Constantes en sus reclamos, desde Santa Victoria Oeste llegaron por tercera vez a la redacción de El Tribuno las concejales Evangelista Subelza, de la comunidad de Abra de Santa Cruz, y Nicanora Condorí, de Lizoite del Carmen, para plantear sus quejas por el comportamiento antidemocrático del intendente Lino Andrés Flores, quien, según dicen los ediles, desconoce la existencia del Concejo Deliberante y sus competencias.
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Constantes en sus reclamos, desde Santa Victoria Oeste llegaron por tercera vez a la redacción de El Tribuno las concejales Evangelista Subelza, de la comunidad de Abra de Santa Cruz, y Nicanora Condorí, de Lizoite del Carmen, para plantear sus quejas por el comportamiento antidemocrático del intendente Lino Andrés Flores, quien, según dicen los ediles, desconoce la existencia del Concejo Deliberante y sus competencias.
"Actúa como un patrón de estancia, se cree el dueño de todo y nos ignora", dijeron.
El Concejo Deliberante que el intendente Flores ignora está conformado por cinco ediles, cuatro de los cuales no han podido interactuar nunca con el ejecutivo para llevar a cabo ni un solo proyecto. El quinto concejal es Bernardo Luna, considerado por sus compañeros de recinto un "obsecuente" del intendente. "Él no firma nada para bien ni para mal, y siempre dice que trabaja con el intendente", contaron.
La visita a El Tribuno de las dos concejales fue para refutar algunos dichos que Lino Andrés Flores expusiera en su defensa, luego de la última nota publicada por este diario en junio pasado, en la cual los ediles solicitaban una auditoría provincial para la comuna de Santa Victoria Oeste.
Nicanora Condorí quiso aclarar: "Flores dice que lo queremos destituir y que somos parientes. De mí dice que soy concuñada del concejal Martín Subelza, y es una total mentira. Mi marido se llama Julián Mamaní y con Subelza no tenemos parentezco por ninguna rama familiar".
Evangelista Subelza, quién comparte apellido con Martín, detalló: "Lino dice que somos primos y en realidad no somos nada; muchas personas tienen el mismo apellido sin ser parientes. Lo que el intendente busca es dividirnos, hacernos pelear para que lo dejemos hacer lo que quiera en paz, sin controles y sin quejas".
Ambas mujeres presentaron una denuncia formal en la Justicia para que el intendente Flores presente las pruebas del parentesco entre los ediles, con el cual quiso justificarse de las acusaciones que le hicieron. "Nosotros venimos hasta Salta para que alguien nos escuche y para que la gente sepa lo que hace Flores. Necesitamos que la Provincia haga algo. Pedimos una auditoría y nunca llegó, necesitamos que alguien controle al intendente", dijo Nicanora Condorí.
Evangelista fue dura al señalar: "Flores es el intendente del vino y del asado, más ahora que está en campaña. Dice que tiene los sueldos al día, pero la verdad es que si te portás bien con él, paga, si te portás mal, no te paga. Le debe plata a mucha gente".
Y agregó: "El usa los vehículos oficiales a su antojo y nombra como nuevas obras que ya estaban hechas como es el salón de usos múltiples de Vizcachañi que lo hizo Ontiveros y él lo terminó de techar, pero lo inauguró sin puertas ni ventanas. El mismo caso de la cancha de Lizoite. Todo lo que se hizo fue con fondos del Bicentenario, que eran unos 7 millones para obras que no sabemos cómo se han invertido por falta de rendición. Lo que sí sabemos es que no contrató mano de obra para los trabajos".