Los salteños se despertaron ayer con un 20 de junio trágico a causa de un siniestro vial que segó la vida de tres personas. Ocurrió a las 6 en la autopista de acceso a la ciudad, a la altura de localidad de Cobos, donde se produjo un impresionante choque entre un automóvil y un camión de una empresa de lácteos.
Por causas que se tratan de establecer un Citroën C4 conducido por Joel Dan, de 27 años, que se dirigía a la capital salteño, se salió de su carril y luego de atravesar la platabanda de 50 metros ascendió al carril contrario e impactó de frente con un camión de la empresa de lácteos Cosalta. En este vehículo viajaban el conductor Edgardo Colina, 35 años, con residencia en Salta, y su acompañante Martín Pacheco, de 27 años, oriundo de la localidad de Rosario de la Frontera
A raíz de la tremenda colisión el camión volcó en la banquina y se prendió fuego, en tanto sus ocupantes salieron despedidos por el parabrisas. Pacheco fue arrollado por las ruedas del transporte y Colina quedó aplastado por la caja. Por su parte, el conductor del Citroën quedó aprisionado entre los hierros retorcidos. Los tres murieron en el acto. Se informó que el joven Dan vivía en la localidad de Campo Santo y que era un aspirante de la Escuela de Suboficiales de la Policía de la Provincia.
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Los salteños se despertaron ayer con un 20 de junio trágico a causa de un siniestro vial que segó la vida de tres personas. Ocurrió a las 6 en la autopista de acceso a la ciudad, a la altura de localidad de Cobos, donde se produjo un impresionante choque entre un automóvil y un camión de una empresa de lácteos.
Por causas que se tratan de establecer un Citroën C4 conducido por Joel Dan, de 27 años, que se dirigía a la capital salteño, se salió de su carril y luego de atravesar la platabanda de 50 metros ascendió al carril contrario e impactó de frente con un camión de la empresa de lácteos Cosalta. En este vehículo viajaban el conductor Edgardo Colina, 35 años, con residencia en Salta, y su acompañante Martín Pacheco, de 27 años, oriundo de la localidad de Rosario de la Frontera
A raíz de la tremenda colisión el camión volcó en la banquina y se prendió fuego, en tanto sus ocupantes salieron despedidos por el parabrisas. Pacheco fue arrollado por las ruedas del transporte y Colina quedó aplastado por la caja. Por su parte, el conductor del Citroën quedó aprisionado entre los hierros retorcidos. Los tres murieron en el acto. Se informó que el joven Dan vivía en la localidad de Campo Santo y que era un aspirante de la Escuela de Suboficiales de la Policía de la Provincia.
Los primeros auxilios llegaron desde el destacamento policial de Cobos y minutos después lo hicieron los equipos de Bomberos, quienes centraron su trabajo en sofocar el incendio del camión que se prendió fuego por el estallido del tanque de combustible. Minutos después arribaron varias ambulancias del hospital Joaquín Castellanos de General Güemes y otras del hospital San Bernardo. Pacheco fue el único al que los médicos examinaron a su arribo y comprobaron que estaba si vida. Los profesionales debieron esperar que las otras dos víctimas sean rescatadas para poder cumplir con su labor. En ambos casos determinaron que habían muerto en el acto. En tanto, los peritos de la División Criminalística de la Policía se abocaron a la tarea de determinar las causas del trágico accidente. Por ese motivo el tránsito con dirección sur quedó interrumpido por espacio de tres horas.
Los expertos analizaban varias hipótesis en torno a las causas del siniestro. Todo indica que el Citroën circulaba a alta velocidad y que luego de salirse del carril atravesó sin obstáculos la platabanda donde el terreno no es muy hondonado. De esa manera el auto invadió el carril contrario y se encontró de frente con el transporte que circulaba en sentido opuesto. “Todo indica que el conductor del camión no tuvo tiempo de reaccionar”, opinó un perito consultado.
Una de las teorías que se manejan es que el joven pudo haberse dormido y que por la velocidad que circulaba no tuvo tiempo ni siquiera de frenar. Otra de las hipótesis es que el Citroën haya tenido un desperfecto mecánico, posiblemente un reventón de neumático.
También circularon versiones de que el auto fue rozado por otro vehículo y que por eso Dan se salió del carril y protagonizó el fatal derrape. Sin embargo, las fuentes consultadas por El Tribuno señalaron que en un principio no se habrían encontrado evidencias de que eso haya sucedido.
Pesar por la muerte de los jóvenes
Hondo pesar causó en el departamento General Gemes la muerte del joven Joel Dan, quien era hijo de una conocida familia de la localidad de Campo Santo. El muchacho era hijo de la subdirectora de una escuela del lugar. La docente recibió la terrible noticia cuando se preparaba para asistir al establecimiento educativo con motivo de los actos por el Día de la Bandera en el pueblo.
En tanto que su hijo se dirigía a la Escuela de Suboficiales de la Policía de la Provincia para participar del desfile por este acontecimiento patrio en Finca La Cruz. Dan había ingresado como aspirante a ese cuerpo porque su deseo era ser policía. La familia Dan recibió las condolencias de los vecinos que en gran número se concentraron en el domicilio. Joel era un joven muy querido y todos lo reconocían por sus actos solidarios.
La tragedia también provocó el mismo impacto en la empresa de lácteos Cosalta, con la muerte de sus empleados Edgardo Colina y Martín Pacheco. Ambos se dirigían al departamento General Gemes para cumplir con el diario reparto de la mercadería a los clientes de la empresa en la zona.