No pasó mucho tiempo desde que lo inauguraron y el canal de Los Manzanos volvió a mostrar desperfectos en su traza. En una esquina, el pavimento de la calle por donde pasa se hundió y tuvieron que cortar el tránsito. Se trata de Los Nogales al 600, en el barrio Tres Cerritos.
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No pasó mucho tiempo desde que lo inauguraron y el canal de Los Manzanos volvió a mostrar desperfectos en su traza. En una esquina, el pavimento de la calle por donde pasa se hundió y tuvieron que cortar el tránsito. Se trata de Los Nogales al 600, en el barrio Tres Cerritos.
Allí, el suelo de concreto se agrietó y se vino abajo. Hay carteles de Aguas del Norte que advierten sobre el riesgo de circular por esa calle, donde se hizo la costosa obra que demoró más de lo previsto y que fue la despedida de Miguel Isa de la intendencia capitalina.
El canal se inauguró en 2015 y, apenas dos años después, ya tiene dos parches.
Las redes sociales, desde las cuentas de los vecinos indignados, estallaron el fin de semana, que fue cuando el suelo comenzó a venirse abajo.
El Tribuno visitó la Municipalidad de la ciudad de Salta para consultar sobre cómo se espera resolver la situación.
"Esto es un problema de Aguas del Norte", dijo el subsecretario de Inspección y Certificación comunal, Francisco Agolio, quien es el funcionario que reemplaza a la secretaria de Obras Públicas comunal, María Beatríz Blanco, durante su licencia.
Y argumentó: "Esa empresa tiene los caños obsoletos y nunca los cambiaron. Es decir, la anterior administración hizo la obra del canal y la empresa no cambió las cañerías. En consecuencia, hay pérdidas de agua y cloacas que producen un deterioro acelerado del pavimento. Entonces, los paneles estructurales ceden", dijo Agolio, que está al frente de los arreglos de la obra.
Trabajadores relacionados con las obras públicas, desde las Planta Hormigonera, dijeron que el hundimiento de una calle se debe a la mala compactación del hormigón, sumado a la pérdida de agua y cloacas.
Concretamente, ahora arrancarán las obras para sacar el pavimento dañado e iniciar la reconstrucción de la loza en una superficie de 150 metros cuadrados. Los vecinos deberán convivir con los trabajos durante unos 15 días, si no llueve, más otros 10 días de fraguado.
"Esos cálculos son para días de sol, sin tormentas como las del fin de semana pasado. En caso del mal tiempo, vamos a demorar más porque es una obra sensible. Así que le pedimos desde ya disculpas a los vecinos por las molestias que le podríamos ocasionar y les rogamos paciencia porque es una obra imprescindible para esa zona", dijo Agolio.
No es la primera vez que sucede un hecho como este, hace casi un año, en enero de 2016, se hundió el pavimento en Los Nogales al 500.
"Es obvio que se hizo todo mal y el tiempo lo está develando. Los vecinos lo sabemos y ya advertimos eso a los nuevos funcionarios municipales. Si bien dicen que acá hay pérdidas de agua, nosotros no las vemos. Sólo vemos que se hunde el piso y tenemos miedo", declaró una vecina llamada Malvina.
La necedad de atar todo con alambre
Fue la obra más ambiciosa del exintendente Miguel Isa. Estaba calculado que en un año la terminarían con un costo de unos 44 millones de pesos. Pero se terminó a los casi tres años, con un costo final de 75 millones.
Isa la inauguró el 4 de diciembre de 2015, antes de entregar la intendencia a Gustavo Sáenz.
Sin embargo, las pavimentaciones, parte fundamental del drenaje, no solo no estaban concluidas sino que quedaron a medio hacer, con grietas que se convirtieron en pantanos en la primera lluvia.
Los barrios Tres Cerritos, Mosconi, Postal, Ingenieros, Ferroviario, Santa Clara de Asís, Lamadrid, Vicente Solá y Miguel Ortiz se iban a beneficiar. Los que se inundaron en el verano 2016 fueron los vecinos de Los Nardos, Los Alisos, Los Pensamientos, Los Curupayes y por supuesto, Los Nogales, en Tres Cerritos.