Fue el tema del día ayer en los medios de todo el país, pero las primeras actuaciones empezaron en Salta en 2014. La Justicia Federal investiga a Serafín Dengra, exintegrante de Los Pumas, por una supuesta asociación ilícita, que actuó en perjuicio de la AFIP por más $1.000 millones.
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Fue el tema del día ayer en los medios de todo el país, pero las primeras actuaciones empezaron en Salta en 2014. La Justicia Federal investiga a Serafín Dengra, exintegrante de Los Pumas, por una supuesta asociación ilícita, que actuó en perjuicio de la AFIP por más $1.000 millones.
La causa lleva el nombre del exrugbier y se siguen pistas firmes sobre las maniobras fraudulentas que ofrecía una banda para cancelar deudas tributarias a través de facturas truchas.
La primera denuncia se radicó en Salta y fue el fiscal Eduardo Villalba quien llevó adelante las pesquisas iniciales, que según informaron medios de Buenos Aires incluyeron escuchas telefónicas.
Ahora la investigación está a cargo de la jueza de San Isidro (Buenos Aires), Sandra Arroyo Salgado, exmujer de Alberto Nisman. La magistrada le tomó declaraciones a Dengra hace cinco meses, pero el exdeportista, conocido por su frase "never pony", permanece en libertad. Lo llamativo es que el expediente lleva su nombre. Se sospecha que el rugbier actuaba como "pescador" de las empresas que querían evadir impuestos.
El caso pasó a Arroyo Salgado luego de que el Juzgado Federal 1 de Salta, a cargo de Leonardo Bavio, se declarara incompetente tras el dictamen que realizó el fiscal Villalba. Arroyo Salgado ya tomó indagatorias a una veintena de implicados y marcó a dos presuntos jefes de la asociación ilícita.
Miguel Ángel Lamparelli tiene prisión preventiva y está procesado, mientras que Adrián Marcal Gago está prófugo desde hace varios meses. Ambos están vinculados también en la causa de "La Rosadita".
El inicio
Ayer trascendió que la investigación surgió en Salta tras una denuncia que recibió el entonces titular de la AFIP en esta provincia, Rafael Resnick Brenner, en junio de 2014. La presentación apuntaba a Raúl Pessotto, cuyo nombre figura en el expediente junto al de Serafín Dengra.
Resnick Brenner habría dado aviso a los magistrados y el Juzgado Federal 1 ordenó escuchas sobre nueve teléfonos y la intervención de cuatro correos electrónicos durante más de un año y medio, consignó el diario La Nación. Se incluyeron, además, otras tareas de inteligencia con la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).
"Yo no conozco a nadie de esa banda", aseguró ayer Dengra en una entrevista que dio al programa televisivo "Nosotros a la mañana", que se emite por Canal 13. El exdeportista y actual "motivador" titubeó en varios momentos de la nota.
"Es un golpe bajo. No conozco a nadie, hace un año estoy motivando", aseguró en los primeros minutos. Luego deslizó: "En algún momento le doy una mano a esta gente". Más tarde sostuvo: "Me hicieron una cama total".
Entre las oscilaciones, dijo: "Hay un conocido en común que yo conozco", pero luego dijo que no tenía vinculo ni contacto con nadie. "Estoy a disposición de la Justicia. No hice nada fuera de la ley", remarcó.
Otros dichos
"Dengra tiene la desgracia de que la carátula lleve su nombre", respondió el abogado del exrugbier, Mario Laporta, según consigno La Nación.
"Pero esta es su primera experiencia de este tipo (por una causa penal), en una investigación que es enorme", indicó.
En una versión opuesta a lo que dijo en un programa televisivo, Dengra confirmó a ese diario la existencia de la banda, pero se definió como una de sus víctimas. "Solo quise ayudar a unas personas, pensando que era de buena fe, para que pudieran obtener una moratoria, pero usaron mi nombre para armar lío", dijo. "Solo relacioné a una empresa, pero yo no tengo nada que ver, por eso yo sigo en libertad", afirmó.
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