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Consultá lo que quieras saber sobre la influencia de los astros en tu vida | Astrología

Sabado, 09 de agosto de 2014 13:08
Neliana Chessel responderá las consultas astrológicas de los lectores de El Tribuno 
Tu futuro en el amor, la salud, el trabajo, los negocios y el dinero, tu relación con otros signos, vínculos con gente de tu sexo y con los del sexo opuesto, cómo serán los meses que vienen... Estos temas y todo lo que quieras saber sobre la influencia de los astros en tu vida será respondido desde el 21 de agosto a través del consultorio on line de El Tribuno atendido por la especialista salteña Neliana Chessel. El correo donde debes comunicarte es [email protected].
La identidad de las personas que realicen sus consultas se mantendrá en absoluta reserva.
A continuación, la presentación del tema que ella misma hizo, como apertura de este espacio (que también se publicará en el Suplemento "S" de los sábados) para que nuestro lectores la conozcan y sepan que cuentan con una profesional on line y en papel que atenderá todas tus inquietudes

Astrología, ¿para qué?

Por Neliana Chessel

Si nos detenemos un momento en nuestro agitado quehacer diario y observamos la vida que vibra y bulle a nuestro alrededor, podremos ver que cada insecto, cada planta, cada semilla, contienen en su interior la cantidad necesaria de energía, ordenada de forma tal, que los llevará a ser aquello que vinieron a ser.
Como reyes de la creación, ¿no traeremos también nosotros un plano elaborado en detalle, dibujado por el mismo Arquitecto Superior que soñó la vida en el Universo en su totalidad?
“San Agustín escribía que “Dentro de mí hay uno que es más yo mismo que yo mismo”. Aristóteles usó la palabra “Entelequia” para referirse a la evolución y al florecimiento pleno de algo que originariamente se hallaba en estado potencial.
El filósofo danés Kierkegaard observó que la forma más común de la desesperación es la de no ser quienes realmente somos, y agregó que “una forma de desesperación aún más profunda es la que se genera en la decisión de ser alguien diferente de uno mismo”.
La alegría de vivir, la calma interior, aquello que sea para cada ser humano lo más parecido a la felicidad, estará intrínsecamente ligado a la posibilidad de descubrir nuestro plano interior y orientar la energía a construir aquello que vinimos a ser.
¿Dónde buscarlo? ¿Cómo conocer su diseño? ¿Cómo colaborar en su realización?
Sólo debemos escudriñar sus señales en ese cielo con el que soñaron los hombres de todas las civilizaciones de la humanidad, buscarlo en las estrellas. En tu propio cielo, en el que te cubrió cuando surgiste a la vida.
Naciste, y cuando el aire llenó tus pulmones por vez primera, el firmamento habló. En el soberbio dialecto de las estrellas resonó un grito eterno, que bordó los planetas sobre tu cuerpo, dentro de tu corazón, y en el material incorpóreo de tu alma, dibujando para siempre, tus energías a estrenar.
Tu Carta Natal las muestra.
Podrás descubrir en ella cómo enfrentar la vida, qué es lo valioso para ti, te hablará de los hijos y los romances, del trabajo y de la salud, te explicará a quién elegirás para compartir la vida, te mostrará lo que quieres llegar a ser y con quienes sumarás esfuerzos para alcanzar mayores logros que te trasciendan.
Pero si te atreves a mirar más allá de tu piel, tu Carta te hablará de la osadía con la que naces y renaces, o de la confusión que te asalta al intentarlo.
De aquello por lo que habrás de pelear para hacerlo tuyo, ya que es lo único que te sustentará, cuando nada más te pertenezca.
Del color de tu mente, y de las herramientas que habrás de empuñar para acallarla, o para enseñarle a susurrar apenas, quedamente...y que así te permita escuchar.
Del destello más refulgente de tu creatividad, ése que te distinguirá, tornándote irrepetible y notable, y de cómo desapegar de su brillo.
De aquellos dones que crees no poseer y los buscas en otro, hasta que llega la hora de hacerlos tuyos, aprobar la asignatura, y no relacionarte ya desde la carencia.
De las noches obscuras que habrás de transitar hasta resolver el laberinto, y beber en la fuente que les otorga significado.
De tus búsquedas, y de las verdades propias que desentierres, vislumbrando el paisaje al que podrán llevarte.
De los triunfos, las victorias y el ego logrados, a los que habrás de sobrevolar para alcanzar cumbres mayores.
Y sumando la gota propia al océano del inconsciente universal, hacerte uno con la eternidad.
Hay muchos sabores intensos y delicados perfumes en tu Carta Natal.
Te invito a compartir un rato, todos los sábados en El Tribuno, y hablar sobre ellos, para que los disfrutemos juntos.

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Tu futuro en el amor, la salud, el trabajo, los negocios y el dinero, tu relación con otros signos, vínculos con gente de tu sexo y con los del sexo opuesto, cómo serán los meses que vienen... Estos temas y todo lo que quieras saber sobre la influencia de los astros en tu vida será respondido desde el 21 de agosto a través del consultorio on line de El Tribuno atendido por la especialista salteña Neliana Chessel. El correo donde debes comunicarte es [email protected].
La identidad de las personas que realicen sus consultas se mantendrá en absoluta reserva.
A continuación, la presentación del tema que ella misma hizo, como apertura de este espacio (que también se publicará en el Suplemento "S" de los sábados) para que nuestro lectores la conozcan y sepan que cuentan con una profesional on line y en papel que atenderá todas tus inquietudes

Astrología, ¿para qué?

Por Neliana Chessel

Si nos detenemos un momento en nuestro agitado quehacer diario y observamos la vida que vibra y bulle a nuestro alrededor, podremos ver que cada insecto, cada planta, cada semilla, contienen en su interior la cantidad necesaria de energía, ordenada de forma tal, que los llevará a ser aquello que vinieron a ser.
Como reyes de la creación, ¿no traeremos también nosotros un plano elaborado en detalle, dibujado por el mismo Arquitecto Superior que soñó la vida en el Universo en su totalidad?
“San Agustín escribía que “Dentro de mí hay uno que es más yo mismo que yo mismo”. Aristóteles usó la palabra “Entelequia” para referirse a la evolución y al florecimiento pleno de algo que originariamente se hallaba en estado potencial.
El filósofo danés Kierkegaard observó que la forma más común de la desesperación es la de no ser quienes realmente somos, y agregó que “una forma de desesperación aún más profunda es la que se genera en la decisión de ser alguien diferente de uno mismo”.
La alegría de vivir, la calma interior, aquello que sea para cada ser humano lo más parecido a la felicidad, estará intrínsecamente ligado a la posibilidad de descubrir nuestro plano interior y orientar la energía a construir aquello que vinimos a ser.
¿Dónde buscarlo? ¿Cómo conocer su diseño? ¿Cómo colaborar en su realización?
Sólo debemos escudriñar sus señales en ese cielo con el que soñaron los hombres de todas las civilizaciones de la humanidad, buscarlo en las estrellas. En tu propio cielo, en el que te cubrió cuando surgiste a la vida.
Naciste, y cuando el aire llenó tus pulmones por vez primera, el firmamento habló. En el soberbio dialecto de las estrellas resonó un grito eterno, que bordó los planetas sobre tu cuerpo, dentro de tu corazón, y en el material incorpóreo de tu alma, dibujando para siempre, tus energías a estrenar.
Tu Carta Natal las muestra.
Podrás descubrir en ella cómo enfrentar la vida, qué es lo valioso para ti, te hablará de los hijos y los romances, del trabajo y de la salud, te explicará a quién elegirás para compartir la vida, te mostrará lo que quieres llegar a ser y con quienes sumarás esfuerzos para alcanzar mayores logros que te trasciendan.
Pero si te atreves a mirar más allá de tu piel, tu Carta te hablará de la osadía con la que naces y renaces, o de la confusión que te asalta al intentarlo.
De aquello por lo que habrás de pelear para hacerlo tuyo, ya que es lo único que te sustentará, cuando nada más te pertenezca.
Del color de tu mente, y de las herramientas que habrás de empuñar para acallarla, o para enseñarle a susurrar apenas, quedamente...y que así te permita escuchar.
Del destello más refulgente de tu creatividad, ése que te distinguirá, tornándote irrepetible y notable, y de cómo desapegar de su brillo.
De aquellos dones que crees no poseer y los buscas en otro, hasta que llega la hora de hacerlos tuyos, aprobar la asignatura, y no relacionarte ya desde la carencia.
De las noches obscuras que habrás de transitar hasta resolver el laberinto, y beber en la fuente que les otorga significado.
De tus búsquedas, y de las verdades propias que desentierres, vislumbrando el paisaje al que podrán llevarte.
De los triunfos, las victorias y el ego logrados, a los que habrás de sobrevolar para alcanzar cumbres mayores.
Y sumando la gota propia al océano del inconsciente universal, hacerte uno con la eternidad.
Hay muchos sabores intensos y delicados perfumes en tu Carta Natal.
Te invito a compartir un rato, todos los sábados en El Tribuno, y hablar sobre ellos, para que los disfrutemos juntos.

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