La jornada inaugural de la Asamblea de la Sociedad Interamericana de Prensa delineó ayer, en el Centro de Convenciones de Limache, la mirada de la entidad acerca de la actividad periodística y los desafíos de la libertad de información y de expresión en el siglo XXI. La utilización de las redes para instalar noticias falsas y posibilidad que la tecnología brinda para que la información se acelere y que surja de infinidad de fuentes revolucionó la información pública. Así se plantean nuevas amenazas: los reclamos por el derecho a la intimidad, que puede ser vulnerado por el uso masivo del sistema, o al olvido, es decir, la exigencia de que las plataformas eliminen determinadas informaciones que dejan mal parados a algunos protagonistas de la vida pública. "La idea de limitar y establecer sanciones en circunstancias de esa naturaleza ponen en riesgo el derecho a la libertad de expresión", advirtieron en la SIP.
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La jornada inaugural de la Asamblea de la Sociedad Interamericana de Prensa delineó ayer, en el Centro de Convenciones de Limache, la mirada de la entidad acerca de la actividad periodística y los desafíos de la libertad de información y de expresión en el siglo XXI. La utilización de las redes para instalar noticias falsas y posibilidad que la tecnología brinda para que la información se acelere y que surja de infinidad de fuentes revolucionó la información pública. Así se plantean nuevas amenazas: los reclamos por el derecho a la intimidad, que puede ser vulnerado por el uso masivo del sistema, o al olvido, es decir, la exigencia de que las plataformas eliminen determinadas informaciones que dejan mal parados a algunos protagonistas de la vida pública. "La idea de limitar y establecer sanciones en circunstancias de esa naturaleza ponen en riesgo el derecho a la libertad de expresión", advirtieron en la SIP.
La otra amenaza de esta época, planteada en la Asamblea, la representan los autoritarismos. Los gobiernos de este perfil presionan, condicionan, amenazan, utilizan el presupuesto público para acotar la libertad de los diarios, pero también llegan a la clausura de algunos medios, la persecución y muerte de periodistas. Problemas de esa naturaleza recorren una amplia gama, desde Estados Unidos a Caracas, Managua o La Habana.
La nueva Chapultepec
El presidente de la SIP, Gustavo Mohme, presentó a primera hora el borrador de la "Declaración de principios sobre libertad de expresión en la era digital". Se trata de un proyecto de 13 artículos que será analizado en estos días por los miembros de la entidad.
Mohme, así como el histórico expresidente de la SIP, el uruguayo Danilo Arbilla, equipararon a este documento con la declaración de Chapultepec, de 1994. En esa localidad de México, en el renacer de la democracia regional y en el declive del golpismo, la Sociedad dejó sentada su posición acerca de los derechos a la opinión, la información y la prensa, como parte indisoluble de la democracia. Arbilla asoció a Chapultepec con las declaraciones de los Derechos del Hombre de EEUU (1776), Francia (1789), la ONU (1948) y el Pacto de San José de Costa Rica (1969).
Esta asamblea otorgará el "Gran Premio a la Libertad de Prensa" a periodistas nicaragenses que, en estos días, describen en Salta las persecuciones que sufren en el declinante gobierno de Daniel Ortega.
La grieta regional
Los discursos del acto inaugural mostraron la dimensión de la grieta política planteada en el continente por la irrupción de la corriente bolivariana.
Con respecto a la conducta de los gobiernos frente al periodismo crítico, las diferencias quedaron en evidencia.
El director de El Tribuno, Sergio Romero, al hablar como anfitrión del encuentro, expresó que "la libertad de prensa no es un derecho de los medios, sino una condición ineludible de la democracia", y añadió que "a los riesgos políticos, en estos días la revolución tecnológica suma nuevos desafíos para la prensa".
Gustavo Mohme fue sumamente crítico hacia los regímenes de Cuba (el gobierno no autorizó la salida del representante de la SIP en ese país); Venezuela, donde el chavismo avanza desde hace dos décadas en la destrucción de la prensa, y Nicaragua, a la cuya situación calificó como "una regresión al siglo XIV".
Dos cambios en paralelo
El secretario nacional de Comunicaciones de Ecuador, Andrés Michelena, leyó un mensaje del presidente de ese país, Lenín Moreno Garcés, duramente crítico por el cercenamiento a la libertad de prensa durante los diez años de gobierno de Rafael Correa, su antecesor y excorreligionario.
"La prensa libre es la mejor herramienta contra la corrupción", expresa el mensaje donde Lenín Moreno hace referencia al enfrentamiento con el régimen de Nicolás Maduro (cuya embajadora fue expulsada el jueves de Quito) y se compromete a "fortalecer a los medios" y a "abrir las fuentes de información". "Nosotros no tenemos ningún temor a la crítica, porque creemos en la transparencia", concluye.
Un tono similar utilizó la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, quien trazó diferencias entre el gobierno de Cambiemos y sus antecesores. "Hoy discutimos cómo combatir la inflación, pero nadie discute las cifras, porque saben que ahora la información es seria". Finalmente, el gobernador Juan Manuel Urtubey destacó "la enorme y titánica tarea de atravesar el umbral de la tolerancia, frente al disenso; es decir, aprender como sociedad el respeto a la diversidad", puntualizó.