Hace aproximadamente 50 días cuatro de los líderes de la banda del "Botudo" caían detenidos en Salvador Mazza. Con el correr de los días y semanas la Brigada de Investigaciones norteña, en conjunto con la Fiscalía Penal a cargo del doctor Armando Cazón, siguieron investigando. Este último fin de semana otro integrante de la peligrosa organización fue apresado, se trata de Juan Carlos Quiroga, más conocido como "El Gordo Mía", sindicado como el entregador, el hombre encargado de marcar los vehículos que luego eran robados e importados al vecino país de Bolivia.
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Hace aproximadamente 50 días cuatro de los líderes de la banda del "Botudo" caían detenidos en Salvador Mazza. Con el correr de los días y semanas la Brigada de Investigaciones norteña, en conjunto con la Fiscalía Penal a cargo del doctor Armando Cazón, siguieron investigando. Este último fin de semana otro integrante de la peligrosa organización fue apresado, se trata de Juan Carlos Quiroga, más conocido como "El Gordo Mía", sindicado como el entregador, el hombre encargado de marcar los vehículos que luego eran robados e importados al vecino país de Bolivia.
Miguel Angel Ortiz Condorí, alias "Botudo", es el jefe de la banda, fue detenido junto a su esposa, hermano y otros familiares y amigos. Son nueve en total las personas que están privadas de su libertad vinculadas al robo de al menos siete camionetas. Además, la banda del Botudo también tiene en su contra causas vinculadas a robos en distintos comercios, todos calificados, dado que actuaban fuertemente armados. En esta oportunidad los investigadores detuvieron a Quiroga, un comerciante de esa ciudad que tendría vínculo con la organización del Botudo.
Según pudo averiguar este matutino, fue a raíz de una ampliación de denuncia que efectuó uno de los damnificados en el robo de camionetas, detallando con nombre y apellido a los integrantes de la banda, donde sostuvo que el comerciante Quiroga en varias oportunidades lo había llamado por diferentes cuestiones. Le pareció raro que luego de recibir las llamadas del ahora detenido observaba que el propio "Botudo" y su gente deambulaban por la zona. De esa forma los investigadores interpretaron que podría tratarse de uno de los modus operandi de la banda: el comerciante llamaba para ubicar a la víctima y luego entraban en acción los otros integrantes.
Siguiendo con las pesquisas, personal del Grupo de Investigaciones 43 del norte provincial recibió el oficio judicial procedente del Juzgado de Garantías 2ª Nominación Tartagal, donde se ordenó la detención de Quiroga. Curiosamente el comerciante y sospechoso de ser una pieza clave en la banda investigada es el dueño de la camioneta Toyota Hilux que era conducido por el líder de la organización, el "Botudo".
Fuentes consultadas por El Tribuno indicaron que la función del comerciante era entregar los trabajos, tras brindar información de movimientos de dinero de otros comerciantes, así como la de marcar las camionetas que luego serían robadas. "El Gordo Mía", como llaman al nuevo detenido, tiene 36 años y es de profesión comerciante. Al momento de su detención expresó no tener teléfono celular dado que lo rompió hace algunas semanas.
La modalidad
"La detención de esta persona es muy importante para poder entender la modalidad de las operaciones, llegar a saber cómo se dieron algunos delitos como fue el caso de las camionetas en Salvador Mazza. La investigación tiene que ir aclarando y precisando algunas cuestiones, en tanto esperamos tener las pericias del Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) de los teléfonos para analizar el entrecruzamiento de llamadas de las nueve personas detenidas hasta el momento", le dijo a El Tribuno el fiscal penal de Salvador Mazza, Armado Cazón.
Los investigadores dieron un enorme paso en pos de seguir desbaratando a la banda del "Botudo", una organización norteña no solo con vínculos argentinos sino también del lado boliviano. A dicha banda se la investiga en al menos diez causas, la mayoría vinculada a robos calificados.
Luego de ser detenido, el comerciante Quiroga en sus declaraciones sostuvo ser amigo del "Botudo", Miguel Ángel Ortiz Condorí, sin embargo habría negado cualquier tipo de vínculo con la banda de asaltantes. Por el momento todo es materia de investigación, se esperan elementos de prueba fundamentales para la causa, incluso para saber a ciencia cierta qué tipo de vínculos tenía el comerciante con la banda del "Botudo".
Varios llamados y las sospechas
Uno de los denunciantes clave en la investigación de la banda del Botudo, en su ampliación de denuncia, señaló que antes de que los investigadores efectuaran diversos allanamientos y detuvieran a los cabecillas de la organización de asaltantes, había recibido varios llamados por parte de Juan Carlos Quiroga, contacto que realizaba para consultarlo por distintos temas, algunos con poco sentido. Sin embargo, en más de una oportunidad luego de colgar el teléfono celular le llamó la atención de ver al mismo Botudo, Miguel Ángel Condorí, jefe de la banda, y otros de sus cómplices dando vueltas por el lugar donde se encontraba. De esa forma los investigadores sospechan que se trata del modus operandi: Quiroga se encargaba de rastrear a las víctimas que luego eran asaltadas y amenazadas con armas de fuego.
Topo Martínez sigue prófugo
Al menos siete camionetas de alta gama fueron denuncias como robadas, se presumen fueron más, a raíz de una minuciosa investigación que se viene realizando en la causa.
Fuentes consultadas por El Tribuno no descartan que en el vecino país de Bolivia hay gente vinculada a la banda del Botudo, quienes se encargaban de vender las camionetas en ese mismo país y también a Paraguay. Para tener dimensión de la peligrosidad de esta banda, uno de los prófugos es Jesús “Topo” Martínez, integrante de la misma organización, quien estaría prófugo en Bolivia. Es el mismo tipo que intentó organizar un golpe comando con personas del vecino país e integrantes de la banda en la comisaría de Alto Verde y liberar a sus compañeros.