Ayer, la temperatura ascendió a los 30 grados, algo poco común para esta época del año.
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Ayer, la temperatura ascendió a los 30 grados, algo poco común para esta época del año.
Según el meteorólogo Ignacio Nievas, el fenómeno se debió al efecto zonda de altura o incipiente. Esto generó no solo calor sino también baja humedad en el ambiente.
El especialista explicó que este viento norte corría en altura ya que no se sintieron fuertes ráfagas, pero si las consecuencias que este trae consigo. A las 6 de la mañana el termómetro marcaba 6 grados y había una neblina espesa que solo permitía una visibilidad de 100 metros. Esto provocó que el aeropuerto Martín Miguel de Gemes tuviera que suspender las actividades. Por la tarde, la temperatura subió 24 grados llegando a los 30.