Inquieta y emprendedora por naturaleza, después de muchos años de trabajar en emprendimientos de otros rubros, Virginia Villamayor decidió entrar de lleno en el mundo de los juegos de mesa, pasión siempre compartida por su actual socia y amiga Ana Larrán. Juntas son las responsables de llevar adelante Multiverso, emprendimiento con el cual ya lanzaron al mercado el juego de mesa “Respuestas abiertas”, desarrollaron otro para la marca Caschy y están trabajando en uno de yoga para niños. Además, fueron seleccionadas por el Fondo Ciudadano con un proyecto para fomentar la literatura en los niños en las escuelas públicas.
¿Cómo fue la idea de emprender en el mundo lúdico?
Con mi socia, Ana Larrán, siempre nos gustaron los juegos de mesa, nunca dejamos de jugar. Teníamos la idea y finalmente un día decidimos lanzarnos a ese mundo y creamos Respuestas Abiertas.Para nosotras fue una gran sorpresa salir a la cancha y ver toda la actividad que había, porque hay producción e ideas, clubes de juegos de mesa en todas las provincias, comunidades de desarrolladores de juego... Pero lo que nos pasó sobre todo es encontrar que la gente fanática tiene una complejidad elevada y no está en el ámbito común del día a día. Jugar a juegos de mesa no es hoy una actividad genérica en Argentina. No hay muchos cafés o bares donde jugar ni tampoco están presentes en las empresas. Pero sí hay mucho potencial y es en ese potencial que tenemos mucha confianza. En Europa hay más de mil juegos nuevos por año. La gente puede comparar, hay espacios para jugar... En Argentina eso no existe, por eso queremos colaborar para que crezca y se consolide.
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Inquieta y emprendedora por naturaleza, después de muchos años de trabajar en emprendimientos de otros rubros, Virginia Villamayor decidió entrar de lleno en el mundo de los juegos de mesa, pasión siempre compartida por su actual socia y amiga Ana Larrán. Juntas son las responsables de llevar adelante Multiverso, emprendimiento con el cual ya lanzaron al mercado el juego de mesa “Respuestas abiertas”, desarrollaron otro para la marca Caschy y están trabajando en uno de yoga para niños. Además, fueron seleccionadas por el Fondo Ciudadano con un proyecto para fomentar la literatura en los niños en las escuelas públicas.
¿Cómo fue la idea de emprender en el mundo lúdico?
Con mi socia, Ana Larrán, siempre nos gustaron los juegos de mesa, nunca dejamos de jugar. Teníamos la idea y finalmente un día decidimos lanzarnos a ese mundo y creamos Respuestas Abiertas.Para nosotras fue una gran sorpresa salir a la cancha y ver toda la actividad que había, porque hay producción e ideas, clubes de juegos de mesa en todas las provincias, comunidades de desarrolladores de juego... Pero lo que nos pasó sobre todo es encontrar que la gente fanática tiene una complejidad elevada y no está en el ámbito común del día a día. Jugar a juegos de mesa no es hoy una actividad genérica en Argentina. No hay muchos cafés o bares donde jugar ni tampoco están presentes en las empresas. Pero sí hay mucho potencial y es en ese potencial que tenemos mucha confianza. En Europa hay más de mil juegos nuevos por año. La gente puede comparar, hay espacios para jugar... En Argentina eso no existe, por eso queremos colaborar para que crezca y se consolide.
¿Fue un camino difícil?
Salir al mercado con Multiverso no fue simple requería una inversión muy grande y tampoco conocíamos el mercado. Entonces nos pusimos a investigar, a contactar proveedores, posibles compradores y nos dimos cuenta que como emprendedor de juegos de mesa independientes es difícil llegar a las grandes cadenas, entonces el esfuerzo de venta es mucho más grande que para una editorial.
Pero está en nuestros planes seguir haciendo juegos de mesa y sobre todo fomentar la idea de juego como elemento disruptivo, como elemento que puede acompañar cualquier actividad. Nos interesa mucho promover los juegos en las empresas, en las escuelas, en las capacitaciones...Que la gente empiece a mirar a los juegos no solo como un entretenimiento sino como una forma de interactuar, de fomentar habilidades y descubrir nuevas capacidades.
Ahora está en boga estudiar cómo cambiarán los puestos de trabajo en el futuro y todas las conclusiones llevan a destacar la importancia del desarrollo de habilidades blandas en las personas. Nosotras creemos que los juegos van en la misma línea. Cada vez se practican menos juegos tipo trivias y en cambio se intenta despertar la creatividad de la persona.
Entre tanto videojuegos y tecnología, ¿qué respuesta hubo del público?
En Salta tuvimos una muy buena acogida tanto por la cadena mayorista como por la gente que buscaba el juego. Pero más nos costó llegar a otras provincias por el costo del flete, algo que ya me había pasado con otro emprendimiento (TopLegs, de indumentaria femenina). Igual creo que desde Salta se puede emprender y soy una convencida de que podemos animarnos a nuevos mercados pero hay que tener en cuenta estos costos y buscar un lado creativo, un diferencial.
Vos conocés muy bien todos los incentivos al alcance para aquel que quiere emprender, ¿son suficientes?
Hay muchos beneficios que no son conocidos por los emprendedores. El Gobierno nacional está haciendo un esfuerzo muy grande por abrir nuevas líneas de créditos que con gestión salen, pero todavía existe la noción de que estos no se dan. La gente de Endeavor también está haciendo un trabajo muy fuerte en Salta para fomentar el emprendedurismo pero todavía falta mucho. En Salta hay desarrollo, pero yo personalmente lo veo bastante incipiente.