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La inflación hace aumentar la recaudación sin subir impuestos

Jueves, 25 de julio de 2013 23:13

Sabemos que todos los meses aumenta la recaudación de impuestos y en varias oportunidades el monto es récord respecto de períodos anteriores, motivo más que válido para que nuestra Presidenta la semana pasada afirme: “Me siento muy orgullosa de decir que pertenezco a un gobierno que lleva diez años de ejercicio sin aumentar un solo impuesto ni crear un solo nuevo impuesto. Acá hay muchos industriales, empresarios, hombres de finanzas, trabajadores. Todavía recordamos cuando se crearon tablitas para descontar salarios, ahorros forzosos, cuando se quedaron con los ahorros o cuando crearon impuestos”.

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Sabemos que todos los meses aumenta la recaudación de impuestos y en varias oportunidades el monto es récord respecto de períodos anteriores, motivo más que válido para que nuestra Presidenta la semana pasada afirme: “Me siento muy orgullosa de decir que pertenezco a un gobierno que lleva diez años de ejercicio sin aumentar un solo impuesto ni crear un solo nuevo impuesto. Acá hay muchos industriales, empresarios, hombres de finanzas, trabajadores. Todavía recordamos cuando se crearon tablitas para descontar salarios, ahorros forzosos, cuando se quedaron con los ahorros o cuando crearon impuestos”.

Si aumenta la recaudación y no se crean nuevos impuestos, ¿como explicamos este “fenómeno fiscal”? Es muy fácil: a) por la inflación se recauda nominalmente más, b) en el caso del Impuesto a las Ganancias, no se modifican ni los mínimos no imponibles ni se realizan ajustes por inflación, c) a otros impuestos tampoco se les actualizan sus topes o escalas.

Esta mecánica utilizada explica el porqué también aumenta la presión tributaria; es decir, cada vez se paga más impuestos por la misma actividad. Hace diez años el 21% de lo producido en ese año (Producto Bruto Interno PBI) servía para pagar impuestos. Actualmente se necesita el 37% del PBI

Es la inflación

Es obvio que si aumentan los precios de los bienes y servicios, los sueldos, las tarifas, etcétera, también aumentará la recaudación. No es necesario que aumenten los porcentajes de impuestos ya que con el solo hecho de que suba la base imponible para cobrar el impuesto, incrementa la recaudación.

Si por año tenemos una inflación promedio del 25%, esto implica que la recaudación también aumentará el mismo porcentaje. Lo que queda por analizar son las causas cuando se recauda por encima o por debajo de los porcentajes de inflación.

Si la recaudación de impuestos es superior a la inflación, significa que puede haber aumentado la actividad gravada. Por el contrario, si es inferior, la actividad ha disminuido. Desde esa perspectiva se pueden hacer los análisis y comparaciones y no analizarlo como un dato aislado.

El Impuesto a las Ganancias

A) Impuesto al trabajo

No caben dudas que el Impuesto a las Ganancias es hoy un impuesto al trabajo que aumentó significativamente la recaudación. Las razones son varias. Entre ellas citamos:

1) No se modificó el mínimo no imponible (MNI) en la misma proporción en que aumentaron los sueldos; es decir, cuando un trabajador recibe su retribución o sueldo o jornal, si el mismo supera un cierto importe será contribuyente de este impuesto y para determinar la base imponible (monto sujeto a impuesto) se le descuenta un determinado importe fijo que se lo conoce como MNI y a ese importe se le aplica un porcentaje (tablita de Machinea) que va subiendo en la medida que aumenten los sueldos y este será el monto del impuesto a pagar.

Si aumentan los sueldos y no se incrementa en la misma proporción el MNI, el trabajador cada vez tendrá que pagar sobre un monto más alto el porcentaje más elevado del Impuesto a las Ganancias.

El Instituto de Análisis Fiscal (IARAF) ejemplifica esta afirmación de la siguiente manera: si un trabajador en el 2001 tenía ingresos que superaban en un 50% los mínimos, tributaba entonces el 9% sobre ese excedente. En el 2013 “pagará por ese excedente una alícuota efectiva de aproximadamente el 19%, es decir más del doble que en el 2001”.

En el 2001 el 9,7% de los asalariados tributaba Ganancias. Hoy se estima que llegan al 30% los que lo tienen que hacer. Este esquema se agrava cuando vemos que cada vez más jubilados son sujetos pasivos. Quizá no se debería llamar “Impuesto a las Ganancias” porque es hasta deprimente para el que lo tiene que pagar.

B) Ganancias para empresas

La ley del Impuesto a las Ganancias previó para los casos de inflación el llamado “ajuste por inflación” y el “ajuste de las amortizaciones de los bienes de las empresas”. Pero por la Ley de Emergencia Económica (que no me explico porqué no la derogaron aún ya que tiene que ver con la crisis económica y social del 2001), su aplicación está suspendida. Esto significa que para determinar la ganancia sujeta a impuestos no se pueden actualizar los costos de los bienes adquiridos para venderlos ni las amortizaciones. Obviamente suben las ganancias impositivas y se paga más impuesto.

Lo mismo ocurre para otros impuestos que no se modificaron por la inflación, como el impuesto que grava los bienes personales de las personas físicas cuyos parámetros para calcularlos no se modifican desde el 2007, al igual que el monotributo donde el sujeto pasivo aporta de acuerdo a una escala o monto de ventas que no se modifica desde el 2010 y, al aumentar estas, pasa a una escala superior tributando más.

Presión tributaria y elecciones

Varios candidatos han incluido en sus promesas electorales que modificarán los impuestos -especialmente a la Ganancias-, implementando la actualización permanente tanto del Mínimo No Imponible como también las escalas y alícuotas para que sigan los aumentos de sueldos o la inflación de acuerdo a las necesidades.

También, aprovechando esta campaña y como una forma de compensar lo que el Gobierno dejará de percibir por actualizar las bases imponibles, se volvió a instalar la necesidad de grabar la compraventa de bonos, acciones y los plazos fijos. Es un tema que da para más.

Lo cierto es que nuestra Presidenta tiene razón al afirmar que aumentó la recaudación; pero también tiene que decir que subió la presión tributaria. Quizás aclarando oscurece, ¿o no?

 

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