslado de la estación Santa Rosa hacia el norte, donde hoy está emplazada la ciudad de Güemes, que fue creciendo alrededor de dicha estación.
Al principio el poblado que empezaba a emerger se conocía como Santa Rosa, pero pronto adoptó el nombre de General Güemes.
Su estratégica ubicación le permitió un pujante crecimiento hasta transformarse en municipio cabecera del departamento Güemes.
La privatización del ferrocarril fue una estocada casi mortal, dado el alto desempleo que ello generó. Hoy los vecinos buscan recobrar aquel esplendor perdido.