Hace una semana se conoció un audio donde una persona señalaba que la habían contactado para amedrentar al intendente Gustavo Sáenz. Desde ese momento se armó un gran revuelo en el ámbito judicial.
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Hace una semana se conoció un audio donde una persona señalaba que la habían contactado para amedrentar al intendente Gustavo Sáenz. Desde ese momento se armó un gran revuelo en el ámbito judicial.
Por este tema ya hay tres personas detenidas y, según informaron ayer desde la Fiscalía, Gustavo Alberto Tolava -quien sería el hombre del audio-, acusado de coacción agravada, instigación a cometer delito y asociación ilícita en concurso real, fue imputado el miércoles en la causa que investiga las amenazas contra el intendente y se abstuvo de declarar.
El fiscal penal 6, Horacio Córdoba Mazuranic, realizó el miércoles la audiencia de imputación al tercer detenido en la causa que investiga por amenazas al intendente Sáenz.
Se trata de Gustavo Alberto Tolava, de 32 años. El lunes, desde la Policía señalaron que este hombre tiene antecedentes por robos, amenazas y por abusos sexuales; también tiene dos o tres condenas. Es muy conocido en el ambiente delictivo de Salta, aunque eso no brinda la certeza de que pueda ser un sicario, como lo habían presentado en un primer momento.
Cabe recordar que los otros dos detenidos, Pablo Federico Delaloye y Juan Daniel Urzagaste, fueron imputados por los mismos delitos el lunes y fueron asistidos por abogados particulares y prestaron declaración ante el fiscal.
Desde la Fiscalía señalaron que estas tres personas continúan detenidas mientras se completan diligencias y pericias solicitadas por Córdoba Mazuranic. Desde el Poder Judicial le dijeron a este medio que lo que buscan los detenidos es que se cambie la carátula, ya que la actual carátula de la causa es muy dura.
El audio polémico
"El laburo era cruzarle el auto, cagarle a tiros el auto para que se remilcague de miedo y que vea quiénes tienen poder...". Eso se escucha que se dice en el audio. La persona que habla en la grabación dice que lo quisieron contratar bolicheros de la Balcarce para amedrentar a Sáenz.
Esto se conoce en momentos en el que en el corredor comenzó a regir una ordenanza que prohíbe los boliches.
Sin pruebas
Luciana Andolfi, defensora de Urzagaste y Delaloye, aseguró que se presentaron ante la Justicia y que no les recibieron material de prueba. Los delitos por los que están acusados pueden tener penas de cuatro años de prisión. “No hay pruebas de nada ni peligro de fuga”, dijo.