Por Daniel Díaz
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Por Daniel Díaz
La historia del joven mercedeño Pablo Quipildor tuvo amplia repercusión nacional y generó más de un debate. Hasta la expresidenta Cristina Fernández reprodujo en sus cuentas en redes sociales la nota periodística publicada por El Tribuno que daba cuenta de la situación por la que atraviesa la familia de un discapacitado de La Merced, quien este mes cuando fue a cobrar le dijeron que su saldo era de cero pesos y que le habían retirado el beneficio.
Pablo es un vecino discapacitado, que vive en barrio Martín Miguel de Güemes. Carece del 76% de su capacidad visual y, además, del 35% de la auditiva, tras un accidente ocurrido en 2002. Hace tres años accedió a una pensión del Estado nacional, pero el 1 de este mes, cuando fue a cobrar, le dijeron que su saldo era cero, que le habían quitado el beneficio.
‘Fui a cobrar al pagador del Correo, como todos los meses. Estaba muy contento porque este mes iba a llegar el aguinaldo, pero cuando me tocó el turno me dijeron que el saldo era cero, que ya no tenía la pensión’, contó Quipildor en diálogo con El Tribuno.
La familia del joven mercedeño está integrada por su mujer, enferma de diabetes y Chagas, y sus dos hijos: un chico de 9 años de edad y una hija de 20 años, estudiante de enfermería, a quien también este mes le dejaron de pagar el plan Progresar.
Estos eran los dos únicos ingresos de la familia. Uno, el de Pablo, se destinaba a la alimentación y el de su hija, para solventar sus estudios. Quedaron sin nada.
Frente a la difícil situación de esta familia de escasos recursos, el intendente de La Merced, Juan Ángel Pérez, contó: ‘Ayer le entregamos a Pablo un subsidio equivalente al monto que cobraba como pensionado. Y vamos a mantener esta asistencia hasta que se resuelva la situación tan angustiante que atraviesa, porque la familia quedó desamparada. Era el único dinero con el que contaban para vivir’.