La Guardia Civil española anunció el arresto de siete personas implicadas en la venta de entradas falsificadas del último "clásico" entre el Barcelona y el Real Madrid, que costó 1,5 millones de euros al club catalán.
"Al final han sido 7 detenidos y una persona investigada", y no 10 como había sido anunciado previamente, indicó un portavoz de la Guardia Civil en Barcelona, que precisó que se produjeron "12 registros mayoritariamente en Barcelona".
La investigación, iniciada tras el encuentro entre los dos principales clubes españoles el 6 de mayo pasado en Barcelona, encontró que 2.822 entradas vendidas para el encuentro eran falsas. El club azulgrana estimó en mayo sus pérdidas en 1,5 millones de euros.
"A menos 8 empresas vendieron entradas falsificadas", según el comunicado de la Guardia Civil.
Estas empresas obtuvieron de socios del club catalán su código QR que identifica sus abonos para crear entradas falsificadas y venderlas a "altos precios", explicó el cuerpo policial.
Los 2.822 socios que participaron en este presunto fraude fueron sancionados en meses pasados por el Barça, que les suspendió los abonos. De ellos, 33 fueron expulsados por ser reincidentes en esta práctica.
Aún queda por determinar "el grado de connivencia e implicación" de los miembros de las empresas para saber si conformaban "una organización criminal", según la Guardia Civil. El Barça pidió este viernes en un comunicado "acabar con las mafias organizadas y con estas empresas" organizadoras de este "fraude".
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La Guardia Civil española anunció el arresto de siete personas implicadas en la venta de entradas falsificadas del último "clásico" entre el Barcelona y el Real Madrid, que costó 1,5 millones de euros al club catalán.
"Al final han sido 7 detenidos y una persona investigada", y no 10 como había sido anunciado previamente, indicó un portavoz de la Guardia Civil en Barcelona, que precisó que se produjeron "12 registros mayoritariamente en Barcelona".
La investigación, iniciada tras el encuentro entre los dos principales clubes españoles el 6 de mayo pasado en Barcelona, encontró que 2.822 entradas vendidas para el encuentro eran falsas. El club azulgrana estimó en mayo sus pérdidas en 1,5 millones de euros.
"A menos 8 empresas vendieron entradas falsificadas", según el comunicado de la Guardia Civil.
Estas empresas obtuvieron de socios del club catalán su código QR que identifica sus abonos para crear entradas falsificadas y venderlas a "altos precios", explicó el cuerpo policial.
Los 2.822 socios que participaron en este presunto fraude fueron sancionados en meses pasados por el Barça, que les suspendió los abonos. De ellos, 33 fueron expulsados por ser reincidentes en esta práctica.
Aún queda por determinar "el grado de connivencia e implicación" de los miembros de las empresas para saber si conformaban "una organización criminal", según la Guardia Civil. El Barça pidió este viernes en un comunicado "acabar con las mafias organizadas y con estas empresas" organizadoras de este "fraude".