Miles de estudiantes del turno noche perdieron entre dos y tres horas de clases toda la semana por el paro de colectiveros que empezó el lunes pasado y se extenderá hasta este miércoles. Las actividades a partir de las 21, o en muchos casos 20.30, se trastocaron en los vespertinos del nivel secundario y técnico, en los BSPA, los institutos de educación superior estatales y privados, y los institutos de idioma que luego deberán reoganizarse y tratar de ponerse al día.
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Miles de estudiantes del turno noche perdieron entre dos y tres horas de clases toda la semana por el paro de colectiveros que empezó el lunes pasado y se extenderá hasta este miércoles. Las actividades a partir de las 21, o en muchos casos 20.30, se trastocaron en los vespertinos del nivel secundario y técnico, en los BSPA, los institutos de educación superior estatales y privados, y los institutos de idioma que luego deberán reoganizarse y tratar de ponerse al día.
Mario Cejas, vicerrector del Profesorado de Salta, ubicado en Entre Ríos y Siria, comentó que en estos días el instituto tuvo dos horas de clases y otras tres horas perdidas. "A las ocho y media los alumnos se empiezan a ir porque dicen que después no consiguen transporte, que los colectivos pasan llenos", contó.
Como responsable del establecimiento está expectante a lo que suceda esta semana, porque la que pasó estuvo bastante complicada debido a que se llegaron a suspender 14 exámenes parciales. "Eso va a generar inconvenientes la semana que viene, cuando los docentes quieran tomar los parciales todos juntos. Va a haber que hacer algún acuerdo y en función de eso reprogramar", añadió.
En el Profesorado de Salta estudian aproximadamente 700 personas por la noche. Una situación similar se vive en el instituto de barrio San Carlos, en la zona sur, dijo, donde también unos 300 estudiantes se retiran antes. Se labran actas para dejar registro de la salida y se llama al 148 para confirmar.
El imprudente paro que encara el gremio de la UTA se realiza en "solidaridad" con choferes de otras provincias que no cobraron el último escalón del incremento salarial (5,7%). Para la coordinadora general de los Institutos de Idiomas, Cecilia Moraga, la medida de fuerza afecta "muchísimo" a los alumnos que tienen clases en el último turno, de 21.40 a 23.
"Se les ofreció que los que puedan vayan a otros turnos para que no pierdan. Esto los deja en desventaja con los alumnos que sí tienen clases más temprano, y en estos casos lo que también termina pasando es que mucha gente se desanima al perder continuidad", agregó.
En la capital salteña hay nueve institutos de idiomas, excepto los de barrio Solidaridad y Santa Cecilia, todos tienen clases hasta las 23. Entre todos los turnos estudian 6.400.
El profesor Alejandro Rodríguez, de la técnica 3.138 Alberto Einstein, señaló que "fue una semana complicada". "Solo tuvieron una hora y media de clases, de 19.30 a 21, se les daba la copa de leche y prácticamente quedaba una hora de clases. El horario normal de salida es a las 22.50", comentó.
Por su parte, la directora Zaira Arroz, del comercial 5.082 Adolfo Gemes, dijo que los chicos perdieron la mitad de la jornada entre el lunes pasado, cuando los colectiveros empezaron a parar, y la noche del viernes. En esta última, incluso, se debieron suspender las actividades programadas por el Día del Respeto a la Diversidad Cultural, feriado que se traslada para mañana. Desde Saeta ni la AMT se pronunciaron sobre la medida de fuerza que hoy se cumplirá por séptima noche consecutiva.