El 28 de noviembre, el gobierno argentino autorizó por decreto las subas de peajes de hasta 66% a partir de 2019 bajo el argumento de la devaluación y la caída del tránsito. Al día siguiente, en Paraguay, Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol, confirmó que River-Boca jugarían la final de vuelta de la Copa Libertadores en el Santiago Bernabéu, el estadio de Real Madrid. "Esto comenzó con una conversación que tuve con Florentino Pérez, con quien me une una gran amistad –contó Domínguez–. Le pregunté si era una idea muy loca, y dos minutos después me dijo que el Bernabéu estaba a disposición".
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El 28 de noviembre, el gobierno argentino autorizó por decreto las subas de peajes de hasta 66% a partir de 2019 bajo el argumento de la devaluación y la caída del tránsito. Al día siguiente, en Paraguay, Alejandro Domínguez, presidente de la Conmebol, confirmó que River-Boca jugarían la final de vuelta de la Copa Libertadores en el Santiago Bernabéu, el estadio de Real Madrid. "Esto comenzó con una conversación que tuve con Florentino Pérez, con quien me une una gran amistad –contó Domínguez–. Le pregunté si era una idea muy loca, y dos minutos después me dijo que el Bernabéu estaba a disposición".
Florentino Pérez, además de presidente de Real Madrid y dueño de casa en la final de la Copa Libertadores, es contratista del Estado argentino. El presidente del Real Madrid, tiene vínculos comerciales con la Argentina por medio de una importante firma que posee acciones de varias empresas de peaje y es contratista del Estado. El magnate español, anfitrión hoy del partido entre River y Boca por la final de la Copa Libertadores en el estadio Santiago Bernabéu. Pérez es el principal ejecutivo de la constructora ACS, que fue fundada en 1997, tiene más de 200 mil empleados y opera en muchos países.
De acuerdo con una nota publicada en el diario Página 12, la compañía facturó en el 2016 cerca de 36 mil millones de dólares y obtuvo una ganancia neta de US$855 millones. La firma participó de varias licitaciones para obras públicas en la Argentina y controla una parte del grupo Abertis, que actualmente tiene la concesión de las autopistas Acceso Oeste y Acceso Norte.
Socios
Pérez tuvo que negociar con la administración de Mauricio Macri la renovación de este contrato con el gigante europeo, que finalmente se extendió hasta el 2030.
A su vez, Sideco, una de las empresas que fundó la familia del Presidente, fue socia de Abertis al compartir un porcentaje de las acciones de Autopistas del Sol (Ausol), negocio en el que también estaba la italiana Impregilo.
Según el mencionado medio, Macri y el titular del Real Madrid se conocen desde 2009, cuando el entonces jefe de Gobierno porteño visitó la capital española en el marco de un encuentro con autoridades del Partido Popular (PP).
El jefe de Estado argentino fue acusado de haber beneficiado a su familia a través de la suba del peaje en Ausol, causa que recayó en el Juzgado Federal de Daniel Rafecas, pero se cerró más tarde.
Por su parte, Pérez fue convocado por el Congreso de su país para el próximo 12 de diciembre, para que brinde explicaciones sobre su posible vínculo en la causa que investiga un financiamiento ilegal del PP.