Juan Silisque, el sanguchero que fue desalojado del parque San Martín en 2015 tras un largo conflicto con la Municipalidad, se encadenó ayer afuera de la Catedral Basílica para reclamar porque no tiene trabajo. Amenazó con quitarse la vida y se lastimó con un cuchillo.
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Juan Silisque, el sanguchero que fue desalojado del parque San Martín en 2015 tras un largo conflicto con la Municipalidad, se encadenó ayer afuera de la Catedral Basílica para reclamar porque no tiene trabajo. Amenazó con quitarse la vida y se lastimó con un cuchillo.
Silisque tenía un puesto de comida en el pulmón verde de la ciudad pero la Municipalidad de Salta lo obligó a retirarse porque estaba ocupando un espacio público. Se fue del parque a principios de julio de 2015, tras un operativo policial en el que desmantelaron su puesto y se lo llevaron detenido porque él se resistía a dejar el lugar pese a las reiteradas notificaciones de la intendencia.
Luego, Silisque volvió a instalar su negocio de comida en el Paseo de la Familia, espacio comercial ubicado afuera de la cancha de Juventud Antoniana y administrado por el club. Pero unos meses después tuvo que irse, tras un enfrentamiento con otro puestero y con denuncias de amenazas.
Ayer a la mañana Silisque se encadenó afuera de la Catedral con un cuchillo en la mano, demandó soluciones y pidió que le devuelvan el equipamiento que se llevaron cuando lo desalojaron del parque San Martín.
Tras reclamar la presencia del gobernador Juan Manuel Urtubey y del intendente Gustavo Sáenz, se hirió en el estómago, aunque la lesión fue leve.
Silisque aceptó dejar el arma blanca y retirarse de la Catedral luego de que José Muratore, presidente de Juventud Antoniana, llegara para hablar con él.
"Me comprometí a reunirme mañana con él y a dialogar con la comisión directiva para analizar la posibilidad de que vuelva a tener un espacio en el Paseo de la Familia", relató Muratore a El Tribuno.
El dirigente de Juventud Antoniana dijo, además, que hace tiempo que está tratando de contener al comerciante y que colaborará en lo necesario para ayudarlo a encontrar una salida.
La situación generó un despliegue de policías, agentes de la Subsecretaría de Emergencias de la Municipalidad y médicos, además de la presencia de medios de comunicación frente a la plaza 9 de Julio.
Nicolás Avellaneda, subsecretario de control comercial de la Municipalidad de Salta, recordó que Silisque fue desalojado del parque por usurpación del espacio público y denuncias de violencia durante la gestión municipal anterior.
"Viene pidiendo ser reubicado en un espacio público pero en esta gestión no avalamos la usurpación. No puede exigir asentarse. Hace un tiempo lo recibimos y le ofrecimos la alternativa de que consiga un frentista que lo acepte y nosotros analizaríamos la situación. Lamentablemente, es una persona conflictiva que tuvo denuncias por amenazas a inspectores comerciales de la Municipalidad", señaló Avellaneda a El Tribuno.