El presidente de YPF, Miguel Galuccio, afinó y repasó durante la mañana y la tarde la presentación que dio ayer en el marco de la exposición Argentina Oil & Gas. La platea acompañó su esfuerzo: por mucho, el ejecutivo fue la figura más convocante del encuentro, a tal punto que decenas de personas tuvieron que permanecer paradas durante la exposición.
Sólo dos meses antes del cambio de gobierno, algunas palabras del presidente de YPF resultaron al menos sugestivas. En tres o cuatro ocasiones, por ejemplo, hizo referencia al futuro. Y se reservó algunos anuncios, algo poco frecuente en el último tiempo. El más sobresaliente: la empresa perforó en la concesión Loma Campana, en el territorio denominado Vaca Muerta (Neuquén) y en sociedad con Chevron, un pozo en busca de petróleo que arrojó un altísimo rendimiento.
"Hoy tenemos un superpozo en el shale [así se denomina a los recursos de hidrocarburos no convencionales que se explotan en Vaca Muerta]. Se llama Loma Campana 992. Tiene una producción inicial de 1630 barriles diarios de crudo. Esto, para los que son petroleros, es un superpozo en convencional, en no convencional y en la Argentina. No creo que en los últimos años, en el país, hayamos visto un pozo con esta producción inicial", remarcó.
Más allá de la novedad, los técnicos de YPF creen que la nueva perforación podría cambiar el paradigma de producción de crudo en Vaca Muerta. La longitud completa del pozo es de 5350 metros, con 2000 metros de longitud horizontal y 28 etapas de estimulación hidráulica, un récord en el contexto local.
La petrolera estatizada quiere seguir estudiando alternativas similares. Por eso está planificando un pozo con 35 etapas de fracturación. "Si les dijera que en la Argentina tenemos toda la tecnología para hacer un pozo de estas características, les mentiría. Lo podríamos haber hecho más fácil", sostuvo Galuccio. "No podemos decir que entendemos el shale en su conjunto, pero sí que tenemos un showcase [un caso de muestra] que permite poner a la Argentina, después de Estados Unidos, como el país con más potencial de desarrollo. No es algo hipotético, sino que lo hemos probado", completó.
Galuccio también anunció que la petrolera superó los 50.000 barriles de crudo diarios equivalentes (es decir, crudo más gas) en Vaca Muerta, un umbral que se había trazado para este año. De manera que casi el 10% de su producción proviene de esa formación.
Con respecto al gas, el principal insumo energético del país, Galuccio sostuvo: "Creemos que tenemos las condiciones económicas y tecnológicas para que el desarrollo del gas y la sustitución de importaciones se hagan en el mediano plazo una realidad". Pero aclaró que en esos términos la empresa debe buscar alternativas para agregarle valor. El presidente de YPF sugirió que la empresa debe ser en el futuro líder petroquímico de la región, junto a posibles socios. "Eso nos permitiría desarrollar yacimientos que hoy no podemos", sostuvo.
Fuente: La NAción
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El presidente de YPF, Miguel Galuccio, afinó y repasó durante la mañana y la tarde la presentación que dio ayer en el marco de la exposición Argentina Oil & Gas. La platea acompañó su esfuerzo: por mucho, el ejecutivo fue la figura más convocante del encuentro, a tal punto que decenas de personas tuvieron que permanecer paradas durante la exposición.
Sólo dos meses antes del cambio de gobierno, algunas palabras del presidente de YPF resultaron al menos sugestivas. En tres o cuatro ocasiones, por ejemplo, hizo referencia al futuro. Y se reservó algunos anuncios, algo poco frecuente en el último tiempo. El más sobresaliente: la empresa perforó en la concesión Loma Campana, en el territorio denominado Vaca Muerta (Neuquén) y en sociedad con Chevron, un pozo en busca de petróleo que arrojó un altísimo rendimiento.
"Hoy tenemos un superpozo en el shale [así se denomina a los recursos de hidrocarburos no convencionales que se explotan en Vaca Muerta]. Se llama Loma Campana 992. Tiene una producción inicial de 1630 barriles diarios de crudo. Esto, para los que son petroleros, es un superpozo en convencional, en no convencional y en la Argentina. No creo que en los últimos años, en el país, hayamos visto un pozo con esta producción inicial", remarcó.
Más allá de la novedad, los técnicos de YPF creen que la nueva perforación podría cambiar el paradigma de producción de crudo en Vaca Muerta. La longitud completa del pozo es de 5350 metros, con 2000 metros de longitud horizontal y 28 etapas de estimulación hidráulica, un récord en el contexto local.
La petrolera estatizada quiere seguir estudiando alternativas similares. Por eso está planificando un pozo con 35 etapas de fracturación. "Si les dijera que en la Argentina tenemos toda la tecnología para hacer un pozo de estas características, les mentiría. Lo podríamos haber hecho más fácil", sostuvo Galuccio. "No podemos decir que entendemos el shale en su conjunto, pero sí que tenemos un showcase [un caso de muestra] que permite poner a la Argentina, después de Estados Unidos, como el país con más potencial de desarrollo. No es algo hipotético, sino que lo hemos probado", completó.
Galuccio también anunció que la petrolera superó los 50.000 barriles de crudo diarios equivalentes (es decir, crudo más gas) en Vaca Muerta, un umbral que se había trazado para este año. De manera que casi el 10% de su producción proviene de esa formación.
Con respecto al gas, el principal insumo energético del país, Galuccio sostuvo: "Creemos que tenemos las condiciones económicas y tecnológicas para que el desarrollo del gas y la sustitución de importaciones se hagan en el mediano plazo una realidad". Pero aclaró que en esos términos la empresa debe buscar alternativas para agregarle valor. El presidente de YPF sugirió que la empresa debe ser en el futuro líder petroquímico de la región, junto a posibles socios. "Eso nos permitiría desarrollar yacimientos que hoy no podemos", sostuvo.
Fuente: La NAción