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Testigos dejaron al borde del abismo a Gaspar Cinco

Declaró la mujer que le vendió el cianuro que mató a su novia y al niño.Una amiga del acusado dio detalles de los prolegómenos del suceso.
Miércoles, 25 de abril de 2018 00:00

El periodista Franco Rodrigo Gaspar Cinco quedó ayer virtualmente sentenciado con el categórico y revelador testimonio de dos mujeres en la tercera audiencia del juicio que se ventila en la Ciudad Judicial. A la luz del esclarecimiento del doble homicidio que se le imputa, las declaraciones de Liliana Cristina Cinta y Violeta Evangelina Cruz, pueden resultar cruciales en el momento que el Tribunal de Juicio emita su veredicto en la jornada del 4 de mayo.

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El periodista Franco Rodrigo Gaspar Cinco quedó ayer virtualmente sentenciado con el categórico y revelador testimonio de dos mujeres en la tercera audiencia del juicio que se ventila en la Ciudad Judicial. A la luz del esclarecimiento del doble homicidio que se le imputa, las declaraciones de Liliana Cristina Cinta y Violeta Evangelina Cruz, pueden resultar cruciales en el momento que el Tribunal de Juicio emita su veredicto en la jornada del 4 de mayo.

Gaspar Cinco está imputado de haber provocado la muerte por envenenamiento con cianuro de su novia Alejandra Ximena Párraga (26 años) y de Amir, el hijo de dos años de la joven, el 5 de junio de 2017. Los testimonios de los padres, hermanas y amigas de Alejandra, entre el viernes y el lunes pasado, ya habían puesto en aprietos al imputado, al brindar una serie de detalles relacionados con este dramático suceso. Según la acusación fiscal, Gaspar Cinco premeditó y ejecutó deliberadamente lo acontecido en dicha oportunidad, con el propósito de atentar contra la vida del infante, a quien consideraba un estorbo en su relación con Alejandra. Con ese fin habría comprado cianuro en el local "Quantum", en la calle 12 de Octubre 798. Luego mezcló el veneno con agua y lo llevó en una botella a la casa de su novia, a quien habría sugerido que le diera de beber al niño con el argumento de que se trataba de agua bendita. Para animar a Amir, su madre ingirió también el líquido y ambos murieron a los pocos minutos.

Cinta reconoció al licenciado en Ciencias de la Comunicación como la persona a quien vendió el letal producto. "Primero me consultó por teléfono y media hora después se presentó en el negocio y le vendí una botella de quinientos gramos", declaró la testigo. Y agregó: "Por curiosidad, le pregunté para qué necesitaba el cianuro, y me respondió que era para un amigo que estudiaba en la UNSa", señaló la mujer. "El cianuro no tiene restricción, es un producto de venta libre y nuestros principales clientes son los orfebres", respondió Cinta ante un consulta del fiscal Ramiro Ramos Ossorio. "¿Y cómo lo notó al imputado", inquirió el representante del Ministerio Público. "Tranquilo, no me despertó sospecha", afirmó.

Chats sugerentes

También fue contundente el testimonio de Cruz, una licenciada en nutrición, quien mantenía contactos por Whatsapp con Gaspar Cinco. "Cuando me lo presentaron en 2012 advertí que era un buen chico, inteligente, educado", dijo. Contó que días antes de los hechos el periodista le preguntó por mensaje de texto dónde podía comprar cianuro. Dijo que le pareció rara la consulta, y que en tono de broma le preguntó: "¿A quién querés matar?". Y fingiendo desconocer para qué servía la sustancia, inquirió: "¿Para eso es?". "Me aclaró que era para un amigo y entonces le pasé la dirección de Quantum, porque sabía que allí la UNSa compraba productos de laboratorio", subrayó.

Según Cruz, ella no le dio mucha importancia a lo del cianuro porque Gaspar Cinco solía enviar mensajes zafados. "Él tenía un humor negro, todo se lo tomaba en broma, y no creí que realmente estuviera interesado en comprar ese producto, jamás pensé que me estaba insinuando algo tan delicado y que lo podría concretar con hechos", expresó la licenciada Cruz. Refirió que el día anterior a la tragedia Gaspar Cinco le insistió sobre el cianuro, esta vez en relación a la dosis que tenía que emplear. "Cuando me llegó el mensaje yo ya me estaba durmiendo; quería saber a cuánto equivalía 200 miligramos, si sería una cucharada sopera. Yo creí entender que me consultaba a cuánto equivalían veinte gramos y le respondí en ese sentido", expresó la testigo. Durante la audiencia de ayer se exhibieron en una pantalla los referidos chats en fotografías de captura de pantalla que se obtuvieron del teléfono celular de Cruz al momento que prestó declaración testimonial ante la División Homicidios. La licenciada ratificó en todos los términos su contenido

A modo de autocrítica, manifestó: "Después de todo lo que pasó, me di cuenta de que tendría que haber tomado más atención a los mensajes".

“Que lo condenen”

La licenciada Cruz dio muestras de sentirse afectada por la actitud de Gaspar Cinco. “Me sentí engañada porque siempre pensé que era un chico bien, una buena persona y por eso lo acepté como amigo”, señaló. Dijo que lo conoció a través de una amiga y que nunca sospechó nada de él. “Cuando tomé conocimiento de lo que había pasado, recién entonces me cerró todo aquello de los chats”, se lamentó. “Quiero que lo condenen”, respondió al presidente del tribunal, Angel Longarte, cuando éste le preguntó cuál era su interés respecto al resultado del juicio.

Declaró que llevó agua bendita 

El comisario Flavio Alejandro Peloc explicó que el día de los hechos, en horas de la noche, tomó declaración a Gaspar Cinco. Dijo que para ese momento la familia Párraga ya había encontrado la botella con cianuro que el imputado había llevado al domicilio de su novia.
“Estaba tranquilo, no lloraba y me aseguró que quería colaborar con el hecho, porque sabía que las víctimas habían muerto en confusas circunstancias”, señaló Peloc. El policía sostuvo que el propio Gaspar Cinco le refirió que la botella secuestrada contenía agua bendita que había conseguido de la Catedral. 
El testigo recordó que el periodista le aseguró que la botella se la entregó a Alejandra Párraga, quien estaba con su hijo Amir en la habitación. “Me aclaró que él no ingresó a la habitación, que se quedó afuera, porque los padres de la chica no le permitían que estuvieran a solas allí”, subrayó.
Según Peloc, el imputado le comentó que minutos después Alejandra salió desesperada de la habitación con su pequeño hijo en brazos y como estaba desvanecido el abuelo comenzó a practicarle respiración boca a boca. Respecto a su novia, Gaspar Cinco le manifestó que esta salió a la calle, aparentemente en busca de ayuda para al niño. “Decía que la chica estaba muy rígida, que en un momento dado se desmayó y que luego la llevaron al hospital San Bernardo donde falleció”, dijo.
Peloc afirmó que luego de leer la declaración, Gaspar Cinco le insistió en que dejara constancia que Alejandra mantenía una mala relación con sus padres.
 

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