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El diálogo, una de las claves para prevenir que los niños sufran grooming

La confianza es fundamental para que los chicos recurran a los adultos.
Domingo, 18 de febrero de 2018 00:00

El miércoles último, en Buenos Aires, un hombre atacó al joven que supuestamente había acosado a su hija de 11 años por internet. Sin haber hecho una denuncia formal, el padre concertó un encuentro. A través de mensajes citó al supuesto acosador en un lugar público y lo golpeó hasta que sangrara. Recién entonces llamó a la Policía. Este hecho volvió a sacar a la luz un delito que sufren miles de niños, niñas y adolescentes: el acoso sexual virtual o "grooming", en inglés.

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El miércoles último, en Buenos Aires, un hombre atacó al joven que supuestamente había acosado a su hija de 11 años por internet. Sin haber hecho una denuncia formal, el padre concertó un encuentro. A través de mensajes citó al supuesto acosador en un lugar público y lo golpeó hasta que sangrara. Recién entonces llamó a la Policía. Este hecho volvió a sacar a la luz un delito que sufren miles de niños, niñas y adolescentes: el acoso sexual virtual o "grooming", en inglés.

Consultado por El Tribuno, Federico Dada, representante de la Provincia ante el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom) y consejero miembro del Consejo Asesor de la Comunicación Audiovisual y la Infancia (Conacai), brindó recomendaciones para prevenir el acoso sexual virtual a niños y adolescentes.

"Hay que generar vínculos de confianza para que, cuando algo negativo suceda, los chicos recurran a un adulto. La otra clave es el diálogo", observó y añadió que sería bueno el acompañamiento desde la comunidad educativa.

En primer lugar, sugirió enseñarles a los chicos a no dar información comprometedora -fotografías, videos, contraseñas- por internet a conocidos ni a desconocidos. "Una foto o un video pueden cambiar de contexto y eso hace que queden expuestos. Todo material que circula por internet es difícil o imposible de borrar", afirmó.

En segundo lugar, aconsejó no usar las cámaras de los dispositivos cuando se chatea con desconocidos y cubrirlas con cinta adhesiva. "Es muy fácil para quien sabe sobre tecnología ingresar a esa cámara en forma remota desde otro dispositivo. La imagen es un dato personal, que requiere cuidado y mucha protección. Es tan importante como la dirección de la casa o el número de teléfono", explicó.

En tercer lugar, habló sobre la importancia de que los chicos generen contraseñas seguras para evitar robos de información. "Hay chicos que comparten sus contraseñas con sus novias. Entregar datos personales y fotos íntimas no es una demostración de amor", señaló.

En cuarto lugar, recomendó configurar la privacidad en las redes sociales. "Cuando abrimos una cuenta en una red social, es indispensable configurar a quién permitimos ver nuestras publicaciones para que las fotos que subimos las vean solo aquellos que nos conocen realmente", resaltó.

Como última advertencia, dijo que hay que ser muy cuidadosos con los datos personales que se vuelcan en la red.

El especialista aconsejó evitar escribir el nombre completo, la fecha de nacimiento y la edad en las direcciones de correo electrónico. “Es mejor usar frases, pseudónimos, sobrenombres o alias”, dijo.

También advirtió que los niños, niñas y adolescentes necesitan un apoyo sostenido. “Muchos chicos no tienen construidos los criterios de privacidad e intimidad y eso los pone en un lugar muy riesgoso. Esto tiene que ver con padres que no saben cómo acompañarlos en estos nuevos espacios de ejercicio de derechos de la infancia”, planteó.

Dada aseguró, además, que los padres deben transformarse en adultos digitales. “No podemos entregar un dispositivo sin una palabra previa. Debemos decir lo mismo que en el mundo presencial: ‘No hables con desconocidos’. Los adultos deben estar muy presentes siempre, también en los entornos digitales”, recomendó.

Ayuda

Ante la sospecha de que una persona menor de 18 años es víctima, se puede llamar al 0800-222-1717, que funciona todos los días del año, durante las 24 horas. 

Este teléfono es del Equipo Niñ@s, del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación. La dirección de correo electrónico es equiponinas @jus.gov.ar. 

Para denunciar un caso de acoso sexual virtual se puede ir a una dependencia policial o llamar al 144 y, con una declaración anónima, se deriva el asunto a la división Trata de Personas, de la Policía de Salta. 

El delito es penal y prevé una condena de entre seis meses y cuatro años de prisión, según el artículo 131 del Código Penal, incorporado por Ley 26.904 en 2013. 

Cómo actuar

Cuando se detecta un caso de acoso sexual virtual, además de hacer la denuncia formal, es recomendable no borrar ningún contenido de la computadora o del teléfono celular, ya sean conversaciones, imágenes o videos en los que haya un diálogo entre el acosador y la víctima, porque puede servir como prueba para la Justicia. Se sugiere hacer capturas de pantalla y guardarlas en formato digital o impreso.

En principio, conviene no bloquear al usuario ni denunciarlo ante la red social. “Al ser bloqueado, el pederasta puede escapar, crear un nuevo perfil y continuar con la misma modalidad de delito avanzando sobre otros chicos”, manifestó Federico Dada. Los acosadores digitales suelen tener entre 15 y 30 víctimas en simultáneo. 

Para acompañar a la víctima, es importante no recriminar ni culpabilizarla. “Es una situación tensionante, dolorosa y vergonzosa. Se debe evitar afianzar esa vergüenza y permitir al chico contar lo que pasó con la mayor sinceridad y libertad posible, acompañándolo desde el afecto y el amor y no desde el reto o la culpa”, indicó.

En las redes sociales no se debe dar información comprometedora -fotografías, videos, contraseñas- a conocidos ni a desconocidos.

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