A pesar de las medidas que tomó el Gobierno nacional, como la ampliación de la canasta de Precios Cuidados o las compras en cuotas del programa Ahora 12, analistas sostienen que para lo que resta de 2014 se mantendrá la tendencia negativa en las ventas de los productos de la canasta básica.
Los especialistas sostienen que la desaceleración del consumo comenzó a mediados de 2011 aunque aclaran que este es el primer año que va a cerrar con un registro negativo.
Se proyecta para todo el 2014 una baja del 1,5% en la venta de productos de la canasta básica, sumándose así a otros indicadores negativos, como los que se esperan para los shopping centers (-3%), electrodomésticos (-10%), autos (-25%) y motos (-30 por ciento).
De acuerdo con un informe privado, la mitad de las familias argentinas reconoce estar consumiendo menos que en 2013, contra el 10% que admite una suba en sus compras y entre las causas de esta recesión, el 44% de los hogares dice que la plata está justa, mientras que otro 22% sostiene que directamente no llega a fin de mes.
Los analistas destacan que ya quedó definitivamente atrás la tendencia del ahorro con consumo, es decir, intentar proteger de la inflación el poder de compra de los salarios a través de la compra anticipada de bienes.
Sobre las proyecciones para el año que viene, un año electoral, los analistas son muy cautos aunque las esperanzas de un cambio de tendencia están puestas en lo que pueda suceder a partir de enero, ante unas eventuales negociaciones con los fondos buitre y la posibilidad de que, después de dar ese paso, el país vuelve acceder a los mercados internacionales de deuda. Lo cierto es que por primera vez en la era kirchnerista el consumo cayó un 1,2 por ciento algo que no se había dado desde hacía una década en el país.
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A pesar de las medidas que tomó el Gobierno nacional, como la ampliación de la canasta de Precios Cuidados o las compras en cuotas del programa Ahora 12, analistas sostienen que para lo que resta de 2014 se mantendrá la tendencia negativa en las ventas de los productos de la canasta básica.
Los especialistas sostienen que la desaceleración del consumo comenzó a mediados de 2011 aunque aclaran que este es el primer año que va a cerrar con un registro negativo.
Se proyecta para todo el 2014 una baja del 1,5% en la venta de productos de la canasta básica, sumándose así a otros indicadores negativos, como los que se esperan para los shopping centers (-3%), electrodomésticos (-10%), autos (-25%) y motos (-30 por ciento).
De acuerdo con un informe privado, la mitad de las familias argentinas reconoce estar consumiendo menos que en 2013, contra el 10% que admite una suba en sus compras y entre las causas de esta recesión, el 44% de los hogares dice que la plata está justa, mientras que otro 22% sostiene que directamente no llega a fin de mes.
Los analistas destacan que ya quedó definitivamente atrás la tendencia del ahorro con consumo, es decir, intentar proteger de la inflación el poder de compra de los salarios a través de la compra anticipada de bienes.
Sobre las proyecciones para el año que viene, un año electoral, los analistas son muy cautos aunque las esperanzas de un cambio de tendencia están puestas en lo que pueda suceder a partir de enero, ante unas eventuales negociaciones con los fondos buitre y la posibilidad de que, después de dar ese paso, el país vuelve acceder a los mercados internacionales de deuda. Lo cierto es que por primera vez en la era kirchnerista el consumo cayó un 1,2 por ciento algo que no se había dado desde hacía una década en el país.