Ricardo Caruso Lombardi es muy criticado por parte del ambiente futbolístico por su atípica forma de manejarse y su lengua filosa. Pero hay algo en que todos coinciden: en su don de encontrar futbolistas "perdidos" e insertarlos en la elite del fútbol argentino.
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Ricardo Caruso Lombardi es muy criticado por parte del ambiente futbolístico por su atípica forma de manejarse y su lengua filosa. Pero hay algo en que todos coinciden: en su don de encontrar futbolistas "perdidos" e insertarlos en la elite del fútbol argentino.
Su último hallazgo fue Hernán Boyero, quien llegó de una manera atípica. "Me crucé con un amigo y me contó de él. Vi los últimos partidos por Youtube, lo llamé, le pregunté un par de cosas y lo traje", explicó. Además, sorprendió la baja erogación de dinero que tuvo que hacer Argentinos para contratar al centrodelantero: "Costó entre 20 y 30 mil dólares porque hubo que pagar una rescisión de contrato en Bolivia".
El ex Bloomig lleva tres partidos disputados y anotó dos goles (uno a San Lorenzo en la pasada jornada). De esta manera, el "Gran Carhumo", como así reconoció el DT que lo llaman algunos, parece no haberse equivocado con la elección.
"El convencimiento de los jugadores es importante. Sabíamos que éramos el pato de la boda. Jugábamos contra el boom del torneo, nosotros éramos subestimados por todos. Sabía que con la pelota parada los íbamos a complicar, no fue casualidad", concluyó Caruso Lombardi en diálogo con Radio 9.