La situación deportiva de Gimnasia y Tiro desde lo futbolístico es agobiante y se necesitan resultados con urgencia para salir de la incómoda zona de descenso a la que cayó el albo tras la lapidaria goleada en contra sufrida en Chaco con Sarmiento, derrota que desembocó en la salida de Víctor Riggio de la dirección técnica y en la posterior asunción de un hombre de la casa, Daniel Ramasco.
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La situación deportiva de Gimnasia y Tiro desde lo futbolístico es agobiante y se necesitan resultados con urgencia para salir de la incómoda zona de descenso a la que cayó el albo tras la lapidaria goleada en contra sufrida en Chaco con Sarmiento, derrota que desembocó en la salida de Víctor Riggio de la dirección técnica y en la posterior asunción de un hombre de la casa, Daniel Ramasco.
El “Gato” tomó las riendas del equipo el pasado martes para provocar el golpe que necesita el millonario para salir del lodo. Y la primera chance para intentarlo será mañana, a las 17:30, en el Gigante del Norte, cuando Gimnasia reciba a un rival directo por la permanencia, Altos Hornos Zapla, que llega a Salta con urgencias similares, pero con buen semblante tras la victoria ante el último de la tabla, San Martín de Formosa.
Las malas señales no se fueron con el cambio de técnico, ya que el albo sufrió en las últimas horas un nuevo contratiempo: la lesión de Sergio Salto, que padece una molestia en el aductor que lo deja en duda en las horas previas a la recepción del merengue. Ramasco pensó en el volante por izquierda de la primera local, Ezequiel Giménez, para relevar al santiagueño; mientras que Juan Pablo Pereyra, otro crédito de la casa, relevará a Matías Rosso en el andarivel opuesto.