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Otro niño wichi murió como consecuencia de la pobreza

Lunes, 16 de noviembre de 2015 00:30
Misión Rivadavia, donde murieron tres niños wichis en un fin de semana. Foto: Javier Corbalán. 
Ezequiel R. tenía 1 año y 2 meses, un cuadro avanzado de diarrea, deshidratación y problemas respiratorios. Aunque estuvo internado en el hospital de La Unión (Rivadavia Banda Sur), el lugar más próximo al paraje donde vivía, su familia decidió volver a su casa. Cuando lo detectaron estaba muy grave, se decidió trasladarlo de inmediato a Orán, pero no resistió y murió en el camino, el pasado jueves 12.
José A. tiene un año de edad, un cuadro avanzado de desnutrición, parasitosis, edema y neumonía. Perdió uno de sus ojos y por eso fue derivado desde Misión La Esperanza (Santa Victoria Este) al hospital Materno Infantil. En este caso, Atención Primaria de la Salud indicó que el niño tenía un peso normal en los controles realizados el 25 de mayo y el 16 de junio. Los padres no concurrieron al control de julio; en agosto y septiembre se observó menos peso y en octubre no hicieron el control. Por eso debió ser trasladado en helicóptero a la Capital, pero su estado aún es crítico.
El Chaco salteño, con 30 mil habitantes, tiene una densidad poblacional dispersa de 1,17%, en una superficie 7 veces mayor que Capital.
La Diócesis de Orán donó el terreno para la Cooperadora para la Nutrición Infantil. Ahora funciona en ese predio, en La Unión.
Yanella S., a pesar de sus cortos 5 meses de vida, ya había sido operada una vez del corazón. Vive en Pozo El Mulato (Alto la Sierra, municipio Santa Victoria) y fue trasladada de urgencia al hospital de Tartagal con hipertensión, líquido en los pulmones y desnutrición leve.
Jesús F. es un nene de 1 año y seis meses. En estado de abandono fue trasladado de urgencia al hospital de Orán. Sus padres tienen patologías psiquiátricas y ya perdieron un hijo en la misma situación.
Los datos son absolutamente reales y muy recientes (de las dos últimas semanas) tanto como la dolorosa pobreza en la que están inmersos, y los casos, junto a otros dos de adultos graves, fueron detectados por el denominado Refuerzo Estival que el Ministerio de la Primera Infancia comenzó este mes con un primer destino en Santa Victoria Este, y un segundo en Rivadavia Banda Sur, donde permanecerá hasta hoy, con probabilidad de prolongarse un poco más.

El refuerzo
El informe de la primera fase de trabajo indica que en Santa Victoria Este se atendieron 500 pacientes, se identificaron y asistieron a 80 con diversas patologías, 56 niños, 10 embarazadas y 14 adultos y realizaron cuatro traslados de urgencia.
“Esto es propio de la pobreza. Nuestro norte sufre las consecuencias de una realidad muy compleja, con demasiadas carencias y con analfabetismo”
"Hay dos puntos que atender: la integralidad, para conocer causas y no quedar en las consecuencias, y la unión entre todas las partes”.
"El trabajo es complicado y se agrava por el difícil acceso al agua. Solo vamos a avanzar unidos en una red entre organizaciones que miremos lo mismo”.
Carlos Abeleira, ministro de Primera Infancia
"Tenemos tres tipos de acciones que van desde lo urgente a lo preventivo y las de fondo, que se ubican en el largo plazo. En la organización del Refuerzo Estival participan, además de Primera Infancia, el Ministerio de Salud y los equipos de Atención Primaria de cada lugar, Derechos Humanos y Educación, en este caso con el mantenimiento de escuelas abiertas para refuerzo alimentario en varias de ellas", le explica a El Tribuno el ministro de Primera Infancia, Carlos Abeleira, poniendo el acento en que ya se sabe lo que se avecina, por lo que se busca prever antes de cualquier crisis, incluido lo geográfico meteorológico.
Para Abeleira, "ni el Estado por sí solo, ni las organizaciones intermedias pueden superar la pobreza y sus consecuencias, sino que tenemos que unirnos a sabiendas que nos llevará mucho tiempo. A Chile le llevó 30 años cambiar las estadísticas. Nosotros tenemos que aplicar inversión y una mirada fuerte de la Nación en esta línea".
El funcionario aseguró que en los últimos meses hay una inversión en materia de relevamiento y atención de las urgencias, "pero en nuestras evaluaciones como equipo nos queda claro que una verdadera transformación social se logrará solo si la sociedad civil y Estado trabajan articuladamente. Es el pensamiento que nos deja la realidad del norte salteño", reflexionó.
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Ezequiel R. tenía 1 año y 2 meses, un cuadro avanzado de diarrea, deshidratación y problemas respiratorios. Aunque estuvo internado en el hospital de La Unión (Rivadavia Banda Sur), el lugar más próximo al paraje donde vivía, su familia decidió volver a su casa. Cuando lo detectaron estaba muy grave, se decidió trasladarlo de inmediato a Orán, pero no resistió y murió en el camino, el pasado jueves 12.
José A. tiene un año de edad, un cuadro avanzado de desnutrición, parasitosis, edema y neumonía. Perdió uno de sus ojos y por eso fue derivado desde Misión La Esperanza (Santa Victoria Este) al hospital Materno Infantil. En este caso, Atención Primaria de la Salud indicó que el niño tenía un peso normal en los controles realizados el 25 de mayo y el 16 de junio. Los padres no concurrieron al control de julio; en agosto y septiembre se observó menos peso y en octubre no hicieron el control. Por eso debió ser trasladado en helicóptero a la Capital, pero su estado aún es crítico.
El Chaco salteño, con 30 mil habitantes, tiene una densidad poblacional dispersa de 1,17%, en una superficie 7 veces mayor que Capital.
La Diócesis de Orán donó el terreno para la Cooperadora para la Nutrición Infantil. Ahora funciona en ese predio, en La Unión.
Yanella S., a pesar de sus cortos 5 meses de vida, ya había sido operada una vez del corazón. Vive en Pozo El Mulato (Alto la Sierra, municipio Santa Victoria) y fue trasladada de urgencia al hospital de Tartagal con hipertensión, líquido en los pulmones y desnutrición leve.
Jesús F. es un nene de 1 año y seis meses. En estado de abandono fue trasladado de urgencia al hospital de Orán. Sus padres tienen patologías psiquiátricas y ya perdieron un hijo en la misma situación.
Los datos son absolutamente reales y muy recientes (de las dos últimas semanas) tanto como la dolorosa pobreza en la que están inmersos, y los casos, junto a otros dos de adultos graves, fueron detectados por el denominado Refuerzo Estival que el Ministerio de la Primera Infancia comenzó este mes con un primer destino en Santa Victoria Este, y un segundo en Rivadavia Banda Sur, donde permanecerá hasta hoy, con probabilidad de prolongarse un poco más.

El refuerzo
El informe de la primera fase de trabajo indica que en Santa Victoria Este se atendieron 500 pacientes, se identificaron y asistieron a 80 con diversas patologías, 56 niños, 10 embarazadas y 14 adultos y realizaron cuatro traslados de urgencia.
“Esto es propio de la pobreza. Nuestro norte sufre las consecuencias de una realidad muy compleja, con demasiadas carencias y con analfabetismo”
"Hay dos puntos que atender: la integralidad, para conocer causas y no quedar en las consecuencias, y la unión entre todas las partes”.
"El trabajo es complicado y se agrava por el difícil acceso al agua. Solo vamos a avanzar unidos en una red entre organizaciones que miremos lo mismo”.
Carlos Abeleira, ministro de Primera Infancia
"Tenemos tres tipos de acciones que van desde lo urgente a lo preventivo y las de fondo, que se ubican en el largo plazo. En la organización del Refuerzo Estival participan, además de Primera Infancia, el Ministerio de Salud y los equipos de Atención Primaria de cada lugar, Derechos Humanos y Educación, en este caso con el mantenimiento de escuelas abiertas para refuerzo alimentario en varias de ellas", le explica a El Tribuno el ministro de Primera Infancia, Carlos Abeleira, poniendo el acento en que ya se sabe lo que se avecina, por lo que se busca prever antes de cualquier crisis, incluido lo geográfico meteorológico.
Para Abeleira, "ni el Estado por sí solo, ni las organizaciones intermedias pueden superar la pobreza y sus consecuencias, sino que tenemos que unirnos a sabiendas que nos llevará mucho tiempo. A Chile le llevó 30 años cambiar las estadísticas. Nosotros tenemos que aplicar inversión y una mirada fuerte de la Nación en esta línea".
El funcionario aseguró que en los últimos meses hay una inversión en materia de relevamiento y atención de las urgencias, "pero en nuestras evaluaciones como equipo nos queda claro que una verdadera transformación social se logrará solo si la sociedad civil y Estado trabajan articuladamente. Es el pensamiento que nos deja la realidad del norte salteño", reflexionó.
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