El tribunal de la Ciudad Judicial de General Roca (Río Negro) que lleva adelante el juicio por la muerte del salteño Daniel Solano, quien fue visto por última vez el 5 de noviembre de 2011 en un boliche de Choele Choel, quiere acelerar la declaración de testigos y los alegatos para poder dar un veredicto en agosto, luego de la feria judicial.
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El tribunal de la Ciudad Judicial de General Roca (Río Negro) que lleva adelante el juicio por la muerte del salteño Daniel Solano, quien fue visto por última vez el 5 de noviembre de 2011 en un boliche de Choele Choel, quiere acelerar la declaración de testigos y los alegatos para poder dar un veredicto en agosto, luego de la feria judicial.
El proceso judicial comenzó en febrero pasado y tuvo varias dilaciones por diferentes circunstancias, entre ellas la muerte del padre de Daniel, Gualberto, denuncias por aprietes de policías a testigos y la ausencia de varios testigos citados a declarar.
Solo la querella, integrada por los abogados Sergio Heredia y Leandro Aparicio, propuso 370 testigos, pero hasta ahora dieron sus testimonio solamente 100 y falta que lo hagan otros 200, luego de la ausencia de varios de ellos.
"El objetivo del tribunal es tratar de tomar todos los testimonios que restan y llegar a los alegatos en los últimos dos días antes de la feria, y quedaría la sentencia para después de la feria", dijo al diario de Río Negro uno de los tres miembros del tribunal de juicio, el juez Oscar Gatti.
Los magistrados pidieron a las partes que depuren las listas de testigos y que se sumen días de audiencias, de ser necesario, que se realicen por la tarde. Hasta ahora son solo los martes y jueves.
"Nos está pasando que los testigos se reducen a 5 o 6 personas y perdemos una jornada que podría ser completa para ir adelantando", dijo al mismo medio la jueza María Evelina García Balduini, quien aclaró que el pedido de acelerar los tiempos, no implica que las partes tengan que desistir de testigos.
En el caso están imputados los policías Sandro Berthe, Pablo Bender y Juan Francisco Barrera, presuntos coautores del delito de desaparición forzada de personas en concurso real con vejaciones. Pablo Andrés Albarrán Cárcamo, Pablo Roberto Quidel y Diego Vicente Cuello, presuntos partícipes primarios en el delito de desaparición forzada de personas, y Héctor César Martínez, presunto partícipe secundario.