¿Quieres recibir notificaciones de alertas?

22°
19 de Abril,  Salta, Centro, Argentina
PUBLICIDAD

Noam, Zur: “La estrella es la música, no el director” 

Una nueva temporada de la Orquesta Sinfónica de Salta (OSS) comenzará el primer jueves de marzo, de la mano de su flamante director, el maestro israelí Noam Zur. 
Domingo, 25 de febrero de 2018 10:57


El 1 de marzo, desde las 21.30 y con entrada libre y gratuita, se podrá disfrutar de un concierto para violín y orquesta de Piotr Tchaikovsky y de la Sinfonía Nº 5 de Gustav Mahler, quien es para Zur uno de sus referentes. 
El joven maestro, nacido en Israel en 1981, hizo además algunos arreglos para la interpretación inaugural. 
A pesar de su juventud acarrea una vasta experiencia adquirida en diversos puntos del mundo. En el período 2014-2015 se presentó en América del Sur y Centroamérica, oportunidad en la que actuó con la Orquesta de Mendoza y la de Rosario. Además fue convocado como profesor invitado de la Universidad Nacional de las Artes en Buenos Aires para clases magistrales.
Casado también con una música que trabaja en Alemania, aún no tienen hijos por lo que les resulta menos difícil mantener trabajos en lugares distintos. 
Este director es hijo de una argentina que en 1973 emigró a Israel, por lo que tiene familia en éste país y un gran apego afectivo. 
Con extraordinaria cordialidad conversó con El Tribuno en un muy claro castellano, pero con marcados rasgos de su hebreo natal. 
Noam relató que su conocimiento del idioma español es propio del estudio y no de su madre, con quien se comunica solo en hebreo. 
Así brindó detalles de sus orígenes en la música y lo que tiene preparado para este año frente a la OSS. 

Alcanzaste el límite de notas gratuitas
inicia sesión o regístrate.
Alcanzaste el límite de notas gratuitas
Nota exclusiva debe suscribirse para poder verla


El 1 de marzo, desde las 21.30 y con entrada libre y gratuita, se podrá disfrutar de un concierto para violín y orquesta de Piotr Tchaikovsky y de la Sinfonía Nº 5 de Gustav Mahler, quien es para Zur uno de sus referentes. 
El joven maestro, nacido en Israel en 1981, hizo además algunos arreglos para la interpretación inaugural. 
A pesar de su juventud acarrea una vasta experiencia adquirida en diversos puntos del mundo. En el período 2014-2015 se presentó en América del Sur y Centroamérica, oportunidad en la que actuó con la Orquesta de Mendoza y la de Rosario. Además fue convocado como profesor invitado de la Universidad Nacional de las Artes en Buenos Aires para clases magistrales.
Casado también con una música que trabaja en Alemania, aún no tienen hijos por lo que les resulta menos difícil mantener trabajos en lugares distintos. 
Este director es hijo de una argentina que en 1973 emigró a Israel, por lo que tiene familia en éste país y un gran apego afectivo. 
Con extraordinaria cordialidad conversó con El Tribuno en un muy claro castellano, pero con marcados rasgos de su hebreo natal. 
Noam relató que su conocimiento del idioma español es propio del estudio y no de su madre, con quien se comunica solo en hebreo. 
Así brindó detalles de sus orígenes en la música y lo que tiene preparado para este año frente a la OSS. 

¿Como comenzó con la música?
No tuve ninguna opción: mis padres son músicos. Mi padre fue primer fagot de la Orquesta Filarmónica de Israel y de otras orquestas. Mi madre es la primera viola de la Sinfonietta de Israel y después en fila de la filarmónica. Nací y crecí en el mundo de la música, especialmente con la influencia de Mahler. 
¿Cuándo decidió ser director? 
En la adolescencia, con 14 años ya sabía que quería ser director de orquesta. A esa misma edad entré a la juvenil de la Filarmónica de Israel. Estudiaba música en la escuela, desde los 12 años. Toda mi educación fue con la música. Estudié para compositor, director y filósofo. 
¿Qué instrumentos toca?
Originalmente el trombón, un poco de contrabajo y también piano. Pero el que más me gusta es el trombón. Aunque ahora no puedo tocar por falta de tiempo. 
¿Es el director qué le hubiera gustado que lo dirija?
Sí, tengo un estilo con el que entiendo que la estrella es la música, no el director. Porque sin Mozart, Haydn, Mahler, Beethoven, Tchaikovsky, Ginastera o Piazzola, que son unos compositores geniales, yo no tendría trabajo. Ellos son mejores músicos que yo. Lo importante es saber cuál es mi posición, que es la de servicio a los verdaderos maestros de los que tenemos el honor de interpretar. 
¿Quién de los nombrados fue el que más lo marcó?
Sin duda Mahler. Es un compositor con el que vivo desde que nací. Su 5ta sinfonía es un “monumento”, por eso para mi fue muy importante interpretarlo en el lanzamiento de mi primer temporada con la OSS. De esa forma voy mostrando el perfil artístico. Los arreglos que hice tienen que ver con la forma en la que los músicos están ubicados, elegí la forma de las antiguas orquestas alemanas donde los primeros violines están de un lado y los segundos en otro lado. 
Este año haremos la 5ta. y la 4ta. La próxima temporada me gustaría abrir con la 6ta. y la siguiente con la 7ma. 
Y así planteo un “mini ciclo interanual” con las sinfonías mas instrumentales y profundas de Mahler. Creo que será un ciclo importante para mí, la OSS y el público. 
¿Se proyecta por mucho tiempo al frente de la OSS?
Tengo un cargo por tres años y proyectos por más de 30. Salta es una provincia muy linda, de lo que vi me gusta mucho.
Todo lo que conozco de Latinoamérica es muy parecido a Tel Aviv en su mentalidad, por eso me parece muy familiar y se me hace más fácil quedarme. 
Soy citadino ciento por ciento. Tel Aviv es una ciudad que nunca duerme y eso es lo que hace que mi corazón esté ahí. En Alemania, por ejemplo, se cena a las 6 de la tarde y después está todo cerrado porque hace mucho frío, por eso prefiero las formas argentinas, latinas. 
Cómo director, ¿cuál es su búsqueda artística?
Fundamentalmente soy un músico como los integrantes de la orquesta, pero mi instrumento es la propia orquesta. No sé si busco la excelencia, pero sí tengo la especialidad de cambiar el sonido de la orquesta. Esa es mi excelencia, tengo una idea muy clara de la arquitectura de la música. Es más importante que me guste lo que hago, es algo de satisfacción personal. 
¿Qué puede decir de la OSS?
Es una orquesta con muchas posibilidades y también con algunas dificultades, como cualquiera del mundo. Creo que podemos hacer cosas en Salta, teniendo en cuenta lo acotado del presupuesto, que no nos permite invitar algunos músicos. Pero sin embargo puedo hacer cosas que no podría en otra parte. Por ejemplo, voy a hacer una sinfonía de Bruckner que para mí será un estreno y aunque hay quienes sostienen que soy muy joven para animarme a tanto y será un desafío. 
Puedo hacer una mixtura entre una sinfonía clásica y una romántica, sin presiones cosa que no podría hacer en otra parte del mundo. 
¿Y de los músicos que la conforman?
Tenemos un nivel muy bueno de músicos. Si bien hay algunos cargos abiertos vamos a hacer un llamado internacional para cubrirlos y esperamos que se presenten los mejores, por lo menos de los que hablan castellano. Esta es una orquesta cosmopolita que ofrece una muy buena opción para músicos de todo el mundo. Lo bueno es que la música es un idioma mundial. 
¿El programa para el presente año ya está cerrado?
Sí. Ya estamos trabajando para 2019 y 2020, solo faltan algunos pequeños detalles más relacionados a la firma de contratos, nada más. 
En el primer concierto podrán disfrutar de Así Matathias, como violinista invitado que es uno de los mejores que he dirigido. 
Más adelante tendremos a un concertino, un pianista y cantantes del teatro Colón y sumaremos de los escenarios más importantes del mundo. Además de directores invitados de Argentina, España y otros países. 
¿Qué es lo que va a impactar al público de esta OSS?
Espero que todo lo que hagamos. Tenemos conciertos diferentes pero ninguno es más importante. Todos lo son, y hacemos lo mejor que podemos. A mí no me importa para dónde es el concierto, yo voy a dar de mí lo mejor.
¿Qué espera del público salteño?
Que disfrute de cada concierto, tanto en modo emocional como intelectual y si no lo hacen también será bueno, porque son maneras de interpretar el arte. Pero algo es seguro: ningún concierto será aburrido. 

x
 

Temas de la nota

PUBLICIDAD
PUBLICIDAD
PUBLICIDAD

Temas de la nota

PUBLICIDAD