Una cuadrilla de 200 empleados, aproximadamente, trabaja durante las 24 horas todos los días para entregar a tiempo las obras de refacción del aeropuerto Internacional Martín Miguel de Gemes. El Tribuno pudo acceder al interior de la estación aeroportuaria para ver las tareas que se están realizando, después de que trabajadores aeronáuticos expresaran su preocupación por la posibilidad de que las obras se extiendan más allá del 6 de mayo, fecha en la que la base aérea debe estar habilitada para empezar a operar al día siguiente.
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Una cuadrilla de 200 empleados, aproximadamente, trabaja durante las 24 horas todos los días para entregar a tiempo las obras de refacción del aeropuerto Internacional Martín Miguel de Gemes. El Tribuno pudo acceder al interior de la estación aeroportuaria para ver las tareas que se están realizando, después de que trabajadores aeronáuticos expresaran su preocupación por la posibilidad de que las obras se extiendan más allá del 6 de mayo, fecha en la que la base aérea debe estar habilitada para empezar a operar al día siguiente.
"Van en tiempo y forma las obras, acá solamente se para cuando llueve porque no se puede trabajar. El lunes siete, el aeropuerto va a estar abierto y los aviones volando", dijo categóricamente una autoridad de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) a El Tribuno, desmintiendo los rumores de demora que se generaron en los últimos días.
En los 21 días programados de cierre, las obras que se realizan van siendo certificadas por la Anac y fiscalizadas el Organismo Regulador del Sistema Nacional de Aeropuertos (Orsna). Ambos organismos serán los encargados de hacer los análisis de riesgo del aeropuerto una vez que estén finalizados los trabajos.
Actualmente se está llevando adelante la segunda etapa. Se avanza en la repavimentación de la intersección de la pista principal y alternativa, lo mismo se hace en la zona de rodaje de los aviones y se amplía la plataforma para llevar su capacidad a cinco aviones. Se añadirá una manga para los vuelos internacionales, por lo que contará con tres en total.
Una fresadora grande Writgen W-200 (foto) levanta el pavimento de la vieja pista secundaria (denominada 06-24), que estaba en desuso, dejando a su paso una zanja de más de dos metros de ancho y más de 30 centímetros de profundidad. Después, una camión hormigonero culminará la tarea.
Las obras de infraestructura interna del aeropuerto, con una inversión de $50 millones, que ayudarán a la organización y comodidad de los pasajeros de vuelos nacionales e internacionales, ya están finalizadas. Se instalaron dos nuevos ascensores, dos escaleras mecánicas y se agrandaron los baños para el sector de arribos nacionales e internacionales. Se amplió el sector de embarque con módulos desplegables que adaptarán la sala de espera, en la que también habrá un área de gastronomía.
En una tercera etapa, luego del 6 de mayo, está previsto trabajar sobre la pista principal (denominada 02-20) y además, en la zona de rodaje para Aviación Civil. Se realizarán obras en el estacionamiento de vehículos para triplicar la capacidad, con mejoras en las vías de acceso y tendrá un inversión de $120 millones.
Empresa constructora
Construcciones Electromecánicas del Oeste SA (Ceosa) fue la empresa que ganó la licitación para la remodelación de las pistas del aeropuerto. De origen mendocino, es una de las constructoras más grandes del país. Tiene una plantilla de 2.000 empleados y el 70% de sus contratos son de obra pública en: Buenos Aires, Neuquén, Salta, Tucumán, Jujuy, La Rioja, Catamarca, San Juan, Chubut y Chaco.
Con más de 40 años de vida, esta empresa mendocina participó de la última etapa de refacción del aeropuerto El Plumerillo, en Mendoza, que demandó una inversión total de $1.200 millones.