Continúa la polémica por las obras del Cine Teatro Gemes de Rosario de la Frontera, hoy propiedad del municipio local.
El exsecretario de Obras Públicas, Julio Rivera, dejó en claro que la refuncionalización del edificio estaba prácticamente lista cuando dejó el cargo en 2013 y que el gasto por los trabajos realizados durante su gestión fueron de $300 mil.
"Desconozco qué obras se hicieron luego y el destino de los fondos asignados en 2014, que eran de $2.400.000. El cine teatro estaba prácticamente listo en 2013. Solo necesitaba unos cambios que proyecté con el objetivo de conservar la mística del lugar", explicó a El Tribuno.
El exsecretario de Obras Públicas, Julio Rivera, dejó en claro que la refuncionalización del edificio estaba prácticamente lista cuando dejó el cargo en 2013 y que el gasto por los trabajos realizados durante su gestión fueron de $300 mil.
"Desconozco qué obras se hicieron luego y el destino de los fondos asignados en 2014, que eran de $2.400.000. El cine teatro estaba prácticamente listo en 2013. Solo necesitaba unos cambios que proyecté con el objetivo de conservar la mística del lugar", explicó a El Tribuno.
300 mil fue el monto inicial con el que se realizaron los primeros trabajos de reacondicionamiento.
Compra de un terreno
Rivera desmintió que su proyecto contemplara la adquisición de un lote colindante. "No alcanzaba el dinero; apenas para el mismo edificio y se usaron para ampliar el escenario, colocar tablones nuevos, realizar contrapiso en la zona de los vestuarios y escaleras. También se removió todo el piso, que estaba muy deteriorado, y las butacas fueron recuperadas en un 100%. Se terminaron los baños, a los que solo les faltaba la conexión a la red cloacal. Hicimos refacciones necesarias, porque solo se podían presentar obras de teatro, pero no espectáculos de baile porque la inclinación del escenario no era la adecuada".
Agregó que solamente restaba la pintura del edificio, colocar el piso y definir si se compraba alfombra o parqué. "La inauguración estaba prevista para octubre de 2013. Por decisión del Ejecutivo municipal se postergó para el 10 de noviembre para que no coincidiera con las elecciones legislativas de ese año, ya que el entonces secretario de Gobierno, Diego Pérez, era candidato a diputado", recordó.
Rivera dejó el cargo en septiembre de 2013 y en su lugar asumió el arquitecto Andrés Piorno. "Cuando asumió el nuevo funcionario no sé qué pasó, pero en 2014 se asignó un nuevo presupuesto por $2.400.000 para otras obras. Desconozco qué se hizo y cómo se gastó el dinero".
Rivera dejó el cargo en septiembre de 2013 y en su lugar asumió el arquitecto Andrés Piorno. "Cuando asumió el nuevo funcionario no sé qué pasó, pero en 2014 se asignó un nuevo presupuesto por $2.400.000 para otras obras. Desconozco qué se hizo y cómo se gastó el dinero".
En la gestión de Rivera se amplió el escenario, se colocaron tablones nuevos y se hizo contrapiso en los vestuarios. Se colocaron escaleras, se cambió íntegramente el piso y se retapizaron las butacas.
Actualmente el cargo es ocupado por la arquitecta Silvia Juárez, quien según datos oficiales de la comuna, no tiene la documentación sobre trabajos y gastos.
"Habría que preguntarle al exsecretario Piorno dónde están esos papeles. Yo entregué toda la documentación, pero él desestimó todo lo que yo hice y planteó otra cosa totalmente distinta. La documentación que yo entregué fue llevada a Buenos Aires, el monto fue asignado y venía del Ministerio de Infraestructura de la Nación".Compra de un terreno
Rivera desmintió que su proyecto contemplara la adquisición de un lote colindante. "No alcanzaba el dinero; apenas para el mismo edificio y se usaron para ampliar el escenario, colocar tablones nuevos, realizar contrapiso en la zona de los vestuarios y escaleras. También se removió todo el piso, que estaba muy deteriorado, y las butacas fueron recuperadas en un 100%. Se terminaron los baños, a los que solo les faltaba la conexión a la red cloacal. Hicimos refacciones necesarias, porque solo se podían presentar obras de teatro, pero no espectáculos de baile porque la inclinación del escenario no era la adecuada".
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Continúa la polémica por las obras del Cine Teatro Gemes de Rosario de la Frontera, hoy propiedad del municipio local.
El exsecretario de Obras Públicas, Julio Rivera, dejó en claro que la refuncionalización del edificio estaba prácticamente lista cuando dejó el cargo en 2013 y que el gasto por los trabajos realizados durante su gestión fueron de $300 mil.
"Desconozco qué obras se hicieron luego y el destino de los fondos asignados en 2014, que eran de $2.400.000. El cine teatro estaba prácticamente listo en 2013. Solo necesitaba unos cambios que proyecté con el objetivo de conservar la mística del lugar", explicó a El Tribuno.
El exsecretario de Obras Públicas, Julio Rivera, dejó en claro que la refuncionalización del edificio estaba prácticamente lista cuando dejó el cargo en 2013 y que el gasto por los trabajos realizados durante su gestión fueron de $300 mil.
"Desconozco qué obras se hicieron luego y el destino de los fondos asignados en 2014, que eran de $2.400.000. El cine teatro estaba prácticamente listo en 2013. Solo necesitaba unos cambios que proyecté con el objetivo de conservar la mística del lugar", explicó a El Tribuno.
300 mil fue el monto inicial con el que se realizaron los primeros trabajos de reacondicionamiento.
Compra de un terreno
Rivera desmintió que su proyecto contemplara la adquisición de un lote colindante. "No alcanzaba el dinero; apenas para el mismo edificio y se usaron para ampliar el escenario, colocar tablones nuevos, realizar contrapiso en la zona de los vestuarios y escaleras. También se removió todo el piso, que estaba muy deteriorado, y las butacas fueron recuperadas en un 100%. Se terminaron los baños, a los que solo les faltaba la conexión a la red cloacal. Hicimos refacciones necesarias, porque solo se podían presentar obras de teatro, pero no espectáculos de baile porque la inclinación del escenario no era la adecuada".
Agregó que solamente restaba la pintura del edificio, colocar el piso y definir si se compraba alfombra o parqué. "La inauguración estaba prevista para octubre de 2013. Por decisión del Ejecutivo municipal se postergó para el 10 de noviembre para que no coincidiera con las elecciones legislativas de ese año, ya que el entonces secretario de Gobierno, Diego Pérez, era candidato a diputado", recordó.
Rivera dejó el cargo en septiembre de 2013 y en su lugar asumió el arquitecto Andrés Piorno. "Cuando asumió el nuevo funcionario no sé qué pasó, pero en 2014 se asignó un nuevo presupuesto por $2.400.000 para otras obras. Desconozco qué se hizo y cómo se gastó el dinero".
Rivera dejó el cargo en septiembre de 2013 y en su lugar asumió el arquitecto Andrés Piorno. "Cuando asumió el nuevo funcionario no sé qué pasó, pero en 2014 se asignó un nuevo presupuesto por $2.400.000 para otras obras. Desconozco qué se hizo y cómo se gastó el dinero".
En la gestión de Rivera se amplió el escenario, se colocaron tablones nuevos y se hizo contrapiso en los vestuarios. Se colocaron escaleras, se cambió íntegramente el piso y se retapizaron las butacas.
Actualmente el cargo es ocupado por la arquitecta Silvia Juárez, quien según datos oficiales de la comuna, no tiene la documentación sobre trabajos y gastos.
"Habría que preguntarle al exsecretario Piorno dónde están esos papeles. Yo entregué toda la documentación, pero él desestimó todo lo que yo hice y planteó otra cosa totalmente distinta. La documentación que yo entregué fue llevada a Buenos Aires, el monto fue asignado y venía del Ministerio de Infraestructura de la Nación".Compra de un terreno
Rivera desmintió que su proyecto contemplara la adquisición de un lote colindante. "No alcanzaba el dinero; apenas para el mismo edificio y se usaron para ampliar el escenario, colocar tablones nuevos, realizar contrapiso en la zona de los vestuarios y escaleras. También se removió todo el piso, que estaba muy deteriorado, y las butacas fueron recuperadas en un 100%. Se terminaron los baños, a los que solo les faltaba la conexión a la red cloacal. Hicimos refacciones necesarias, porque solo se podían presentar obras de teatro, pero no espectáculos de baile porque la inclinación del escenario no era la adecuada".