Tras las amenazas de suspensión del encuentro, la extorsión y la peligrosa advertencia al presidente José Muratore, y las detenciones realizadas ayer a integrantes de la facción de Juventud Antoniana denominada La Número Uno, desde la Policía de la Provincia salieron a calmar las aguas y garantizaron la seguridad para el encuentro de mañana entre el santo y Altos Hornos Zapla, que se jugará a las 16.30 en el estadio Martearena.
Tras las detenciones, se informó que continuarán los allanamientos y la búsqueda de los sujetos que se hallan prófugos, aunque desde las fuerzas dejaron en claro que este hecho puntual no tiene ninguna vinculación con lo ocurrido el pasado lunes ni con la amenaza al titular del club (aunque uno de los detenidos figura en la lista del derecho de admisión). En la actualidad, hay cerca de 200 hinchas del santo con prohibición de concurrencia. Y en relación con el partido de mañana, el jefe de la Unidad Regional Número 1, comisario principal Bautista Díaz, adelantó que el operativo será riguroso, que se incrementarán los cacheos, habrá cámaras para facilitar la implementación del derecho de admisión y a aquel que atente contra el espectáculo o intente suspender el partido se le abrirá una causa judicial. El operativo para mañana tendrá afectados a 450 efectivos, aunque las fuerzas dispondrán de un servicio adicional que actuará en caso de emergencia. "No haremos un operativo que genere caos o pánico, la prioridad será cuidar al espectador genuino. La ubicación de los hinchas será la misma que la de los últimos partidos de Juventud. La Número Uno se ubicará en la popular sur, allí se reforzará el operativo, y los hinchas que no se identifiquen con ningún bando irán a la cabecera norte. La requisa será más rigurosa", expresó el comisario, para luego advertir: "El perjuicio será para los que intenten parar el partido o generar caos. El entorpecimiento de un espectáculo dejó de ser una contravención y pasó a ser delito. El que lo haga, más aún con el agravante de las amenazas, será judicializado. Además, ya tienen el repudio de casi todos los hinchas".
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Tras las amenazas de suspensión del encuentro, la extorsión y la peligrosa advertencia al presidente José Muratore, y las detenciones realizadas ayer a integrantes de la facción de Juventud Antoniana denominada La Número Uno, desde la Policía de la Provincia salieron a calmar las aguas y garantizaron la seguridad para el encuentro de mañana entre el santo y Altos Hornos Zapla, que se jugará a las 16.30 en el estadio Martearena.
Tras las detenciones, se informó que continuarán los allanamientos y la búsqueda de los sujetos que se hallan prófugos, aunque desde las fuerzas dejaron en claro que este hecho puntual no tiene ninguna vinculación con lo ocurrido el pasado lunes ni con la amenaza al titular del club (aunque uno de los detenidos figura en la lista del derecho de admisión). En la actualidad, hay cerca de 200 hinchas del santo con prohibición de concurrencia. Y en relación con el partido de mañana, el jefe de la Unidad Regional Número 1, comisario principal Bautista Díaz, adelantó que el operativo será riguroso, que se incrementarán los cacheos, habrá cámaras para facilitar la implementación del derecho de admisión y a aquel que atente contra el espectáculo o intente suspender el partido se le abrirá una causa judicial. El operativo para mañana tendrá afectados a 450 efectivos, aunque las fuerzas dispondrán de un servicio adicional que actuará en caso de emergencia. "No haremos un operativo que genere caos o pánico, la prioridad será cuidar al espectador genuino. La ubicación de los hinchas será la misma que la de los últimos partidos de Juventud. La Número Uno se ubicará en la popular sur, allí se reforzará el operativo, y los hinchas que no se identifiquen con ningún bando irán a la cabecera norte. La requisa será más rigurosa", expresó el comisario, para luego advertir: "El perjuicio será para los que intenten parar el partido o generar caos. El entorpecimiento de un espectáculo dejó de ser una contravención y pasó a ser delito. El que lo haga, más aún con el agravante de las amenazas, será judicializado. Además, ya tienen el repudio de casi todos los hinchas".