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El derrumbe de una vieja casona provocó pánico en la Ciudad Termal

Los obreros que estaban trabajando en la demolición se salvaron de milagro.Una de las paredes cedió y el techo se desplomó ante la mirada azorada de los obreros.
Martes, 27 de febrero de 2018 00:00

Ivana Castillo

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Ivana Castillo

La calle Gemes es reconocida no tan solo por ser una de las arterias céntricas más transitadas, sino también por la historia que ella acuna desde la fundación de Rosario de la Frontera. Los desfiles de los tradicionales corsos y los primeros almacenes de ramos generales fueron los íconos que marcaron a esa arteria, tanto por la actividad cultural como la comercial de la Ciudad Termal. En esa calle, alrededor de 10 obreros se salvaron de morir aplastados mientras trabajaban en la remodelación de una centenaria vivienda. En esa tarea estaban los operarios cuando de pronto el techo se vino abajo. Por suerte ninguno estaba en el interior al momento del derrumbe. Nadie sabe explicar qué pasó. Con la premura del caso, en seguida arribaron los Bomberos Voluntarios, quienes adoptaron las medidas de seguridad pertinentes. Lo primero que hicieron fue colocar un vallado que se extendió hasta la mitad de la calzada para evitar el paso de ocasionales transeúntes.

Por este motivo la calle Gemes permaneció cortada por espacio de 6 horas, mientras los obreros dieron por suspendida sus tareas de reforma de la vivienda ubicada en una estratégica esquina del centro de la ciudad. En esa propiedad está previsto para fin de año la inauguración de la primera etapa de un moderno centro comercial con varios locales. Para la segunda etapa, aún sin fecha definida, se prevé la construcción, en la parte de arriba, de un apart hotel con siete departamentos y un estacionamiento en el subsuelo. Con este proyecto se empezó con la reforma integral del lugar hace pocos meses. Dicha reforma consiste primeramente en la demolición plena de la propiedad de más de 1.250 metros cuadrados.

En dialogo con El Tribuno, el arquitecto a cargo de la obra, Francisco Bruno, aseguró que "ya se encuentra todo bajo control y se retomó la actividad con total normalidad". Dijo que afortunadamente no hubo que lamentar víctimas entre el personal que se hallaba abocada a la demolición. Bruno explicó que una de las la paredes estaba complicada. "Hemos tomado todos los recaudos del caso para evitar una nueva caída y los obreros ya están trabajando para poder finalizar a tiempo la obra", indicó el profesional.

Frente al lugar donde ocurrió el derrumbe se encuentra también en plena ejecución y refacción el reconocido cine teatro Gemes. El intendente Gustavo Solís y parte de su gabinete estaban visitando esa obra cuando se escuchó el estruendo. Está previsto que el teatro marras sea inaugurará el próximo 9 de julio, en ocasión de esa fiesta patria.

 

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