Después de quedar eliminados de la Copa Davis en República Checa, Martín Jaite, el capitán argentino, no tuvo problemas y llegó a Salta para el deleite de chicos y grandes. Invitado por la Fundación Jugando con Todos, presidida por Estanislao Villanueva, el extenista dialogó en exclusiva con El Tribuno.
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Después de quedar eliminados de la Copa Davis en República Checa, Martín Jaite, el capitán argentino, no tuvo problemas y llegó a Salta para el deleite de chicos y grandes. Invitado por la Fundación Jugando con Todos, presidida por Estanislao Villanueva, el extenista dialogó en exclusiva con El Tribuno.
“La invitación surgió a través de Estanislao (Villanueva), tenía ganas de invitarme para charlar con los jugadores, entrenadores, padres y hacer una clínica. Me pareció una buena iniciativa, soy de hacer clínicas y charlas en Buenos Aires y bastante por el interior del país”, contó Jaite. Y agregó sobre sus visitas a la provincia: “En el año 91 vine a jugar amistosos con el español Emilio Sánchez. Después volví hace muchos años con la Asociación, había un torneo en el Sporting Club y hace poco tiempo, de vacaciones. Me gusta mucho Salta, me gusta todo el norte argentino”.
La Fundación Jugando con Todos intenta hacer del tenis un deporte popular. ¿Se logrará teniendo en cuenta que parece elitista?
No es un deporte tan elitista. Pasa que si vos tomás como referencia a los chicos de barrios muy humildes, esos chicos cualquier cosa les puede resultar prohibitiva, lamentablemente. El país debería ser más inclusivo, obviamente que la propuesta de Estanislao es buenísima. Es un tipo al que le gusta mucho el tenis y quiere que la mayoría de los chicos tenga la posibilidad de practicarlo. Pero no tomaría el tenis como un deporte elitista, sí lo fue hace muchos años, ahora lo practican muchos. Lamentablemente en Argentina la gente muy humilde no puede pagar una cuota para ir a un club.
¿Qué te llevas de Salta?
Siempre digo que yo no vengo a enseñar nada, vengo a compartir vivencias, formas de vida con la gente, padres, profesores, chicos. En realidad, se aprende mucho cuando uno viene acá, eso es lo lindo: nunca dejas de aprender. Hablo de mis experiencias pero también me llevo muchas cosas.
¿Hay una idea previa?
La gente que vino a la clínica es entusiasta y quizás la mayoría no va a ser profesional pero, para mí, la idea es que un chico haga deportes porque es salud. Siempre digo cómo no podemos destinar más presupuesto al deporte que te soluciona muchos temas.
¿Qué nivel tiene el tenis argenti no?
Es muy bueno, estamos muy bien considerados internacionalmente. Estamos en una etapa de transición en la que se retiró lo que era la “gran legión” con David Nalbandian que también está haciendo sus últimos tiros. Es muy difícil comparar a los nuevos jugadores con la legión porque fue una camada de jugadores inigualables. Tenemos muy buenos jugadores detrás de Del Potro, hay un futuro bueno y no es una transición crítica, hay recambio.
Fuiste top ten, ¿por qué al país le cuesta tanto tener un Nº 1?
Porque son muy pocos los que llegan a serlo. Aparte es muy diferente a ser top ten que a pelear por ser el Nº 1. Yo sabía perfectamente que no tenía nivel para ser Nº 1. Juan Martín (Del Potro) puede llegar a ser número uno. En mi caso, la motivación era mejorar el ranking. Dentro de los diez jugadores no todos van a ser Nº 1. Hoy, jugadores como Gasquet (Nº 9) no puede llegar porque no tiene nivel para eso.
¿Tenías fe de lograr la hazaña en República Checa?
Siempre uno tiene esperanzas. Sabíamos que la serie era muy difícil, corríamos en desventajas pero de repente si el primer día terminábamos 1 a 1 teníamos alguna esperanza. Pero la verdad que nos ganó un equipo mejor que el nuestro.
¿Por qué el equipo de la Davis históricamente tuvo problemas?
No sé por qué, yo puedo hablar de los últimos años. La verdad que la mayoría de las veces tuvimos un grupo muy bueno. El último fue genial, un nivel de convivencia muy bueno. El tenis es un deporte individual, el jugador no está acostumbrado a trabajar en equipo.
¿Cuál fue la decisión más difícil que tuviste que tomar como capi tán?
El año pasado lo tuvimos que dejar afuera a David (Nalbandian) contra República Checa. Las decisiones más complicadas son cuando vos les tenés que informar a los jugadores que no están en el equipo. La otra muy difícil es cuando dentro del equipo informás al jugador que no jugará el dobles.
¿Qué balance hacés?
Creo que es bueno, pero no me gusta hablar mucho de mí; prefiero que la gente opine. Llegamos a dos semifinales, tuvimos dos años entre los cuatro primeros. Tuvimos más chances de llegar a la final el año pasado y en la mitad de la serie contra República Checa Juan Martín nos dijo que no podía jugar el domingo, ahí se nos bajaron mucho las chances. Y este año llegamos a semifinales con un equipo que nadie esperaba.
¿Soñás con la ensaladera?
Estaría bueno pero tampoco me va la vida en eso. No es que sea un bajón muy grande. Sí es un sueño ganar la Copa, pero también puede ser que no se gane o que se gane más adelante sin que estemos como capitanes.
¿Se puede ganar la Davis sin Del po?
Siempre los equipos tienen que presentar los mejores jugadores, si juega Juan Martín tenemos más chances que si no juega. Pero, bueno, este año no jugó y llegamos a semifinales.
¿Cómo es tu relación con él?
No tengo ganas de hablar de ese tema, no me gusta puntualizar sobre un jugador. Mi función no es hablar individualmente, sino ser capitán de Copa Davis.
¿Quién gana, los checos o Serbia?
Creo que gana Serbia; es más favorita porque juega Djokovic, es local y elegirá la superficie. Seguramente, no elegirá cancha rápida.
¿El sorteo para el 2014 fue favo rable?
Es un buen sorteo. Sí, favorable, lo que no quiere decir que sean partidos fáciles. Jugamos de local (contra Italia) y podemos elegir superficie. Nos tocó un sorteo que nos es malo.
¿Cómo te sentís como capitán, tenés presión?
Lo disfruto mucho, la presión la tienen los jugadores que son los que ganan y pierden los partidos. Los que estamos afuera estamos colaborando. Sí, como capitán hay que poner la cara pero los verdaderos protagonistas son los jugadores, los que sufren y gozan.
¿Después que vas a seguir hacien do?
Seguir organizado el ATP de Buenos Aires en la Copa Claro, haciendo clínicas y eventos como los de hoy. Volver a eso, a una vida normal.
En esa vida normal, ¿qué te gusta hacer?
Soy un tipo muy simple. Disfrutar con mi familia, mis amigos, no tengo grandes gustos, soy de viajar. Pero no tengo fanatismo por muchas cosas.
¿Sos de leer, disfrutas de las comidas, qué otras cosas te gustan?
Sí, he leído mucho. No soy un asiduo lector pero cuando me gusta una novela me pongo a leer. Ahora estoy leyendo la autobiografía de Mandela. Mi placer más grande es comer. De todo. Me gusta mucho el asado, los mariscos, el sushi, disfruto mucho la comida... puedo comer en un bodegón o un restaurante cinco estrellas. Soy de acompañar las comidas con vino tinto.
¿Te gusta la política?
Soy lector de política, me gusta hablar y también el debate político pero ahora no me gustaría opinar sobre la política actual. Hay cosas que me gustan del Gobierno nacional.
¿Qué otro deporte practicás?
Corro tres veces a la semana. Hace más de diez años que todas las mañanas hago yoga. Me hace muy bien, me tranquiliza.
Martín Jaite en plena charla y dejando algunos de sus valiosos conceptos a los chicos salteños que se acercaron al Sporting Club para compartir con el capitán de la Selección argentina de Copa Davis. El exjugador vino invitado por la Fundación Jugando con Todos.