Poco después del incidente, los menores ladrones de cachorros fueron detenidos sin ejercer violencia.
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Poco después del incidente, los menores ladrones de cachorros fueron detenidos sin ejercer violencia.
Un policía que se encontraba en persecución de tres ladrones se trabó en lucha con un remisero, a quien quiso ordenarle que persiguiera a los delincuentes. Al hallarse de civil y con la pistola 9 mm reglamentaria en la mano, el chofer dudó y pensó en un asalto, y se defendió del hombre armado. En el forcejeo hizo que éste se hiriera con su propia arma en la zona abdominal. El curioso hecho ocurrió en la madrugada de ayer cuando un efectivo policial que revista en la División Seguridad Urbana comprobó que tres muchachos habían ingresado a su vivienda, de donde le sustrajeron, supuestamente, tres cachorros de pitbull.
Afectado por la osadía de los delincuentes salió en persecución de los mismos, sin esperar el apoyo de la comisaría de su jurisdicción, con el arma reglamentaria en la mano.
Al abordar un remise para dar alcance a los delincuentes, aparentemente en una confusión el remisero se trabó en lucha con el policía, que se hallaba de civil, provocando que disparara el arma contra su propio cuerpo. El disparo alcanzó al policía en el abdomen, razón por la que fue trasladado al hospital San Bernardo por una ambulancia del Samec.
En tanto, personal de la dependencia con jurisdicción en la zona demoró a los tres menores, uno de 14 y dos de 17 años, a quienes les secuestraron los animales del policía herido, y recibió la denuncia del remisero involucrado en el incidente, quien aseguró que se defendió de un asaltante y no de un policía.