¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

22°
29 de Marzo,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Tolar Grande, colmado de turistas por la Pachamama

Sabado, 31 de agosto de 2013 03:53

Las ofrendas a la Pachamama, que comenzaron los primeros días de agosto en San Antonio de los Cobres, finalizarán hoy en Tolar Grande con una emotiva ceremonia.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Las ofrendas a la Pachamama, que comenzaron los primeros días de agosto en San Antonio de los Cobres, finalizarán hoy en Tolar Grande con una emotiva ceremonia.

Contingentes de turistas de Buenos Aires, Catamarca y Salta colmaron la plaza hotelera de la localidad andina este fin de semana, para participar de una de las celebraciones ancestrales más importantes del norte argentino: el culto a la Madre Tierra.

“Recurrimos a las casas de familia para recibir a los turistas. Los salteños parecen identificarse cada vez más con esta ceremonia. La capacidad de Tolar es de 80 camas y ya sobrepasamos las 100 reservas”, señaló a El Tribuno Giovana Cosseddu, titular del Area de Turismo local.

Un rito ancestral

La ofrenda final a la Madre Tierra se realizará en el cerro Sagrado y estará a cargo del cacique de la comunidad kolla. Participarán el intendente Sergio Villanueva, autoridades del Ministerio de Cultura y Turismo de la Provincia, vecinos y visitantes.

A las 16 dará inicio la caravana de ofrendantes hacia la cima del cerro. Antes de partir, se entonarán las estrofas del Himno Nacional Argentino y se designará a las personas que oficiarán de convidadores, servidores, “chacheros” y “yokeras”.

¿Cómo se realiza el ritual?

En la cima del cerro, los presentes procederán a colocar sus ofrendas en el mojón. Antes de abrir el pozo sagrado, el cacique clavará un cuchillo en el lado este del pozo, en homenaje al Tata Inti o Padre Sol, y realizará la primera ofrenda.

Luego, los presentes pasarán a dejar sus ofrendas de a dos, dado que este número simboliza dualidad, complemento y equilibrio.

Las ofrendas consisten en maíz, papas, habas, empanadas, locro, anchi. Luego se arrojan hojas de coca y cigarrillos.

Una vez realizado el convite, los presentes deben lavarse las manos con piris o sémola tostada y poner un puñado en los bolsillos para la buena suerte.

Posteriormente se da a beber a la Madre Tierra siete bebidas alcohólicas, entre las que se destacan licores, whisky, mentas y vinos.

Para acompañar la ceremonia, en un brasero los chacheros se dedican a generar un humo limpiador en base a la cha cha, una planta típica de la zona. Su función es purificar el ambiente y mantener alejadas las energías negativas.

Por último, el participante debe despedirse de la Madre Tierra tocándola y acercándose al pozo sagrado para agradecer por todo lo recibido, pedirle protección y que cumpla lo que cada uno desea.

Luego las “yokeras” deben retirarle a cada uno su yoki o pulsera sagrada, entregada el año anterior, y recibir una nueva.

La música andina y los bailes típicos acompañarán toda la ceremonia, que finalizará con el cierre del pozo.

Baile popular

Ya en el pueblo se realizará una gran show y baile en los salones de la comuna local. Actuarán Los Sauzales, Paola Arias y Los Peñeros. También habrá un espectáculo de música latinoamericana denominado La Viajerita, y actuará Luisa Calcumil, cantora mapuche de Río Negro.

El baile comenzará con la presentación del cantante David Leiva.

¿Qué es el yoki?

En agosto es común el uso del yoki, una pulsera ceremonial de dos colores tejida de lana de vicuña, llama u oveja. Según la creencia andina, debe usarse en la mano izquierda para obrar bien y en el tobillo derecho para caminar por el buen sendero. Ayuda a encontrar el equilibrio.

Si se sale o se rompe, debe ser enterrada o quemada para que vuelva a la Tierra Madre.

Deidad femenina

La Pachamama es concebida como la madre que nutre y protege a los seres humanos. Se le rinden homenaje para reparar el daño cada vez mayor que el hombre ejerce en la tierra, y se le agradece los alimentos que ofrece para el sustento.

Es un culto preincaico que se mantiene vivo en las zonas andinas de Ecuador, Perú, Bolivia y norte de Chile y Argentina.

 

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD