Para evitar que cuando llueva con intensidad el agua cruce de un lado al otro y provoque cortes en la ruta nacional 9/34, la concesionaria del peaje, la empresa Autovía Buenos Aires a Los Andes, viene desarrollando importantes obras en el sur provincial.
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Para evitar que cuando llueva con intensidad el agua cruce de un lado al otro y provoque cortes en la ruta nacional 9/34, la concesionaria del peaje, la empresa Autovía Buenos Aires a Los Andes, viene desarrollando importantes obras en el sur provincial.
Uno de los trabajos más importantes se desarrolló en el kilómetro 1441, cerca del puesto de control de Gendarmería Nacional, en El Naranjo, donde existía una alcantarilla en desuso que fue acondicionada por completo y además se hicieron obras complementarias. Allí el verano pasado hubo numerosos inconvenientes debido a que cuando se producían tormentas con intensidad se inundaba toda la cinta asfáltica. Incluso el agua la cruzaba de un lado al otro como si fuera un río, por lo que hubo cortes en el tránsito.
La alcantarilla estaba prácticamente abandonada y tapada por lodo y malezas. Con el uso de personal, camiones y una importante inversión se despejó todo el sector de ambas banquinas con una ardua tarea de limpieza y mantenimiento.
Pero además, hacia el este de la cinta asfáltica se ejecutaron obras de defensa y encauzamiento. El objetivo es que las aguas que provienen de los campos de la zona y bajan de oeste a este, por la pendiente que hay en el lugar, circulen sin problemas cuando se produzcan precipitaciones intensas.
Un muro de contención
Por otra parte, en el kilómetro 1446, cerca de Yatasto, en Metán, se tuvieron que hacer tareas similares, pero debido a la erosión de los campos. En ese sector, hacia el este de la banquina de la transitada ruta nacional 9/34, Autovía tuvo que construir un muro de contención para evitar las consecuencias que provoca el avance de las aguas durante las tormentas que castigaron a la zona, inclusive en el otoño pasado.
En años anteriores el norte quedó aislado, debido a estos antecedentes, Vialidad Nacional, impulsó obras de defensa y encauzamiento a la altura del río Las Cañas, en el límite entre los departamentos de Metán y Rosario de la Frontera.
Esto se debe a que, por ejemplo, en febrero 2016 el norte del país quedó prácticamente aislado debido a que las aguas del río se llevaron a su paso un terraplén del sector norte del puente que apuntalaba gran parte de su estructura.
Medidas preventivas
Debido a ello se tomó la determinación de cerrar el paso vehicular hasta tanto se pudiera reconstruir la estructura de nuevo. Fue prácticamente un caos y muchos automovilistas y camioneros quedaron varados en Rosario de la Frontera y Metán.
Además, una gran cantidad de personas regresaban de Tilcara, donde pasaron el tradicional carnaval norteño.
Cabe destacar que el terraplén que el agua arrastró en ese momento fue el mismo que sufrió daños en 2011, cuando el río cortó literalmente al puente carretero.