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Juicio a seis represores: último alegato y se espera el fallo

En estos momentos, el defensor Pablo Louthier tratará de demostrar la inocencia de los imputados.
Martes, 02 de mayo de 2017 00:00

Comenzó el alegato del defensor oficial Pablo Louthier y de esta manera llega a su etapa final del noveno juicio a cuatro militares, dos policías y un gendarme, acusados de 32 crímenes de lesa humanidad ocurridos durante la última dictadura en la provincia de Salta. Luego de esta audiencia el Tribunal Oral Federal quedará habilitado para emitir el fallo de un largo proceso que comenzó en octubre de 2015; se estima que será después del mediodía.

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Comenzó el alegato del defensor oficial Pablo Louthier y de esta manera llega a su etapa final del noveno juicio a cuatro militares, dos policías y un gendarme, acusados de 32 crímenes de lesa humanidad ocurridos durante la última dictadura en la provincia de Salta. Luego de esta audiencia el Tribunal Oral Federal quedará habilitado para emitir el fallo de un largo proceso que comenzó en octubre de 2015; se estima que será después del mediodía.

El abogado Louthier tendrá la difícil tarea de contrarrestar las pruebas presentadas por las querellas y la fiscalía, quienes solicitaron condenas a perpetua para cuatro de los principales represores. En la figura del exjefe de la Policía de la Provincia, Miguel Gentil, recae la mayor responsabilidad de la eliminación de 27 personas que fueron víctimas de secuestros, desapariciones y homicidios. Otras 5 sufrieron detenciones ilegales y todo tipo de vejámenes. En este caso, fueron los únicos que lograron sobrevivir persecución que muchos militantes salteños sufrieron a partir del golpe del 24 marzo de 1976.

Todo indica que el anciano coronel Gentil sumará a su haber otra condena a perpetua, tal como ocurrió con los casos de la masacre de Palomitas, Ragone, megacausa de la UNSa y otros. En la misma situación se encuentran el comisario Joaquín Guil y Virtom Modesto Mendíaz, otro coronel que se desempeñó durante un año como jefe de la Policía local.

También es comprometida la situación del general Héctor Ríos Ereñú, exjefe del Ejército durante la gestión Alfonsín. A este militar le imputan la eliminación de dirigentes del PJ y de militantes de izquierda en el norte salteño. Cuando ocurrieron estos hechos, Ríos Ereñú estaba al frente del Regimiento de Infantería de Monte 28 Tartagal y, como tal, era la máxima autoridad del Ejército en la zona. A este juicio el militar llegó con el antecendente de una perpetua. En 2013 fue condenado por los secuestros y asesinatos del médico Pedro Urueña y el gremialista Jorge Santillán. Los otros acusados son el comisario Arturo Madrigal y el gendarme Diego Varas, por el secuestro y desaparición de los militantes Silvia Sáenz de Vuis tas y Raúl Osores.

 

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