Luego de la derrota frente a Croacia era necesario que el seleccionado argentino se recupere con un triunfo ante Filipinas. Esa victoria llegó, ya que Argentina se impuso 85 a 81, no sin antes sufrir y defender la ventaja hasta los segundos finales del partido disputado en el Palacio de Deportes de Sevilla.
Fue la tercera presentación del equipo que dirige Julio Lamas en el Mundial de básquet de España; está a un paso de asegurarse la clasificación a octavos de final, situación que podría darse mañana cuando enfrente a Senegal, desde las 12.30.
La chapa del final de los primeros veinte minutos señaló un 43-38 en favor de la Argentina, pero a lo largo de los dos primeros cuartos el equipo dirigido por Lamas fue del desconcierto y la imprecisión a la seguridad y orden que debió tener desde el arranque.
En el inicio del último cuarto el seleccionado asiático puso un parcial de 8-0, y volvió a meterse en partido. Algo que se ratificaría momentos después cuando empató 71-71.
El partido fue palo a palo hasta los últimos dos minutos, en ese instante apareció la garra de Andrés Nocioni. El Chapu había tenido un partido para el olvido (2/10 en tiros de campo), pero en los momentos decisivos volvió a ser clave y determinante.
Párrafo aparte se merece Luis Scola, que con los 19 puntos que logró ayer llegó a 525 tantos en copas del mundo. Es el quinto máximo anotador en la historia de los mundiales.