Distintos puntos en la provincia se vieron manchados con derramamiento de sangre producto de diversos siniestros viales, cuatro de ellos fatales. Entre el sábado a la noche y antes del mediodía del domingo, cinco muertes sobre calles y rutas salteñas expusieron un cuadro trágico. En uno de los hechos ocurrido en Tartagal, un sujeto se dio a la fuga luego de robar una moto a la salida de un boliche. Minutos más tarde colisionó a otra motocicleta causando la muerte de un hombre. El agresor es buscado intensamente por las fuerzas de seguridad.
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Distintos puntos en la provincia se vieron manchados con derramamiento de sangre producto de diversos siniestros viales, cuatro de ellos fatales. Entre el sábado a la noche y antes del mediodía del domingo, cinco muertes sobre calles y rutas salteñas expusieron un cuadro trágico. En uno de los hechos ocurrido en Tartagal, un sujeto se dio a la fuga luego de robar una moto a la salida de un boliche. Minutos más tarde colisionó a otra motocicleta causando la muerte de un hombre. El agresor es buscado intensamente por las fuerzas de seguridad.
El robo y posterior colisión ocurrió sobre calle España casi ruta nacional 34 de esa ciudad, cerca de las 6, en inmediaciones del boliche bailable El Gigante. La víctima fue identificada por la Policía como Arias Ángel Pastor, mientras que el agresor todavía no fue identificado. Los otros escenarios donde hubo que lamentar personas fallecidas son barrio Solidaridad, zona sudeste de esta ciudad; General Güemes, donde murieron dos personas, y Río del Valle, cerca de Las Lajitas, donde dos hombres a bordo de un auto chocaron de frente con un camión, el conductor del rodado más chico, Franco Gustavo Vilte, perdió la vida.
Según datos de la Policía, hasta el momento en toda la provincia hay 63 personas que murieron producto de un siniestro vial. Las últimas cinco víctimas fatales perdieron la vida entre el sábado a las 22 y el domingo cerca de las 8, solo diez horas transcurrieron en los distintos accidentes de tránsito. Se trató del fin de semana más trágico en lo que va del 2018 donde la imprudencia, alta velocidad y falta de control en puntos clave, como en las salida de los boliches, dejaron el triste saldo.
Robó y mató
Un joven de 22 años salió del boliche bailable Amir, a unos 400 metros del otro local bailable donde se produjo la fatal colisión, y advirtió que le habían robado su moto Gilera Smash. En medio de la intervención policial, el damnificado se acercó para denunciar el robo de su moto mostrando que tenía en su poder la llave de encendido del vehículo.
Fuentes policiales señalaron que la persona buscada por las fuerzas de seguridad habría cometido el robo de la moto en el boliche Amir, minutos después a bordo del mismo rodado atropelló al señor Pastor en inmediaciones del otro boliche, El Gigante.
Un sargento que se encontraba en el lugar observó el choque entre las motos indicando que el ladrón se incorporó velozmente y se subió a otra motocicleta que al parecer estaba tuneada, una Honda Storne, conducida por otro hombre. Según lo expuesto por el funcionario, se fugaron con dirección al barrio San Silvestre por calle San Martín.
General Güemes
Alrededor de las 6.30 de ayer, un auto Vento conducido por una persona de apellido Quinteros, colisionó desde atrás a una moto 150cc tipo cross donde viajaban Rafael Gómez y Darío Godoy. La moto subió a la ruta nacional 34 a la altura del barrio Cooperativa tomando dirección Norte- Sur, en ese mismo sentido circulaba el Vento y quizá por la velocidad que arrastraba no pudo frenar a tiempo o hacer una maniobra para evitar la colisión con los motociclistas. El impacto fue tan fuerte que los cuerpos quedaron esparcidos sobre la ruta, mientras la moto fue arrastrada unos 50 metros. El conductor se dio a la fuga; sin embargo, la patente del rodado se desprendió y quedó a metros de la moto. En un rápido rastreo, personal de la Brigada de Investigaciones pudo encontrar al Vento escondido en una vivienda del barrio Soem de General Güemes, el conductor quedó detenido.
Bº Solidaridad
Un hombre de 38 años, identificado como Joaquín Avendaño, dirigente del club San Antonio, murió tras colisionar con un poste de alumbrado público. Ocurrió ayer a las 7.30 en la avenida Ennio Pontussi, a unos 100 metros de la ruta 26 en el ingreso al barrio Solidaridad.
El auto en el que viajaba, un Renault Logan, quedó incrustado en el poste y casi se parte al medio. El muchacho falleció en el acto.
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