El pasado 18 de septiembre, responsables del proyecto astronómico LLAMA (Large Latin American Millimeter Array) constataron que el candado del portón de ingreso al sitio donde se construye el megatelescopio de la Puna salteña fue roto por desconocidos que, además, instalaron instrumentos de retransmisión de radio en el predio.
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El pasado 18 de septiembre, responsables del proyecto astronómico LLAMA (Large Latin American Millimeter Array) constataron que el candado del portón de ingreso al sitio donde se construye el megatelescopio de la Puna salteña fue roto por desconocidos que, además, instalaron instrumentos de retransmisión de radio en el predio.
Inmediatamente, comisionados científicos del emprendimiento astronómico argentino - brasileño denunciaron los hechos en la comisaría de San Antonio de los Cobres, localidad distante a unos 20 kilómetros, en línea recta, del sitio de Alto Chorrillos, donde piezas valuadas en 10 millones de dólares aguardan los trabajos de montaje final de la antena radiotelescópica a 4.825 metros de altura sobre el nivel del mar.
Las actuaciones policiales fueron elevadas el 24 de septiembre al fiscal penal de Rosario de Lerma, Gustavo Torres Rubelt, quien dispuso medidas tendientes a identificar a los intrusos y retirar los equipos que fueron insólitamente instalados en el sitio de emplazamiento del radiotelescopio.
Los hechos, aparte de la gravedad intrínseca que supone la violación con uso de la fuerza del predio que la Provincia concedió con exclusividad al Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) para el proyecto LLAMA, mediante el decreto 824 de 2014, tienen implicancias científicas inauditas. Los equipos de retransmisión que aparecieron en el sitio son incompatibles con el objetivo primordial del proyecto astronómico, que consiste en analizar las señales de radioondas del espacio exterior con las cuales, sin dudas, producirían interferencias.
Proyecto binacional
El proyecto LLAMA fue impulsado por un grupo de investigadores del Instituto Argentino de Radioastronomía ( IAR) y de la Universidad de Sao Paulo (Brasil). Hoy también cooperan diferentes organismos de la Nación y la Provincia, la Fundación de Apoyo a la Investigación del Estado de Sao Paulo (Brasil), el Conicet) y la Fundación Capacit-Ar del NOA, entre otras instituciones.
El observatorio de la Puna salteña, por sus características, se perfila como nodo complementario de otros complejos de radiotelescopios que ya operan en el desierto de Atacama (Chile), como APEX y ALMA. Este último está localizado a 180 kilómetros de Alto Chorrillos.
La antena radiotelescópica será instalada con una inversión cercana a los 18 millones de dólares.
La superantena, de 12 metros de diámetro, fue fabricada en las plantas de Vertex, una empresa tecnológica alemana que tiene sus plantas industriales en la ciudad de Druisburgo.
La operación del observatorio estará a cargo de científicos del Instituto Argentino de Radioastronomía (IAR) y la Universidad de Sao Paulo (Brasil).
La antena parabólica será montada en un edificio de 20 metros de diámetro. Llegó desarmada desde Europa, tiene un peso total de 90 toneladas y fue trasladada en varios camiones por sus dimensiones.
Solo el plato de la antena mide 6,5 metros de ancho.
Las partes del telescopio provienen de varios centros de investigación europeos, principalmente Holanda, Alemania e Italia.
En abril, científicos responsables del Proyecto LLAMA visitaron el sitio y las obras donde se construye el primer centro de radioastronomía argentino en la Puna salteña y en ese entonces ya contaba con un avance del 60%.
Estaba previsto que para fines de 2019 se realice el test científico antes de abrirse a la comunidad. De esa comisión participaron los científicos astrónomos Gloria Dubner y Juan José Larrarte, el ingeniero José Viramonte, y la secretaria de Ciencia y Tecnología de la Provincia, María Soledad Vicente.