Más de un centenar de candidatos a legisladores nacionales de casi todos los partidos políticos firmaron un acta compromiso con la industria y asumieron la defensa del sector. Aceptaron esa responsabilidad en un acto que se hizo ayer en el Obelisco, ante más de 1.500 referentes de pequeñas y medianas empresas del país y en plena campaña electoral para las legislativas del 27 de octubre próximo.
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Más de un centenar de candidatos a legisladores nacionales de casi todos los partidos políticos firmaron un acta compromiso con la industria y asumieron la defensa del sector. Aceptaron esa responsabilidad en un acto que se hizo ayer en el Obelisco, ante más de 1.500 referentes de pequeñas y medianas empresas del país y en plena campaña electoral para las legislativas del 27 de octubre próximo.
Convocados por la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME), a la invitación respondieron funcionarios oficialistas y dirigentes de la oposición. Veinticuatro horas antes de que en el país se celebre el Día de la Industria, candidatos y funcionarios acordaron defender uno de los sectores más importantes del país por la cantidad de mano de obra que aporta y la actividad económica que genera. Al escenario, que fue montado en pleno corazón porteño, se subieron la ministra de Industria, Débora Giorgi; el gobernador de Buenos Aires, Daniel Scioli; el diputado por el PRO, Federico Pinedo, entre otros.
El titular de CAME, Osvaldo Cornide, destacó el logro institucional: “Es importante que todos los sectores se pongan de acuerdo en relación con temas como la inseguridad, la política exterior y el costo de vida”. En el acto se pusieron en valor “las políticas nacionales que dan un marco extraordinario para reindustrializar, sustituir importaciones y aprovechar todas estas nuevas oportunidades que se han generado”.
Scioli destacó las políticas que vinculan la educación al mundo del trabajo, generando recursos humanos con las escuelas técnicas y agrarias que se han recuperado, con las nuevas universidades, con los sectores productivos. A ese reconocimiento se sumaron el ministro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni; la diputada nacional Diana Conti; el titular de Garantizar SGR, Leonardo Rial, directivos de CAME, candidatos a legisladores nacionales, dirigentes empresarios de todo el país y referentes políticos de distintos partidos.
La ministra Giorgi hizo un raconto, y aseguró que “la industrialización significa mayor igualdad, más y mejor distribución del ingreso y darle la oportunidad a las pymes de volver a abrir las persianas que habían cerrado en la década de los 90”.
Cifras y apoyo
Según la funcionaria, el país puede mostrar hoy una sustitución de importaciones sustentable y competitiva, “que hace a la pujanza del mercado interno”. Aseguró, además, que “si hoy podemos decir que tenemos más de 220.000 pymes es porque estuvimos trabajando juntos. La Argentina es el primer exportador de software y primer exportador y generador de biotecnología”, y marcó la importancia de seguir generando mayor articulación público-privada para consolidar los logros obtenidos y continuar con el proceso de transformación con inclusión social.
La importancia del apoyo financiero para las pequeñas y medianas empresas fue destacado por los políticos, lo que Giorgi aprovechó para recordar las herramientas con las que cuenta el ministerio que dirige, orientadas al sector como los programas del Bicentenario y Capital Semilla, destinado a jóvenes de entre 18 y 35 años.
El pedido de la Rural para el campo
El presidente de la Sociedad Rural Argentina, Luis Miguel Etchevehere, no estuvo en el Obelisco, pero desde la exposición rural de Concordia (Entre Ríos) pidió ayer “propuestas concretas para el campo y para el país”.
“Necesitamos conocer cuáles son las leyes que los legisladores impulsarán en el Congreso de la Nación y que cada partido exponga las prioridades para la Argentina”, enfatizó Etchevehere a 60 días de las elecciones legislativas de octubre próximo.
El dirigente ruralista también llamó a “refundar el federalismo para que las autonomías provinciales se ejerzan plenamente y para que la coparticipación federal sea una distribución justa, no una dádiva que el poder central use políticamente. Este gobierno sigue ensañándose en contra del campo, del motor de la economía argentina”.
Para Etchevehere, quedó demostrado que las medidas durante la llamada década ganada fracasaron y detalló la situación de varios sectores.