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El manto de mitos sobre la esterilización

Sabado, 31 de agosto de 2013 03:53

Ya sea por un problema de salud, o por una decisión personal terminar con la etapa reproductiva a través de una cirugía pone sobre la mesa una serie de preguntas que parecen no tener respuestas. La más recurrente de ellas es si después de ser sometido a una ligadura de trompas o una vasectomía seguirán teniendo impulsos sexuales. Es decir deseo.

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Ya sea por un problema de salud, o por una decisión personal terminar con la etapa reproductiva a través de una cirugía pone sobre la mesa una serie de preguntas que parecen no tener respuestas. La más recurrente de ellas es si después de ser sometido a una ligadura de trompas o una vasectomía seguirán teniendo impulsos sexuales. Es decir deseo.

Esta idea suele presentarse con mayor fuerza en los hombres que no tienen tan incorporada la idea de una vasectomía.

Al respecto Juan Carlos Kusnetzoff, doctor en sexología ayuda a destruir los mitos que existe sobre estas intervenciones. “Lo que se consigue, mediante estos procedimientos, es impedir el traslado de los óvulos -en el caso de ligadura de trompas- o el traslado de espermatozoide en el caso de ligadura de los conductos deferentes. Existen algunos informes científicos, afirmando que tanto hombres, como mujeres, experimentan aumento de deseo sexual y cierta desinhibición. Probablemente sean consecuencias de factores psicológicos como la reducción de la ansiedad debido a que ha desaparecido el temor de provocar el embarazo”, advierte el especialista.

“Estos procedimientos, no afectan en absoluto la continuación del deseo sexual, ni afectan los mecanismos de erección y eyaculación. Tampoco afecta en las mujeres, el mecanismo normal de la menstruación, no afectándose en absoluto, el deseo sexual, o la frecuencia de coito”, explica Kusnetzoff.

Sin embargo estos dos métodos de planificación familiar no son los únicos mitos que existen sobre la sexualidad. En el caso de las mujeres hablar de menopausia y de una histerectomía (extracción del útero) puede poder a varios la piel de gallina. “Existen ciertos cambios fisiológicos concomitantes con la menopausia y algunos de ellos pueden volver desagradable al coito, pero eso no quiere decir que afecte el apetito sexual”, explica el especialista.

En los hombres la operación prostática también despierta temores. Sin embargo la mayoría de los varones intervenidos quirúrgicamente, retienen su capacidad eréctil, si ya la tenían antes. La presencia de una compañera deseosa y estimulante, es esencial para que un hombre retenga su capacidad eréctil. “Aunque parezca mentira, o una broma, si un hombre deja de funcionar sexualmente después de la cirugía prostática, la razón muy bien puede ser que estaba buscando una excusa para terminar su vida sexual”, dice Kusnetzoff.

 

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