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Asaltos y ataques a personas que visitan el cementerio municipal

Los malvivientes atacan adentro y afuera del camposanto a desprevenidos visitantes que llegan a rezar y a dejar una flor a sus deudos. Ahora hay custodia policial.
Sabado, 27 de octubre de 2018 01:22

El cementerio municipal San Antonio, de Tartagal, hace años que dejó de ser ese lugar tranquilo y de recogimiento donde las familias podían concurrir para honrar a sus difuntos o participar de una celebración religiosa. Habitualmente la visita a los difuntos se realiza en Tartagal los lunes por la tarde aunque el cementerio ubicado al final de la calle 20 de Febrero está abierto toda la semana.

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El cementerio municipal San Antonio, de Tartagal, hace años que dejó de ser ese lugar tranquilo y de recogimiento donde las familias podían concurrir para honrar a sus difuntos o participar de una celebración religiosa. Habitualmente la visita a los difuntos se realiza en Tartagal los lunes por la tarde aunque el cementerio ubicado al final de la calle 20 de Febrero está abierto toda la semana.

Ubicado frente al barrio Belgrano, al norte de Tartagal, es blanco de ataques permanentes, por lo que nada de lo que los deudos acerquen a sus familiares escapa al accionar de bandas de delincuentes que merodean, esperando el mínimo descuido.

Semanas atrás el chofer de una pompa fúnebre fue atacado por las bandas que bajan del otro lado de las vías del ferrocarril, mientras aguardaba la finalización de la inhumación de un cuerpo que había sido llevado al cementerio local.

Pero los familiares de los fallecidos también son blanco fácil de los malvivientes, quienes los atacan dentro del mismo cementerio cuando se dirigen a visitar alguna tumba. Con armas blancas, obligan a las personas -muchos de ellos adultos mayores- a entregar lo que llevan consigo, sea la billetera o el teléfono celular.

La situación lleva ya mucho tiempo y salvo que los deudos puedan acercarse al cementerio en un grupo numeroso, son atacados por los malvivientes de barrio Belgrano.

El comisario Alberto Ibarra, de la Unidad Regional N´ 4 con asiento en Tartagal, reconoció que es tal la inseguridad que se padece en el cementerio municipal de Tartagal que para el Día de la Madre debieron recurrir a efectivos del Cuerpo de Infantería, "incrementando la presencia del personal policial".

Patrullas motorizadas se sumaron para un operativo integral de seguridad que hicieron recorrido por diferentes jurisdicciones; Ibarra explicó que "recibimos pedidos concretos de seguridad en inmediaciones del cementerio y del barrio Belgrano. En una reunión que tuvimos en la multisectorial conformada en Tartagal, luego de analizar los pedidos al 911 la cantidad de denuncias determinamos que se trata de una zona conflictiva".

Agregó: "Por ese motivo hemos dispuesto que las patrullas hagan hincapié en esa zona porque fue un pedido específico de la multisectorial y que se visibiliza en los medios de comunicación de la ciudad. Si bien se acentúa en ocasiones como el Día de la Madre u otras similares, tratamos de mantener un patrullaje policial lo más constante y sostenido que nos sea posible; focalizamos con prevención y operativos en lugares más conflictivos, como esa zona", manifestó.

 

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