De madera, con estantes flotantes o con placas de yeso; estándar o a medida. Las bibliotecas son el mueble ideal para mejorar el espacio de guardado, mantener el orden visual y darle un toque diferente al espacio.
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De madera, con estantes flotantes o con placas de yeso; estándar o a medida. Las bibliotecas son el mueble ideal para mejorar el espacio de guardado, mantener el orden visual y darle un toque diferente al espacio.
Hay múltiples opciones, entre las que se puede elegir aquella que resulte adecuada a cada necesidad. En ellas se pueden guardar objetos de valor emocional, retratos, libros y cualquier elemento que se considere oportuno. Todas resultan decorativas, prácticas, permiten almacenar y se integran en el salón.
En esta nota, te presentamos ejemplos para que puedas aplicar en tu vivienda y te damos algunos consejos para organizarlas de manera armónica.
1- En el rincón de lectura
No hay espacio de lectura sin biblioteca, dicen los entendidos. Por ello, en ambientes pequeños esta pieza no debe faltar e incluso se puede planificar una biblioteca a medida, aprovechando el espacio que queda, por ejemplo, entre una pared y el ventanal. La facilidad de realizar un mueble a medida permite optimizar cada centímetro libre que se dispone. Si los estantes no tienen divisorios medios se lucen más los libros, artículos deco, portarretratos y hasta macetas con plantas.
2- Material combinado
La combinación de madera y metal en forma sencilla puede generar un resultado muy práctico, elegante y funcional. Su estructura en caño recibe los estantes de madera y se adapta a la función que se le quiera dar: libros, televisión, adornos y en la cocina. Acepta combinar la madera en natural o laqueada en colores claros.
3- Mueble separador de ambientes
Es apropiada para ganar luminosidad y sensación de espacio, sin renunciar a tener diferentes ambientes y rincones. En la fotografía se aprecia una biblioteca de piso a techo realizada en PDF laminado, de forma geométrica regular (cuadrículas del mismo tamaño) y sin fondo, para que resulte más liviana visualmente.
4- Estantes flotantes
Ideales cuando se desea vestir una pared sin ménsulas a la vista. Este recurso es muy flexible: da la ventaja de regular las alturas entre sí, según lo que se tenga que ubicar, y también la profundidad. Como se trata de un estilo de líneas sencillas y formas geométricas simples, estos elementos se llevan a la perfección con la tendencia minimalista.
5- Estilo escandinavo
El estilo escandinavo consiste en sencillas estanterías, cómodas y muy funcionales. Se pueden trasladar, su tamaño es reducido y la idea es ocupar todos los espacios con elementos, pero sin sobrecargar. Algunos modelos incluyen hasta un perchero y combinan el color natural de la madera nórdica (clara) con el blanco, o todo blanco. Los elementos y adornos deben ser intensos para cortar con la neutralidad.
Cómo organizarlas
Las repisas de nuestros estantes y bibliotecas no sólo se utilizan para guardar libros. Hay cientos de objetos que nos gusta mostrar y que usamos como decoración. Pero todo tiene que seguir un orden. Algunos consejos de cómo lograr espacios armónicos:
* Exhibir las pasiones: Si no sabés qué poner en las estanterías de bibliotecas o consolas, primero considerá qué es lo que más amás. Tus intereses y hobbies pueden ser una buena forma de decorar sin gastar dinero en comprar accesorios. Utilizá colecciones de platos, miniaturas o enmarca los dibujos de los niños o recuerdos de viajes.
* Agrupar: Unificá la estantería agrupando los objetos por tema, color textura o forma. Agrupá cosas que se parezcan para crear un impacto visual. Por ejemplo, un grupo de jarrones blancos o floreros blancos quedan perfectos sobre un mueble de madera oscura. Lo mismo con cajas pintadas o esferas de adorno: si no son del mismo color podés unificarlas dándoles una pintadita con pintura en spray.
* Si es grande, mejor: Los adornos pequeños sueltos en una estantería no lucen bien, es mejor utilizar objetos grandes que puedan verse desde lejos.
* Olvidarse de la simetría: Cuando decorés lograrás más impacto agrupando objetos en números impares, 3, 5, 7 y ubicándolos un poco corridos del centro de la estantería. En vez de simetría, lo que buscamos es balance. Si tenés dos objetos idénticos ubicalos en diagonal, nunca en la misma línea.
* El gran “no”: En la decoración de estanterías nunca se debe alinear los objetos de una misma altura. Lo mejor es mezclar diferentes alturas, asegurándote de tener objetos altos bajos y medianos.