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Tuvieron que actuar unos 120 efectivos de fuerzas de seguridad

Se ocuparon del rastreo de explosivos y la evacuación.
Jueves, 12 de octubre de 2017 00:00

Unos 120 efectivos de distintas divisiones de la Policía y de los Bomberos de Salta tuvieron que actuar en los operativos de evacuación y rastreo de explosivos que se realizaron por las cuatro amenazas de bomba que se hicieron durante la jornada.

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Unos 120 efectivos de distintas divisiones de la Policía y de los Bomberos de Salta tuvieron que actuar en los operativos de evacuación y rastreo de explosivos que se realizaron por las cuatro amenazas de bomba que se hicieron durante la jornada.

Además, equipos de la subsecretaría de Tránsito de la Municipalidad de Salta se ocuparon de cortar la circulación en los alrededores de los edificios donde debían buscarse los supuestos explosivos.

También debieron organizarse para prevenir accidentes por los embotellamientos y por la gran cantidad de alumnos que salieron de las escuelas al mismo tiempo y no sabían si volver a sus casas o esperar a que llegaran sus padres.

"Es muy importante difundir que esto no es una broma sino un delito serio por el que se inició una causa penal y todo un proceso judicial", manifestó el director de Investigaciones de la Policía de la Provincia, Emilio Albornoz.

"El desgaste de recursos es impresionante. Se pusieron en marcha investigaciones de la unidad de análisis criminal con apoyatura técnica. Se disparó todo un sistema de alarma. Es algo realmente grave lo que pasó", agregó.

Albornoz describió que en la Policía de Salta hay un área de Investigaciones Tecnológicas desde la que se pueden rastrear llamadas ante amenazas como esta.

Comerciantes afectados

La rutina se alteró en las tres escuelas amenazadas y en la terminal ayer a la mañana, y esto tuvo consecuencias también para los pequeños comerciantes que viven de las ventas diarias.

Patricia, una mujer que tiene un puestito en la calle Buenos Aires, cerca de la escuela Einstein, se quedó ayer con todos sus sandwiches de 10, 15 y 20 pesos; sus golosinas y su tristeza.

"Y vamos a tener que comer sandwiches toda la semana", dijo con una sonrisa que sabía a resignación.

Los comerciantes vivieron una jornada de poca venta y los cajeros quedaron vacíos en la zona de la terminal.

Además, los estudiantes y trabajadores que viajan todos los días a Salta capital llegaron tarde o perdieron el día.

La avenida Hipólito Yrigoyen fue un caos por los cortes de tránsito en la zona. Recién cerca de las 10 comenzó a normalizarse la circulación.

 

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