¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

19°
23 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Madrejones, la comunidad más grande de las aisladas en Mosconi

Las 20 familias de Madrejones consumen lo que ellas producen.x
Miércoles, 10 de octubre de 2018 02:23

Madrejones se ubica en línea recta a una distancia de 30 kilómetros en dirección a las sierras del oeste que rodean Campamento Vespucio. A mitad de trayecto se encuentra lo que fue el campamento San Pedrito y un poco más atrás (16 kilómetros siempre hacia el oeste) está la costa del Itaú. Pero llegar a ese lugar implica -desde hace años- una travesía de 220 kilómetros.

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla

Madrejones se ubica en línea recta a una distancia de 30 kilómetros en dirección a las sierras del oeste que rodean Campamento Vespucio. A mitad de trayecto se encuentra lo que fue el campamento San Pedrito y un poco más atrás (16 kilómetros siempre hacia el oeste) está la costa del Itaú. Pero llegar a ese lugar implica -desde hace años- una travesía de 220 kilómetros.

Como lo recuerda el intendente de General Mosconi, Isidro Ruarte, quien un par de veces al año visita esa zona "se debe salir desde Mosconi, llegar hasta Aguas Blancas en el departamento de Orán, cruzar el río Bermejo a la localidad homónima en Bolivia, previo trámite aduanero y recorrer 80 kilómetros por territorio boliviano, por un camino de tierra, muy transitado por camiones zafreros".

"Finalmente tenemos que cruzar el puente sobre el río Tarija para llegar recién a Madrejones. Son más de 220 kilómetros para llegar a un lugar que desde San Pedrito está a 16, algo increíble", cuenta Ruarte.

La escuela del paraje Madrejones está apadrinada por quienes tienen los medios materiales y humanos para hacer esa travesía por medio de las Yungas: el regimiento 28 de Infantería Juana Azurduy con asiento en Tartagal. "Los rodillas negras" suelen llegar con ayuda solidaria, cocina de campañas, y los elementos que se necesitan para escalar las laderas de los cerros. En algunas oportunidades llegan con médicos, veterinarios y enfermeras para asistir a las poblaciones de ese lugar increíble por su belleza pero tan olvidado de todos. Cada vez que la gente del regimiento llega a la zona, para los pobladores es una gran fiesta y homenajean a sus padrinos con un gran acto y una comida preparada con lo que ellos mismos producen.

El lugar es paradisíaco. La tierra llama a trabajarla y a producir. Los chicos de la escuela de Madrejones desarrollan proyectos productivos autosustentables. Las 20 familias que residen en ese paraje consumen lo que ellos producen porque, lógicamente, recorrer 220 kilómetros para llegar a Orán, no les resulta nada sencillo.

Verduras, frutas, maíz, caña de azúcar; cerdos, gallinas y chacinados y dulces de todo tipo son de producción propia, a excepción de la sal y el aceite que compran toda vez que bajan a los centros poblados. Ese ejemplo de sustentabilidad hizo que años atrás docentes y alumnas ganaran un importante premio internacional.

 

PUBLICIDAD