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La comunidad oranense le cumplió un sueño al Dr. Amor

Miércoles, 11 de enero de 2017 01:30
Basilio Torres y su esposa, emocionados, junto a su hija Jimena.
El reconocido médico Basilio Torres y su esposa Cecilia, tenían un gran sueño: ver bailar en un escenario a su hija Jimena.
La joven de 27 años es licenciada en Nutrición, reside en la ciudad de Rosario, en Santa Fe, donde desarrolla además su actividad artística como bailarina.
Las dificultades de Torres para viajar hicieron que el tiempo pasara sin poder concretar ese anhelo, pero la fuerza de muchos corazones generosos lo lograron.
Es así que amigos, colegas y comunidad no dudaron y pusieron en marcha todo los mecanismos que tenían a su alcance para lograr que esto se hiciera realidad.
Todo surgió hace un mes, cuando Cecilia comentó acongojada que lamentaba no poder concurrir a una presentación de su hija con el Tänzer Ballet. "Una de las cosas que no pudimos hacer después del accidente de mi esposo es viajar, acompañar a Jimena y verla brillar en el escenario", dijo.

La sorpresa

Tras ese comentario, amigos y colegas pusieron en funcionamiento el ingenio y aprovecharon la llegada de la joven a la ciudad de Orán para las fiestas de fin de año justo a sus padres y a su único hermano, Ricardo.
No costó mucho convencerla y con la complicidad de un centenar de personas organizaron un festival de danzas al que llamaron "Sueño hecho realidad".
La doctora Marcela Ortuño, una de las organizadoras, contó que los ayudaron desinteresadamente el gerente de Cultura, Martín Guerrero y todo su personal, quienes pusieron a disposición las instalaciones. Se sumaron para montar el espectáculo en sonido e iluminación GyD Producciones, fotografía de Darío Fonteñez, filmaciones de Daniel Benci, locución de Mónica Insaurralde y la participación Studio Elizabeth, Liliana Mazza y Academia El Palito.
La familia Torres concurrió esa noche a ver el espectáculo y todo transcurría con normalidad cuando apareció en el escenario Jimena interpretando el primero y tercer acto de la obra Don Quijote.
La sorpresa fue enorme para el matrimonio que no pudo evitar emocionarse y tomarse fuerte las manos porque no daban crédito a lo que estaban viendo.
"Fue una noche colmada de emociones donde pudimos cumplir el sueño a una familia que en Orán queremos muchísimo, pero indirectamente cumplimos el nuestro", comentó Ortuño mientras Basilio y su mujer no dejaban de agradecer entre lágrimas.
Al cierre de la presentación, los colegas del Doctor Amor le entregaron un reconocimiento a la trayectoria y el esfuerzo en pos de la comunidad.

Su historia

La historia de Basilio Torres fue difundida por el diario El Tribuno y luego por Telenoche, que lo bautizó como Doctor Amor. Su esfuerzo y superación conmovieron a todo el país cuando relató que el 24 de diciembre de 2011 un accidente lo dejó en silla de ruedas, pero logró sobreponerse a la adversidad y seguir con su profesión de cirujano urólogo, con el apoyo y sostén de Cecilia Rivas, su esposa, que se convirtió en su asistente personal.
A partir de su situación, la vida le permitió descubrir a muchas personas extraordinarias, que por sobre todo valoran su calidad profesional y humana.
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El reconocido médico Basilio Torres y su esposa Cecilia, tenían un gran sueño: ver bailar en un escenario a su hija Jimena.
La joven de 27 años es licenciada en Nutrición, reside en la ciudad de Rosario, en Santa Fe, donde desarrolla además su actividad artística como bailarina.
Las dificultades de Torres para viajar hicieron que el tiempo pasara sin poder concretar ese anhelo, pero la fuerza de muchos corazones generosos lo lograron.
Es así que amigos, colegas y comunidad no dudaron y pusieron en marcha todo los mecanismos que tenían a su alcance para lograr que esto se hiciera realidad.
Todo surgió hace un mes, cuando Cecilia comentó acongojada que lamentaba no poder concurrir a una presentación de su hija con el Tänzer Ballet. "Una de las cosas que no pudimos hacer después del accidente de mi esposo es viajar, acompañar a Jimena y verla brillar en el escenario", dijo.

La sorpresa

Tras ese comentario, amigos y colegas pusieron en funcionamiento el ingenio y aprovecharon la llegada de la joven a la ciudad de Orán para las fiestas de fin de año justo a sus padres y a su único hermano, Ricardo.
No costó mucho convencerla y con la complicidad de un centenar de personas organizaron un festival de danzas al que llamaron "Sueño hecho realidad".
La doctora Marcela Ortuño, una de las organizadoras, contó que los ayudaron desinteresadamente el gerente de Cultura, Martín Guerrero y todo su personal, quienes pusieron a disposición las instalaciones. Se sumaron para montar el espectáculo en sonido e iluminación GyD Producciones, fotografía de Darío Fonteñez, filmaciones de Daniel Benci, locución de Mónica Insaurralde y la participación Studio Elizabeth, Liliana Mazza y Academia El Palito.
La familia Torres concurrió esa noche a ver el espectáculo y todo transcurría con normalidad cuando apareció en el escenario Jimena interpretando el primero y tercer acto de la obra Don Quijote.
La sorpresa fue enorme para el matrimonio que no pudo evitar emocionarse y tomarse fuerte las manos porque no daban crédito a lo que estaban viendo.
"Fue una noche colmada de emociones donde pudimos cumplir el sueño a una familia que en Orán queremos muchísimo, pero indirectamente cumplimos el nuestro", comentó Ortuño mientras Basilio y su mujer no dejaban de agradecer entre lágrimas.
Al cierre de la presentación, los colegas del Doctor Amor le entregaron un reconocimiento a la trayectoria y el esfuerzo en pos de la comunidad.

Su historia

La historia de Basilio Torres fue difundida por el diario El Tribuno y luego por Telenoche, que lo bautizó como Doctor Amor. Su esfuerzo y superación conmovieron a todo el país cuando relató que el 24 de diciembre de 2011 un accidente lo dejó en silla de ruedas, pero logró sobreponerse a la adversidad y seguir con su profesión de cirujano urólogo, con el apoyo y sostén de Cecilia Rivas, su esposa, que se convirtió en su asistente personal.
A partir de su situación, la vida le permitió descubrir a muchas personas extraordinarias, que por sobre todo valoran su calidad profesional y humana.
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