Las lluvias tempranas que se presentaron en un atípico octubre para Salta están marcando la falta de obras de mantenimiento, no solo en edificios de atención al público, donde funcionan organismo del Estado, sino también en las escuelas. Tal es el caso de la escuela Reyes Católicos, que ayer tuvo una mañana más que complicada. En las primeras horas de la jornada de los estudiantes, cerca de las 9, parte del cielorraso de una de las aulas se derrumbó, lo que obligó a las autoridades de la escuela a comunicarse con el Ministerio de Educación del Provincia, en la búsqueda de una solución.
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Las lluvias tempranas que se presentaron en un atípico octubre para Salta están marcando la falta de obras de mantenimiento, no solo en edificios de atención al público, donde funcionan organismo del Estado, sino también en las escuelas. Tal es el caso de la escuela Reyes Católicos, que ayer tuvo una mañana más que complicada. En las primeras horas de la jornada de los estudiantes, cerca de las 9, parte del cielorraso de una de las aulas se derrumbó, lo que obligó a las autoridades de la escuela a comunicarse con el Ministerio de Educación del Provincia, en la búsqueda de una solución.
Cerca de las 11.30 arribaron a la institución un ingeniero y un arquitecto que fueron los encargados de hacer el relevamiento del daño y ordenaron el cierre de otras tres aulas como medidas de precaución.
Mientras esto ocurría, los chicos del turno mañana, que cursan el primero y segundo año del secundario, fueron enviados a sus domicilios, previo llamado telefónico a los padres, notificándolos de lo ocurrido.
Pasadas las 13.30 los chicos del turno tarde que cursan tercero, cuarto y quinto años fueron recibidos y reubicados en las preceptoría, biblioteca y un salón de usos múltiples con el que cuenta la institución.
Consultado por El Tribuno sobre los motivos por los que los estudiantes tuvieron clases, pese a la precariedad en la que se encontraban, desde el establecimiento educativo informaron que no se podía suspenden el dictado de clases sin contar con la autorización de la supervisora o de la ministra de Educación, Analía Berruezo.
Buscando conocer más sobre la situación que atraviesa la escuela Reyes Católicos, El Tribuno dialogó con el vicedirector del turno tarde, Dino Ramos. El directivo explicó que la caída del cielorraso se debió a los problemas de humedad que sufre la institución y que no son exclusividad de este establecimiento. Ramos destacó que los edificios de la escuela 25 de Mayo, Juana Manuela Gorriti y la escuela de Lavalle, que fueron construidos en el mismo período, tienen estos problemas.
“A principios de año ya tuvimos este problema cuando se cayó parte del revoque de una de las aulas, se arregló y ahora estamos con lo mismo”, destacó.
Versiones de los padres de los alumnos y exdocentes de la institución hablaban de que el cielorraso se había caído en cuatro aulas. Consultado al respecto, el vicedirector del turno tarde aseguró que solo se cayó el cielorraso de una de las aulas y que los otros espacios educativos fueron cerrados por precaución.
Ramos agregó que desde las primeras horas de la tarde ya se encontraban trabajando en el lugar dos albañiles que se encargaron de tirar el revoque que todavía no se había desprendido y que este procedimiento se iba a realizar en todas las aulas que estuvieran afectadas. Un primer informe que llevó adelante la Dirección de Arquitectura del Ministerio de Educación señala que serían cuatro las aulas afectadas.
El docente destacó que desde la institución se llevó adelante todo el proceso de notificación de la situación. La primera en conocer la problemática fue la supervisora, que se encargó de llamar a Infraestructura del Ministerio de Educación, desde donde destinaron el personal para la obra que se requería, previa visita de un ingeniero y un arquitecto.
A esperar obras
Las autoridades de la escuela Reyes Católicos destacaron que hoy no se dictará clases en ninguno de los dos turnos y que esperan volver a la normalidad el lunes. El vicedirector del turno tarde destacó que en este período del año urge el volver a las aulas porque está cerrando el tercer trimestre.
“Estamos en un período de exámenes, y la demora en esto puede complicar el cierre del año”, destacó.
Una vez más la falta de previsión de obras en las escuelas afecta a quienes las requieren: los estudiantes. Anunciado el inicio de clases para el 6 de marzo, las obras de infraestructuras que se presentan con cuatro meses de anticipación desde las escuelas recién se comienzan en febrero. Un ejemplo de esto fue escuela Mariquita Sánchez de Thompson, donde este año 150 chicos no tuvieron su primer día clases porque había aulas clausuradas.